Hannah Potter | Draco Malfoy [✓]

xxiii

—Buenos días, chicos —dice la profesora Dolores Umbridge entrando en la clase.—Título Indispensable de Magia Ordinaria —camina a lo largo de la clase mientras mueve su varita y en la pizarra se escribe lo que ella dice.—T, I, M, O, más conocido como T.I.M.O. Estudiad mucho y seréis recompensados, de no hacerlo las consecuencias pueden ser... severas —dice seria para después sonreír hipócritamente.

Hannah la mira con sus cejas levantadas y rueda los ojos apoyándose en su mano y soltando un suspiro.

Umbridge la mira y tuerce un poco su cabeza, para después fruncir el ceño.

—¿Algo que aportar, señorita Potter?

—Nada de nada, señora Umbridge —le responde de la misma forma, irónicamente.

—Profesora, soy profesora Umbridge, no señora.

—Yo soy solo Potter, no señorita —le devuelve Hannah.

La profesora hace fuerza con sus manos y vuelve a sonreír de la misma manera que antes.

—Claro —masculla.

Toda la clase se inunda en un silencio, como siempre que Hannah tiene una pequeña discusión con algún profesor, y seguidamente, Umbridge carraspea.

—Vuestra instrucción para dar esta materia ha sido alarmadamente irregular —los libros que están encima de su mesa comienzan a moverse por todo el aula depositándose cada uno en cada uno de los pupitres de los alumnos.—Pero os complacerá saber que desde ahora seguiréis un curso de magia defensiva estructurado e implorado por el Ministerio.

—¿No hay nada aquí sobre el uso de hechizos defensivos? —pregunta Hermione mirando las páginas del libro.

—¿Hechizos? —Dolores suelta una carcajada y mira a la castaña. —No entiendo por qué deberíais utilizar hechizos en mi aula.

—¿No vamos a usar magia? —pregunta Ron esta vez.

—Aprenderéis hechizos defensivos libres de riesgos —explica la profesora.

—¿Para qué nos servirá? Si nos atacan no estaremos preparados —habla por fin Harry apoyando a sus amigos.

—Los alumnos que quieran preguntar algo levantan la mano —dice rápidamente la mujer.

Harry, entonces, mira a todos y suspira negando con su cabeza. Hannah en cambio se queda perpleja ante el comportamiento de la profesora con él.

—El punto de vista del Ministerio es que un conocimiento teórico será suficiente para superar los exámenes que es en definitiva el conocimiento de toda escuela —dice caminando de un lado a otro delante de los alumnos.

—¿Y cómo se supone que esta teoría nos va a preparar para lo que nos espera fuera? —pregunta Harry.

—¡No hay nada fuera! —exclama Dolores riéndose.—¿Quién te imaginas que podría atacar a niños como vosotros?

—Pues no sé... mmm, tal vez ¿Voldemort? —replica Hannah y todos comienzan a cuchichear entre ellos mientras que el semblante de la profesora cambia a uno serio.

—Voy a dejar una cosa bien clara —dice acercándose a los hermanos quiénes estaban sentados juntos.—Se os ha dicho que un tal mago oscuro anda suelto por ahí de nuevo, eso es mentira.

—¡No es mentira, yo le vi, luché con él! —gritan al mismo tiempo ambos hermanos.

—¡Castigados, los dos! —grita esta vez la profesora.

—Entonces según usted Cedric Digory murió porque le dio la gana —replica Harry.

—La muerte de Cedric fue un tráfico accidente.