CAPITULO LIV

265 44 6
                                    

Al día siguiente Mina se levantó temprano para ver a Tetsutetsu...sentía la necesidad de saber cómo se encontraba además de que extrañaba su compañía y carisma, la forma en que le hablaba, en como le sonreía además que siempre la escuchaba de manera atenta sin aburrirse de escucharla parlotear, cuando estuvo enfrente de la puerta y antes de que su mano se colocará en el pomo tomó aire y con valor entró a la habitación del joven sin tocar y fue recibida por dos empleadas.

-Oh buenos días mi lady- ambas hacen reverencia.

-¿Y el conde Tetsutetsu?- pregunta asombrada.

-El joven se marchó está mañana- responde la joven- dijo que no podía esperar a que despertara pero le dejó una carta mi lady.

La empleada toma el sobre que estaba en la mesa de noche para luego entregársela a la pelirrosa, Mina ve el sobre de papel con mucha sorpresa pues no se imaginaba de que se iría al día siguiente.

-Retirense quiero estar sola...

Ambas asienten para luego salir del cuarto que le perteneció al peliplata, Mina se sienta en la cama para estar más cómoda...comienza abrir el sobre con el corazón acelerado.

TETSUTETSU TETSUTETSU
Querida Mina lamento mucho no despedirme como se debe pero tampoco lo vi necesario, ya no quería causarte daño ni dolor creí que lo mejor que podía hacer es escribirte una carta.
Espero no te molestes por haberte dejado un trozo de papel en vez de darte la cara pero considero que así es mejor para ambos, cuando tú estés leyendo estas líneas yo ya estaré en un barco sin rumbo fijo, me voy porque ya no tenía caso seguir en el castillo mucho menos en el pueblo...quiero que seas feliz...reso porque encuentres la felicidad que yo sé que un día tuviste, si yo me quedaba iba a ser un impedimento para que tú pudieras seguir adelante. Eres una mujer maravillosa Mina, tienes tantas cualidades que esta hoja no me alcanzaría a enumerarlas...decidí romper lo nuestro porque sentía que era lo correcto, yo me enamoré de otra mujer sin quererlo y tú aún amabas al primer hombre que estuvo en tu vida.
No te juzgo por absolutamente nada y considero que está bien...hay amores que dejan una gran huella que es incapaz de borrarse, no tengo idea de quién sea pero te aconsejo que si las cosas pueden resolverse entre ustedes porque no hacerlo, ¿No crees que ya han sufrido bastante?, lucha por tú felicidad, si ese hombre te hace feliz lucha por él...en la vida hay que tomar riesgos cariño sino no tiene caso vivir, espero de todo corazón que algún día podamos vernos de nuevo y poder ver a una mujer distinta...ojalá aceptes mis disculpas...
Con cariño Tetsutetsu...

Las gotas de sus lágrimas caían sin parar mojando el trozo de papel, tuvo que ponerse la mano para evitar que sus sollozos sean escuchados, se sentía mal por Tetsutetsu pero también le agradecía... él había hecho algo de lo que ella no era capaz de hacer...agarro la carta y salió del cuarto sin importarle que su rostro estuviera estropeado por sus lágrimas, comenzó a correr por los pasillos del castillo hasta llegar a las caballerizas, tomó al primer caballo que vio y se montó para comenzar con su trayecto...su corazón latía de manera apresurada, estaba temerosa y nerviosa pues sabía que lo que iba hacer no estaba correcto, cuando estuvo enfrente de la mansión se detuvo abruptamente y se bajó de ahí lo mas rápido posible.

-Buenos días mi... lady- vio como Mina paso de largo sin responder al saludo.

La pelirrosa abre las puertas, se detiene para tomar un respiro y luego dirigirse a la sala, no lo vio así que continúo con su trayecto... buscó en la cocina, en las habitaciones de la planta baja, en su despacho...en sus aposentos pero no estaba ¡¿Dónde se había metido?!

-¿Busca al joven amo?

Mina ve el rostro de una de las jóvenes que trabajan ahí, asiente con la cabeza.

BUSCANDO EL AMOR ❤️Kacchako❤️ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora