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Yoongi observó en silencio a Sunnie, quien limpiaba la casa con desespero, como si una visita importante o el mismo Kumamon en persona fuese a llegar al lugar. Después, vio como Sunnie corría a su habitación— dejándole antes un plato de galletas recién horneadas en la mesa junto al sofá, una taza de leche y el control remoto—, con la excusa de tener que darse un baño porque apestaba.

Yoongi, con su olfato súper desarrollado por ser un híbrido de gato, no sintió ningún olor feo provenir de ella, así que no entendía porque Sunnie tenía que bañarse.

Finalmente, él vio a Sunnie salir, vestida diferente a lo habitual. Traía una falda color rosa pálido, una camiseta a rayas y el cabello peinado de forma bonita, incluso él pudo ver una ligera capa de maquillaje en el rostro de su humana.

Él híbrido movió su nariz y olfateó, frunció el seño.— Hueles asqueroso, ¿Te pusiste ese perfume que te regaló ese amigo secreto del que nunca me quieres contar? — preguntó.

Y es que desde que conoció a Sunnie, Yoongi había oído hablar un par de veces de ese "amigo secreto", que ella tenía. Ese hombre que siempre le regalaba cosas caras y bonitas, que solía enviarle flores de vez en cuando y que la llamaba otras tantas veces poniendo a Sunnie de buen humor.

Quien quiera que fuese ese sujeto, Yoongi lo odiaba. Él le estaba robando a Sunnie desde antes.

— Joder, Yoongi. Apestas.— sé quejó Sunnie, obligando al híbrido a levantarse y ayudándolo como pudo a caminar hasta el baño.

Él de cabellos negros se dejó hacer, lo suficientemente metido en sus pensamientos como para no saber que sucedía.

La camiseta de Yoongi desapareció, luego lo hizo su calcetín. Yoongi parpadeó, moviendo sus orejas sorprendido cuando captó los movimiento de Sunnie.

— ¿Me la vas a chupar? — soltó lo primero que pasó por su mente.— ¿Haremos el 'sin respeto'?

Sunnie estaba arrodillada frente a él, en la habitación, desabrochándo sus pantalones.

La chica arrugó la nariz, un brillo diferente al habitual en sus ojos y un pequeño sonrojo en sus mejillas.— No estoy tan desesperada, gracias.

Yoongi frunció el seño, sus ojos brillando con diversión.— ¿Y por qué me estas desnudando entonces?

— Baño. Te voy a dar un baño. Apestas. — soltó la chica con una mueca.

La cara de Yoongi se deformó en una mueca de puro terror.

En ese momento cell sintió el verdadero terror. jpg

— Sunnie, te prometo que no me voy a portar mal de nuevo.— soltó con rapidez mientras la chica se deshacía de su pantalón.— Sunnie, no quiero, por favor.— lloriqueó.

Ella lo llevó al baño. Ignorando sus quejas.

— ¡Sunnie, no! — Yoongi ya estaba llorando como si lo fuesen a matar.

Él ya estaba metido en la bañera, completamente desnudo— sí, a Sunnie le valió madres verlo desnudo—, una bolsa de nailon cubriendo el yeso en su pierna. Sunnie comenzó a llenar la bañera con agua tibia hasta que estuvo llena de una forma aceptable.

La cola de Yoongi estaba herizada y mojada completamente, mientras que sus uñas —ahora garras— se encontraban aferradas a los lados de la bañera. Yoongi siseó cuando Sunnie comenzó a lavarle el cabello.

Él odiaba bañarse. 

— ¡Cuidado con las orejas!— chilló.

— Lo sé, Yoongi. No es la primeras vez que te baño, ¿Recuerdas? — bufó ella, tratando de ocultar el creciente sonrojo en sus mejillas que parecía aumentar con cada segundo.

— ¡No me frotes tan fuerte la espalda! — chilló de nuevo Yoongi.

Sunnie lo ignoró.

— ¡Ten cuidado, casi me entra champú en los ojos!

Sunnie lo ignoró nuevamente.

— ¡No me gusta el aroma de ese acondicionador!

Sunnie inhaló fuertemente sintiendo que su paciencia se iba.

— ¡No me gusta ese jabón, cambialo!

La chica trató de ignorarlo.

— ¡No, no, no!

— Yoongi...— Sunnie advirtió.

— ¡Ya dejame! ¡No me quiero seguir bañando!

— ¡Callate! — le gritó Sunnie.

Yoongi guardó silencio, sus orejas se agacharon por la pena de haber sido regañado. Sunnie suspiró y tomó la cola del híbrido, comenzando a lavarla.

Él híbrido soltó un maullido extraño, que sono casi como un gemido. Un sonrojo cubriendo sus mejillas pálidas. Y su mirada más oscura de lo habitual se enfocó en Sunnie, mirándola tan fijamente que ella se sintió intimidada.

— ¿No que no querías hacer el delicioso? — preguntó con burla.— ¡Atrevida! — bromeó.

Sunnie parpadeó, mirándole confundida.

Yoongi sonrió juguetón.— Verás, mi querida y deliciosa, humana. Eso que estas tocando es mi cola.

Sunnie asintió.

— Y la cola de los gatos, la cola de híbridos de mi especie, es intocable por una razón. — explicó, acercándose a Sunnie.

Su rostro a centímetros de el de ella. Estaban tan cerca que si se acercaban un poco más podrían besarse.

— Es una zona erogena.— ronroneó Yoongi, frotando su nariz contra la de Sunnie.— Me estabas tocando esa parte prohibida, chica traviesa.

Yoongi esta en modo seductor, ajio ajio.

— ¿Q-qué? — tartamudeó Sunnie

Un aroma picante y delicioso invadió el lugar, Sunnie fue capaz de sentirlo débilmente. A ella le gustó ese aroma.

— ¿Quieres aparearte conmigo? — preguntó, pasando su lengua áspera por los labios de Sunnie.

La chica soltó un jadeo, Yoongi aprovechó para besarla. Él no solía dar besos a menudo, nunca había dado un beso, de hecho, pero sentía que había nacido para eso en cuanto sus labios se unieron con los de Sunnie en un beso hambriento. La necesidad y el deseo eran palpables en aquel acto, Sunnie se dejó llevar, aferrando sus delicadas manos a los hombros de Yoongi.

Sin embargo, y cuando Yoongi llevo sus manos hasta la cintura de Sunnie para a pegar su cuerpo desnudo y mojado al de ella, la chica pareció tomar conciencia de lo que ocurría y lo apartó de un empujón. 

Sunnie se sonrojó sin saber que decir.— Uh, eh... Voy a... Voy a, uhm, tengo que preparar algunas cosas, entonces, Eh... avisame cuando termines de bañarte. — balbuceó, sin mirar al híbrido.

Sunnie huyó del lugar rápidamente, sintiendo su cara arder y su corazón latir rápidamente, mientras la vergüenza se apoderaba de ella. Sin importarle el hecho de que Yoongi se había resbalado en la tina gracias al empujón que ella le dio y que se había golpeado, posiblemente, en la cabeza y hundido de lleno en el agua de la tina.

A este paso Yoongi se nos va a quedar tonto de tanto golpe que se da.

Él híbrido se estaba ahogando, pero una sonrisa boba se encontraba dibujada en sus finos labios. Burbujas se formaban mientras se le iba el aire.

Sunnie, quien estaba en la cocina se tocó los labios sonrojada y pensativa. Una pequeña sonrisa se dibujo e en sus labios de forma inconsciente.

Cielos, eso había estado intenso.



¿Apuesto a que no se espereban ese beso? 😏

Preparense porque habrán muchos más de manera sorpresiva.

Entonces...

Hasta la procsimaaaaaaa.💋

 Lil meow meow |myg|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora