JUNTAS HASTA EL VALHALLA.

ELLEN

Despues de que las princesas les dieran la noticia a sus novias, ambas dudaron un poco, pero al pensar en que estarían mas tiempo con sus novias aceptaron, fue rápida la mudanza, ya que no tenían muchas pertenencias, y Astra y Astryd se empeñaron en comprarles nuevas cosas, cuando les presentaron sus nuevas habitaciones quedaron boquiabiertas, eran enormes y lujosas para aquella época, tenían chimenea y una enorme cama con dosel, sus habitaciones estaban frente a frente, con la excusa de que si querían algo solo tenia que llamar a la habitación de enfrente, todo marchaba bien, hasta que aquella información llego a los oídos de la Reina Sajona—QUIERO QUE LES DEN UNA HABITACION EN EL CALABOZO—grito la sajona haciendo que los guardias y sirvientes retrocedieran.

--cariño, ahí no seria cómodo, además las habitaciones que les dieron son las únicas que quedan libres—exclamo la Jarl.

--PUES CONSTRUYAN UNAS POR LAS CABALLERISAS—

Los sirvientes asintieron con temor y salieron de ahí, Kara solo sonrio y se acerco abrazando a su esposa por la cintura pegándola a su cuerpo—estúpidas tipas roba hijas—

--calma mi amor, ¿ cuando dejaras de ser tan posesiva?—

--CUANDO ESAS DOS DEJEN DE EXISTIR—grito haciendo reir a la danesa.

Cuando llego la hora de la cena, la mirada de Lena Luthor era sin duda escalofriante—no creo que tu madre este muy contenta de tenernos aquí—exclamo Kassandra en la mesa aun lado de Astra.

--no te preocupes, mi madre te va adorar—

--presiento que me va a dorar en aceite en una cazuela en medio del pueblo, como a Darkseid—contesto viendo como Lena doblaba una cuchara con facilidad haciéndola tragar grueso.

--¿no tienes hambre cielo?—pregunto Astryd preocupada viendo a Imra.

--un poco, me ayudo mucho el brebaje de Ravaa—

--te dije, ella es asombrosa—

La cena paso tranquila, a pesar de las miradas de Lena las cuales solo quedaron en amenazas en el aire.

Todos se iban a sus habitaciones a descansar, aun que Lena ordeno a cuatro guardias custodiar la puerta de kassandra e Imra.

Yasuko iba tranquilamente a su habitación, cuando fue jalada hacia la biblioteca, sonrio con malicia pensando en que era Eliza-- sabes que ya no tenemos que escondernos, ¿verdad?—exclamo bajando sus manos juegatonas hacia la entrepierna de la Arias, pero lo que toco la hizo abrir los ojos con sorpresa—oh por Ordin--

Al dia siguiente el sol salió, y una feliz Yasuko paseaba por los pasillos del castillo, hasta que se encontró con sus madres antes de llegar al comedor --¿ que te paso?—pregunto Asami preocupada.

--me cai de la cama y me pegue—contesto Yasuko sonriendo.

--¿estas segura?—pregunto Korra.

--muy segura— yasuko se despidió de sus madres caminando hacia la mesa esperando a las demás.

Cuando las Arias entraron, eliza de inmediato vio aquel enorme ojo morado en el rostro de Yasuko--¿ que paso?—pregunto viendo a su madre.

--se cayo—contesto la Berserker alzado sus hombros.

--me cai—contesto Yasuko con indiferencia.

Todos estaban en la mesa desayunando con tranquilidad, a excepción de Lena y sus miradas de muerte hacia las dos bandidas.

Ese dia en la tarde, Asami les encargo a sus hijas ir al mercado por algunos pedidos para Soma, las chicas asintieron y se dirigieron al mercado—si nos separamos lo haremos mas rápido—exclamo Yasuko dándole la mitad de la lista a su gemela.