BUSCANDO EL AMOR ❤️Kacchako❤️

CAPITULO IX

Estaban cerca de llegar al castillo así que el rubio pudo respirar con tranquilidad, desvió su mirada hacia la castaña la cuel se había recostado en su pecho hace ya unos minutos atrás y tenía que admitir que no le molestaba en lo más mínimo, pudo ver sus tersas piernas las cuales por culpa de la manera en que estaba sentada se le alzaba la bata de manera sensual y Bakugou tuvo que reprimir las ganas de querer acariciarla, era obvio que la detestaba claro que sí pero era un maldito hombre con un demonio y él también tenía necesidades, tuvo que regañarse mentalmente y desaserse de todos esos jodidos pensamientos que invadían su mente de nuevo, detuvo el caballo señal de que habían llegado.

-Oi cara redonda- estaba más que fastidiado y más porque esa inútil se había quedado dormida- ¡despierta maldición ya llegamos!

-¿Ah?- es lo único que logra decir y se talla un ojo con su brazo derecho.

Siente como Bakugou desciende del caballo y se para a su lado para extender sus brazos hacia ella.

-¡Ven de una puta vez!- su cólera era más que evidente.

Ochaco no dice nada solo se agacha un poco para que el rubio pueda tomarla de la cintura y así poder bajar.

-Aahh!.

Se queja por el dolor en su tobillo y su agarre se vuelve firme al brazo de chico mientras él la toma con fuerza de la cintura para que no vaya a caer así que la toma de las piernas para poder cargarla y así poder cruzar el jardín.

Ochaco estaba más que apenada y es que el la llevaba en sus brazos ¿y si estaba muy pesada?, tal vez no la aguante tanto y puede agotarlo.

-Bajame- habla de manera tenue como un susurro.

-No digas tonterías- no la voltea a ver- apenas y puedes pararte.

-Eso no importa- responde inmediatamente- bajame...estoy muy pesada y podrías terminar cansado- sus mejillas estaban demasiado rojas y para su desgracia Bakugou ahora sí la está mirando.

-¿Qué estupideces dices?- suelta una pequeña risa- estás más liviana que un puto palo.

Ochaco iba a contestar de nuevo pero fue interrumpida por alguien más.

-Vaya que bonito espectáculo- habla Toga- ¿No puedes esperar a casarte Katsuki?

-Deja tus tonterías Toga- habla de manera dura- ¿Dónde está mi madre?

-No lo sé- ve a Ochaco- ¿Te encuentras bien?

-Y-yo...

-Esta lastimada- interrpe a la castaña cosa que no le gusta para nada a la rubia- necesito que llames a mí madre.

-Oh por dios cuanto lo siento no lo sabía- finge preocupación- ahora mismo la busco.

Una vez que la rubia desaparecio de la vista de ambos Bakugou continúo con su caminar para ir a la recámara de la castaña, cómo pudo abrió la puerta para que pudiera entrar, se dirigió a la cama de la mujer y la depósito.

-G-gracias- aún seguía con el rubor en su mejilla haciéndola ver adorable.

-Para la próxima vez- comenzó a alejarse de la cama- fíjate por dónde vas idiota- estaba por salir hasta que una delicada voz lo detuvo.

-B-bakugou-kun- vio como él rubio volteo- y-yo...te debo una disculpa.

-¿Ah?- no comprendía lo que estaba diciendo esa tonta- ¿A qué demonios te refieres?

-N-no debí haberte gritado- desvía la mirada- tú quisiste ayudarme y yo solo te grite- vuelve a verlo- lo siento...

Bakugou fórmula una sonrisa de lado y eso a ella la derrite pues nunca había visto un hombre tan apuesto como él, ve como se va acercando a ella y lo único que logra hacer es voltear hacia la derecha dejando su cuello expuesto muy apetitoso ante los ojos carmies.