Algo líquido me cae sobre la cara asustando me. Me levanto de golpe y veo a Tris con una botella de agua y sonriendo ampliamente. Iba a decirle algo, a ponerla fina a base de insultos pero sus palabras han sido "Habitación-Cuatro-Ahora". Muy a mi pesar me arreglo decentemente y salgo con ella en dirección a la habitación del instructor. Cuando llegamos veo que está en el balcón así que salgo detrás de Tris.
–Buenos días– dice en cuanto me ve.
–No son buenos días si me han mojado la cara para despertarme– bufo mirando mal a mi amiga –Id al grano, ¿Qué pasa?–
Ambos me hacen una señal para que guarde silencio y se acercan más a al borde asomando la cabeza. Cuando repito su acción me encuentro con camiones metiendo cosas en los almacenes de Osadía.
–Son eruditos– digo frunciendo el ceño –¿Qué hacen aquí?–
–Llevan descargando cosas aquí desde hace unos días– explica Cuatro mirando hacia abajo –Pude coger algo de uno de los camiones–
Saca de su bolsillo un frasco pequeño que contiene un líquido amarillento. Lo agarro entre mis manos y frunzo el ceño.
–Sé supone que es un suero que inhibe la propia voluntad– comienza a decir Tris –Por desgracia creo que esto tiene que ver con nosotros, los Divergentes–
–No puede ser... ¿Nos quieren pinchar esta cosa?– pregunto incrédula –No tienen derecho–
–Mentirán a todo el mundo para que no hagan preguntas– añade mi amiga negando varias veces.
Vigilamos un poco más por si acaso vemos algo nuevo, pero nada. Entramos de nuevo a la habitación de Cuatro y tomo asiento en la cama frotando me la cara varias veces, no me creo que vayan a hacer eso a la gente. Por los altavoces se empieza a escuchar una voz masculina que llama a todos los iniciados a presentarse para hacer la prueba.
–No me digas que es hoy– susurro algo asustada.
–Tranquila Eris, todo irá bien, solo piensa como alguien de Osadía– me dice Cuatro poniendo su mano en mi hombro.
Hace dos semanas cuando llegué a Osadía no creía que todo se fuera a torcer tanto.
De reojo veo como Cuatro le da la mano a Tris, así que miro a mi amiga alzando las cejas, creo que tiene mucho que contarme. Ayer no durmió en su cama, supongo que disfrutó de la compañía de Cuatro hasta esta mañana.
Nos encaminamos hacia el edificio de cristal, donde será la prueba definitiva. Mientras esperamos fuera le pregunto a Tris sobre nuestro instructor/amigo, pero parece evitar el tema. La extorsiono un poco más hasta que me suelta todo.
–Sabía que tarde o temprano pasaría– digo orgullosa al saber que se besaron –Pero, ¿Enserio le dijiste lo de ir despacio?–
–Sí, no sé aún si estoy prepada– dice ella haciendo una mueca.
–Bueno, no te obligues, tiene que salir solo– añado acariciando su espalda.
Primero llaman a Chris que parece estar muy segura de sí misma, luego llaman a la rubia, Tori y Cuatro le van dando ánimos y algún que otro consejo. Miro a mi alrededor y estoy sola, soy la última. Intento escuchar todo lo que pasa dentro, pero no oigo nada y eso me frustra, solo espero que Tris lo consiga. Unos minutos después sale Tori a llamarme, enseguida me levanto y camino con ella dentro del gran edificio. Está lleno de gente mirando a través de monitores, por lo que intuyo, pondrán ver todo. Me dirijo hacia el sillón y antes de acomodarme miro a Eric que me susurra un "suerte" seguido de un guiño. Sonrío algo incómoda mientras Tori me pincha el suero para que comience la simulación.
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ʀᴇᴅᴇɴᴄɪᴏ́ɴ / ᴇʀɪᴄ
Science FictionEn la ciudad de Chicago, cuando cumples los dieciséis, estás obligado a elegir el futuro que quieres llevar. Algunos se quedan donde están. Otros se marchan en busca de libertad. Y un pequeño porcentaje de jóvenes pone su vida patas arriba después...