CAPÍTULO 3

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Nuevamente un largo pasillo está frente a mi, repleto de espejos tal como antes, así que avanzo igual como lo he hecho desde siempre. Camino con detenimiento y me detengo justo frente al mismo espejo que en cada ocasión atrapa mi atención.

La pregunta que vuelve a mí en éstos precisos momentos es siempre:

¿Por qué sueño lo mismo?

No entiendo, no sé cómo hay alguien allí dentro. Es un espejo, pero no tiene un reflejo,no, tiene a alguien atrapado dentro de el.

Aunque en ésta ocasión es totalmente diferente a la vez anterior.

Puedo ver a un hombre sin camisa y de espaldas, noto que parece tener un tatuaje en forma de serpiente que abarca parte de su espalda y hombro izquierdo. No hay mucha luz, así que no puedo detallar muy bien su rostro cuando ve de reojo en mi dirección, pero si me percato de ese mismo color rojizo en sus ojos.

De pronto despierto en la oscuridad de la habitación en la que ahora debo dormir mientras permanezca en éste lugar.

« Estúpido sueño, siempre hace lo mismo conmigo.»

Afortunadamente me he acostumbrado tanto a el, que puedo retomar mi lugar en la cama cómodamente y no prestarle atención para poder volver a dormir.

En la mañana no sucedió nada interesante, solo fuí despertada para ir a desayunar y mientras esperábamos a ensayar con Zedd, cada quién estaba enfrascada haciendo sus cosas dentro de la habitación.

- Entonces ¿Qué se supone que es lo que tengo que hacer? - Pregunto con las manos en el aire e intento hacer el desgraciado paso que Zedd nos intenta mostrar a las chicas y a mi.

Resulta que él es el instructor de baile para el harem y en pocas palabras el encargado de cualquier cosa con respecto a ellas.

« Bueno, eso fué lo que entendí.»

El tal Rashid normalmente está al tanto de las chicas es por medio de los comunicados de Zedd. Aparentemente pocas veces las chicas están cerca del Príncipe.

Al parecer hay una razón muy lógica para ello. De hecho, por lo que he notado no puede ser nada bueno. Y todo apunta a que es obra de lo que ellos llaman "El Consejo", el cual está conformado por una cuerda de vejestorios (palabras de Zedd, no mías.)

Uno de los integrantes del consejo es Alí, el hombre que hasta ahora sé, fue el encargado de mi secuestro. Bueno, en realidad, el que hizo la orden. Los que me secuestraron fueron sus guardias.

En fin, por lo que escuché y se me explicó, ésta gente considera que las mujeres somos solo algo para su entretenimiento e instrumentos que ellos pueden usar a su antojo.

También creen que anteriormente el príncipe Rashid le daba mucha importancia al harem, por lo que tienen un ojo sobre todos sus movimientos con respecto a las chicas.

A pesar de que el harem fue algo que dejó el antiguo Rey a su heredero y en lo que nadie más puede inmiscuirse, esos viejos lo toman como una debilidad y lo han catalogado como alguien poco capaz de liderar solo por ser alguien que le de importancia a un grupo de chicas y otras razones que desconozco.

Oh, también supe de una de ellas, que cada una fue comprada por una cantidad exuberante de dinero a sus familias. Rashid pagó por las tres más jóvenes del grupo.

Al principio eso me indignó de sobremanera, pero luego se me explicó que de no haber sido por él, ellas estarían en algún otro lugar siendo probablemente violadas por algún imbécil, ó, incluso podrían estar muertas porque habrían sido vendidas a hombres más poderosos.

¿Quién es Rashid? ✓[Completada. SIN EDITAR.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora