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Los alumnos salen de la clase de pociones y todos comienzan a esparcirse por el pasillo, tras un par de pasos Hannah nota como una mano rodea su muñeca y se gira asustada para saber quién es.

—Ven —le pide Draco.

Su cara es un cuadro, y de los feos; sus ojos estaban rojos, y bajo ellos grandes bolsas de ojeras, su piel estaba más pálida que de costumbre y su voz es ronca. Sus labios están secos y con alguna que otra raja en ellos y todo su cuello está arañado de rascarse, señal de que está estresado. Su pelo todo despeinado y su ropa un poco arrugada.

Hannah no le dice nada ya que se queda muda cuando puede divisarlo bien. En clase no le había puesto los ojos encima por tal de no seguir dándole vueltas al coco, pero ahora era prácticamente imposible.

Hannah mira a Hermione mientras anda cogida de la mano de Malfoy y se encoge de hombros. Hermione se despide de ella con la mano y entonces Hannah se gira hacia Draco.

—¿Qué pasa? —le pregunta la chica.

—Espera.

Los chicos andan rápidamente hacia la Torre de Astronomía y cuando llegan Draco cierra sus ojos sintiendo el aire frío pegar en su rostro.

—¿Me explicas que hacemos aquí? —vuelve a decir Hannah.—Tenemos clase.

Draco la sienta en el suelo y él se sienta en frente suya mirándole a los ojos.

La ojiazul muerde su lengua preparándose mentalmente para lo que viene y le aguanta la mirada al platinado. Su respiración es un poco rápida y sus manos tiemblan en sus piernas.

Draco se queda unos minutos en silencio y después agarra sus manos con las suyas. El tacto de ambos es contradictorio, pues Draco tiene su piel fría y Hannah caliente, pero así se complementan bien.

—Dentro de cuatro días —Draco aprieta sus labios en una fina línea.

—¿Qué pasa dentro de cuatro días? —pregunta Hannah en un hilo de voz.

—¿Recuerdas cuando te dije que algún día iríamos a Hogsmeade? —Hannah asiente despacio.—Dentro de cuatro días iremos, ¿vale?

—¿Y por qué en cuatro días? ¿Por qué no ya?

—¡No, Hannah! —Draco alza un poco su voz e instantáneamente cierra sus ojos fuerte.—Lo siento —suspira y vuelve a mirarla.—Tiene que ser dentro de cuatro días.

Tengo que despedirme. Piensa para sí mismo el chico.

—Vale —Hannah frunce el ceño y coge aire.—¿Estás bien? —le pregunta.

Draco aparta su mirada y sus ojos comienzan a picar.

—Sí, claro —vuelve su mirada hacia la chica y le sonríe.—Todo bien.

—Vale... Tengo que irme a clase, tengo con Snape y ya llego bastante tarde. Me va a matar —la chica hace el amago de levantarse pero Draco tira de su mano hacia él y la estrecha contra su pecho.

—Dame un beso antes —le pide.

Hannah sube su cabeza y le da un beso al chico. Introduce su lengua en su boca y sus lenguas empiezan a moverse al mismo ritmo. Draco sujeta la mejilla de Hannah mientras con su otra mano sujeta su cintura y Hannah agarra su túnica con fuerza.

—Me tengo que ir —dice separándose la chica y se levanta.

Hace su camino hacia la escalera y cuando pone el primer pie en el escalón, Draco vuelve a llamarla.

—Nena —le dice haciendo que se gire nuevamente.—Te quiero.

Hannah sonríe y con un "yo más" se va de ahí y deja al platinado solo.

Hannah Potter | Draco Malfoy [✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora