Capítulo XLVII

5.2K 283 25
                                    

Alexander

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Alexander

Nunca entendí la frase "nunca sabes lo que tienes hasta que lo pierdes" y ahora que la perdí a ella, la única luz que tenía en la oscuridad, puedo encontrarle un mediocre significado. Llegué a la conclusión de que esa frase es una mierda, una completa estupidez disfrazada de arrepentimiento, todo el mundo sabe lo que tiene, sólo que piensas que esa persona jamás se irá de tu lado, crees que nunca la perderás.

Error, lo harás, la perderás.

Incluso yo, un hombre frívolo que carece de sentimientos, que pensaba que no necesitaba a nadie para sostener su vida, creí que ella nunca me abandonaría, que no se iría, me aproveché de su ingenuidad creyendo que su amor soportaría todos mis demonios, pero estaba tan equivocado. la única mujer que realmente me amó y soportó mi oscuridad se ha ido por mi maldita culpa, porque nunca supe apreciarla como se merecía

Jamás intenté ser lo que ella quiso, al contrario, fui el peor de los hombres cuando ella no lo merecía, un completo idiota que no supo cuidarla. Me arrepiento, en serio lo hago y espero que no sea tarde para remediar todo el daño que causé.

Mis demonios se intensificaron desde el día que se fue de mi lado, desde el día que me abandonó. El dolor era demasiado que pensé que este acabaría con mi existencia, no soportaba un puto día sin ella. Era como una enfermedad que me dejaba en un estado desesperado, expuesto, y aborrezco la sensación de ser vulnerable.

Odié no tenerla, pero al final de cuentas ese era mi castigo, no la merecía y, hasta este momento, no creo merecerla. Ella es demasiado buena para mí.

Demasiado inocente para un demonio que busca corromperla.

No he sabido quererla como ella quiere, pero es difícil hacerlo cuando toda tu vida viviste en el miedo y el tormento de ser abandonado. Siempre recordando que cualquiera puede herirte si lo dejas entrar. Mi madre fue la primera mujer que rompió mi corazón, ella me dejó en la oscuridad, una de la que nunca supe salir y tampoco quise hacerlo así que aprendí a vivir en ella.

Y es que si tú propia madre no te quiere lo suficiente como para quedarse contigo, ¿por qué otra mujer lo haría?

Todas las mujeres eran iguales, sus promesas falsas y vacías, jurándote amor eterno y cuando por fin compartes con ellas un pedazo de tu oscuridad y los demonios que llevas en el alma, lo primero que hacen es abandonarte sin mirar atrás. Nadie es capaz de quedarse, ni siquiera Eva. Esa mujer a la que ahora desprecio con todo mi ser y a la que pronto tendré que enfrentarme por lo ocurrido aquel día.

Sin embargo, Camille es diferente, lo es, ella me mostró el mundo desde otra perspectiva, ella trajo color a mi vida que solo se encontraba en blanco y negro, ella es lo que siempre necesité y que me negaba a aceptar. Desde el fondo de mi ser, sabía que ella cambiaría todo con su llegada, lo que no sabía si era para bien o para mal:

No estoy lista para soltarte (+18) ✔️©️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora