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Capitulo 53

Ismael.

Aunque el ambiente era un poco incómodo entre nosotros, nunca me cansaba de compartir un momento con ella, aunque solo fuera eso, un simple momento. La mejor manera de celebrar mi debut, con la única chica que he llegado a amar, hasta la obsesión. Mi álbum debut lleva el titulo del pecado del faraón, aunque casi no creo en los dioses de mis padres, creo que ese titulo representa lo que yo seria si hubiera tenido una vida pasada, como mi hermano y la canción titulada someone es por ella, por lo que quiero decirle y quiero que sepa desde el fondo de mi corazón.

Me apresuro a subir a mi moto después de todo nuestro recorrido en el día de hoy, cuando ya la había dejado en su casa, aunque no quería separarme tan deprisa de ella, pero nuestras edades son un impedimento para estar juntos y por lo poco que he podido observar sobre ella es que no le intereso en lo personal ni sentimental.

Solo soy el hermano mayor de su mejor amiga, conduzco algo molesto por mis repentinos pensamientos, los mismos que destruyen mi gran imaginación, puede ser que sea el único que se aferre a algo que nunca se hará realidad, ella es la chica que siempre e deseado en lo mas profundo de mi corazón.

Cuando estoy en la casa me apresuro a ir directo a mi habitación, ya que desde que pueda independizarme me iré de esta casa, ellos siguen algo molestos por mi elección de carrera, la música siempre a sido mi pasión y mi forma de expresar lo que tengo dentro de mi.

Los dias siguen igual a los demás, tengo que ir a la universidad y seguir con la rutina de en las noches ir a los bares a tocar, la veo de vez en cuando viene a visitar a mi hermana, para ser tan pequeña es sumamente hermosa, debería tratar de hablar mas con ella, debo dar el primer paso, aunque lo encuentre molesto y tedioso a mi parecer, ya que todas las chicas llegan a mi solas.

 Termino de tocar la guitara en el área de la piscina para que ha nadie le molestara mi ruido, ya que he tenido unas semanas algo movidas para mi gusto, me quito los auriculares para dejar la guitarra de lado y quedarme mirando hacia el vacío.

- Cuando cantas te ves mas maduro, sigue haciendo lo que amas - susurra alguien a mi lado y me giro algo sorprendido por la similitud en su voz.

- Es bueno saber, que no soy tan indiferente para ti - agrego cuando la veo sentada a mi lado y esta me ofrece una bebida que tenia entre sus manos.

- Solo soy algo reservada y nadie sabrá que te admiro desde lejos - suelta de pronto haciendo que mi corazón se acelere con esas simples palabras como si espere siglos por eso - tus canciones son hermosas y gracias por la cena de aquella vez, te seguiré apoyando desde la oscuridad - murmura algo incomoda y sin notarlo ya había tomado su mejillas entre mis manos.

- Me agrada que te gusten mis canciones, la mayoría son sobre un amor unilateral - la suelto de pronto cuando veo que se siente incomoda con mi toque.

- Ten algo de valor, corre a decirle a esa chica que te gusta, siempre tendrás mi apoyo - sonríe con todo su esplendor y deseo besar sus labios y perderme por primera vez en ella.

- Eres esa chica, ¿Que opinas de ello? - pregunto de pronto y esta comienza a reír sin ocultar su soprensa.

- Deja de jugarme una broma, soy joven y tu estas preocupado por tu carrera - susurra algo nerviosa y me levanto llegando a su lado para quedarme a centímetros de su rostro para sentir el aire caliente que expulsa su cuerpo.

- No estoy jugándote una broma Hina, todos saben que me gustas desde que te vi aquella vez junto a mi hermana, así que no pases de mis sentimientos y déjame quererte - suplico y ella se ve como un gato asustado.

- Soy la mejor amiga de tu hermana, no podríamos estar juntos - dice nerviosa y la callo besando sus labios y por lo que puedo sentir ella es nueva en todo esto, deseo ser el único que pruebe sus labios.

Disfruto de sus labios lo que queda del rato y cuando tengo la necesidad de respirar nos alejamos, pero todavía añoro sus labios, es como un sueño y no quiero desperdiciar el momento, ella solo me observa con los ojos rojos, no se si es de rabio o porque esta sonrojada. 

- ¿Por favor? dime algo - susurro nervioso cuando veo que no responde a mi toque.

- Sabes algo, todos se molestaran, pero me canse de ser la chica buena que todos esperan que sea - susurra antes de abrazar mi cuerpo y me apresuro a tomar su pequeña cintura para volver a unir nuestros labios - ¿en que nos convierte esto? - pregunta cuando nos separamos.

- Seremos una pareja, te amo desde la primera vez que te vi - afirmo saltando de alegría al saber que ella acepta mis sentimientos y son mutuos, siempre tuve la certeza de que me rechazaría sin pensarlo demasiado por su personalidad reservada y algo callada.

Pero me gusto saber que siempre será mutuo entre nosotros. Aunque nuestras primeras citas fueron algo ocultas para todos y siempre salíamos con algo de precaución para evitar que nos vieran los demás, ya que estaba ganando fama de manera rápida y sin medidas, fui conocido de la noche a la mañana y comenzaron a juntarse los trabajos y las cosas que debía hacer, lo bueno es que siempre nos hacíamos de tiempo para estar nosotros dos solos.

El pecado del Faraón (saga Faraón) IIIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora