Reaccionando demasiado tarde para cuando Carter retrocede y empuja de su cuerpo lejos de la cercanía de Jaden, quien toma de la otra mano y la acerca con más furor, reventando Carter en estrés, sacudiendo su cuerpo en negativa, odia como la trata, odia cada parte de él, lo detesta.
-¿Cómo te atreves en maldecirme y si quiera mencionarme?-Raspa cada palabra con repudio total.
Elevando Carter su mirada en furor, no sabe que le ocurre, pero por alguna razón se siente en la valentía de desquitar su odio y dolor en él, porque seguramente no lo volverá a ver en su vida.
Después de este oficio terminado, no lo volverá a ver.
-¿Cómo si quiera se atreve a espiarme?-Palpitando de un ojo Jaden al oír esas palabras, ¿Qué ha dicho?-¡No, no sólo eso! Llevarme con la misma emperatriz para repartir sus quejas, amenazar mi vida misma como si no valiera nada, sin embargo para muchas personas valen más la mía que la suya y la primera en pensarlo, ¡Soy yo!-Sacude sus brazos logrando su liberación, tras la sorpresa de ver su valentía, desde que descubrió que era el príncipe ni siquiera se atrevía a hablarle, pero ahora es una persona completamente distinta.
No es Hazel Foster, sino Carter, quién revienta en rabia tras los insultos, quién se agarraba a golpes con los niños que se burlaban de ella, aunque por alguna razón, no podría hacer lo mismo con chicas. Quién Jaden conoció el primer día, después el segundo encuentro y su verdadera personalidad ser escondida al descubrir que es el príncipe, ¿Qué cambio ahora? ¿Qué perjudico su comportamiento?
-¿Y qué una niña simple cómo tú podría valer más que necesitar de alguien más? Igual a un parásito, esos no significan nada.-Tranquiliza su temperamento Jaden, no puede descifrar con la mirada lo que realmente esta sucediendo, porque bien sabe, de la existencia de los documentos, ¿Se siente protegida por alguna ayuda?
No tendría sentido enojarse por escuchar una vulgaridad más suya, han sido incontables murmuros con peores palabras a su nombre, controlar los rumores es cómo contar la arena en la playa, incontrolable y un verdadero dolor de cabeza innecesario. Sin embargo la mención de Cedric lo puso atento, tampoco se quedo quieto, esperando saber, sino investigo primero.
Logrando saber que Hazel y Cedric fueron pareja sentimental, por bastantes años y por alguna razón, murió.
Sonriendo con malicia por la noticia, ¿De qué se jacta Hazel, por un amor a metros suyos bajo tierra? Eso es miserable.
-No es de su incumbencia.-Responde tajante Carter, dando la vuelta para salir de la recamara, ya no desea verle más, ni por un segundo más.
-Con respecto a su primer amor, lastima que la llama tanto como se encendió, se apago, no la de la pasión, sino la de la vida.-Carter se detiene abruptamente ante la mención de Cedric, frunciendo el ceño, ¿Cómo él pudo enterarse? Tragando duro, ¿Cuánto sabe?-No es de extrañar que de la misma raza se busquen multiplicar, pero por favor,-Bufa en burla-ni siquiera es virgen.
Todo el cuerpo de Carter se estremece ante sus palabras sin delicadeza, sino con maldad sin compasión desplomo en ella, estrujando todo su corazón por una humillación más, ¿Quién diablos se cree él para denigrarla? Cuando él mismo es el más sucio del castillo, lo detesta, lo odia tanto que puede...joder, ¡ella puede!
Girando todo su cuerpo en rabia, corriendo hacia ese hombre quién no se irá sin darle un golpe, un golpe que no podrá cubrir todos aquellos que se merece, que tuvo que contenerse y levanta su puño, aventando de este hacia su pecho y otro más, aventando con mayor fuerza, sin embargo no ocasionan nada en Jaden, quien Hazel lucha con tal de desquitar su furor en él, sin poder contar de las veces que le golpea.
Su rostro hierve en vergüenza, porque recuerda el rostro de su madre, no, la madre de Hazel pero por alguna razón se siente tan personal que destroza su alma de sólo imaginar que la deshonro, que ella todo el tiempo le enseño a darse a respetar y esperar un buen hombre para casarse con él, sin embargo no es más que una amante a brazos de su mejor amigo.
Quién tuvo que ser entregada tras haber caído en sus encantos.
Carter jamás ha tenido relaciones, pero Hazel si, ella no le hubiera importado hacer tal acción, en cambio los sentimientos de Hazel influyen de gran manera que esas palabras calan hasta los huesos, temblando sus brazos de tanto golpear.
-Le detesto, le detesto como nunca he detestado a nadie más.-Murmura Carter, con la mirada nublada de tristeza y agonía.-Jamás será mejor que yo, porque yo al menos...-Eleva su mirada contenida en lágrimas y sus mejillas sonrojadas a más no poder, con los cabellos castaños alborotados.-hice el amor con el hombre que más ame en mi vida y nosotros, estuvimos a punto de casarnos, en cambio usted, lleva mujeres a la cama sin un fin definitivo,-Baja sus palmas de su pecho.-me da lastima, me da lastima su vida sin sentido.
Gira su cuerpo mareada, sin poder creer lo que ha dicho, sin bien en sus recuerdos o los de Hazel jamás a podido ver esas escenas, sino unas pocas que le ocasionan sonrojar a estallar, realmente nunca ha tenido experiencia en esa zona. Dando pasos algo torpes para salir de ese cuarto de una vez por todas, en cambio Jaden queda sin habla por unos segundos, sin poder creer lo que ha dicho esa chiquilla estúpida.
Elevando una sonrisa de lado que marca sus hoyuelos y alza su mano a su muñeca de Hazel, girando de su cuerpo, al igual cuando lo empuja contra la pared y ella suelta un gemido del golpe, abriendo bien sus ojos de la sorpresa, conectando de inmediato ante unos iris destilantes de deseo, diversión y curiosidad, tan dorados cómo llamativos.
Sus cabellos negros revueltos caer sobre sus cejas pobladas y su mandíbula marcada hace que su corazón comience a latir a ritmos no saludables.
¿Qué me sucede?
-Entonces enséñame,-Lame Hazel sus labios, tragando duro tras oír eso, sintiendo su garganta de pronto seca.-hazme entender que tus labios son mejor que los de cualquier mujer.
-Ja...Jaden.-Le nombra por primera vez, sin formalidades, lo que hace enloquecer por fin al príncipe e inclinar su rostro para impactar sus labios con los suyos.