CAPITULO XXIV PARTE 2

384 48 9
                                    

-¿Dónde estabas?- pregunta un rubio demasiado molesto.

-¿Katsuki?- sonríe para apasiguar su nerviosismo- ¿Qué haces aquí?

-Es lo que yo quiero saber mapache- se acerca a ella- ¿En dónde demonios estabas?

-En mi cuarto obvio.

-Mentira- mete sus manos a los bolsillos de su pantalón- hace unos treinta minutos fueron a buscarte a tus aposentos y adivina qué, no estabas ahí.

Mina traga duro, después de la magnífica noche con Kirishima durmió profundamente, no se dio cuenta de la hora y carajo era tardísimo.

-¿Estás ocultandome algo?- la mira con mirara penetrante.

-No.

-Que no vuelva a pasar mapache- comienza su caminar hacia la salida- sino mis padres te pondrán guardaespaldas y no creo que quieras eso.

Estaba nerviosa no podía negarlo, se dirigió a su alcoba para luego acostarse en su cama, recordó como fue tocada y besada por Kirishima y el sonrojo no se hizo esperar, estaba feliz era verdad había hecho lo que siempre soñó con él, después de esa situación fueron más precavidos, trataban de no mostrar tanta complicidad enfrente del rubio pero...dios era difícil...

Estaban besándose en los aposentos de la joven, ya era más de media noche y se supone que él ya no debería estar ahí, pero da la casualidad que una pelirrosa lo arrastró hasta su alcoba para luego atacar sus boca, lo beso con mucha necesidad y pasión, Kirishima tardo en corresponder al beso necesitado que ella le estaba dando.

-Mina...cariño...- le era difícil hablar con una chica sobre sus labios- espera linda.

-Te quiero- se bajó su bata de dormir- te necesito...

El pelirojo delineó su delicado cuerpo con los ojos, era hermosa maldición, un maldito pecado andante, se acercó a ella y la agarró de su cintura desnuda para luego atraerla a su cuerpo con cierta brusquedad.

Estaba excitado y jodidamente enamorado, porque es verdad amaba a esa mujer con toda la expresión de la palabra, comenzó a besarle el cuello se podía escuchar los leves suspiros que comenzaban a salir de su boca, la llevó a la cama quedando él arriba de ella, dando comienzo a la sesión de besos, Mina desabotonaba su camisa y la bajaba con cierta desesperación, quería sentir a Kirishima dentro de ella.

Deslizó su bata por su cuerpo dejándola desnuda, se separó un poco para poder desabrochar su pantalón y así bajarlos con brusquedad, no soportaba un segundo más sin ella.

Se introdujo dentro de ella procurando ser delicado, la beso con pasión mientras comenzaba a embestirla, Mina acariciaba a su espalda lo cual provocaba que dejara marcas en ella mientras que Kirishima se mantenía firme con sus brazos para no aplastar a la joven con su peso.

-Aahh...- se escuchaban los gemidos de la dulce joven.

-¿Te gusta?- dijo con tono seductor.

-S~siii...aahh!

-Sshhhh- le dice en el oído- te pueden escuchar nena...

-¡N-no...N-no m-me impr-importa!

Las embestidas del joven se volvieron erráticas, la pasión, el deseo y el amor que esas dos almas se estaban mostrando era verdadero y sincero, ambos se entregaban a la lujuria y al amor que sabían que no podía ser pero no podían evitarlo.

-¡Aahhh!- gime la chica con desesperación- T-t-te ¡AMOOOO!

Ya no tenía control de su pelvis, Mina solo podía gemir y suplicar por más, comenzó a besarla de nuevo cuando sintió el orgasmo de ella para luego él venirse unos segundos después, Kirishima se quedó quieto tratando de regularizar su respiración, la miro y pudo ver en sus ojos cuánto anhelo y amor tenían.

BUSCANDO EL AMOR ❤️Kacchako❤️ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora