¡Voy a hacerlos caer!

Capítulo 17: Winchester

El estrés provocado por el trabajo era grande pero por el ejercicio y la dieta que mantenía, al menos podía controlar los síntomas de mi enfermedad.

En la tarde, salí a cabalgar con Sombra, un caballo negro que nadie quería usar ya que no se pudo domesticar pero Evan tampoco quería regalarlo.
Por diversión lo elegí y también porque no pude traer a Erin del Ducado.
Batallamos un poco pero me dejó montarlo y fuimos de paseo los tres. /Ezra, Jack y Sombra/
Sólo el sonido de el trote del caballo era audible, la paz que se sentía allí era sólo un recordatorio de que lo peor iba a llegar.

Cuando iba llegando la noche me dispuse a volver rápidamente pero nuevamente, me perdí.
Me sentía asustado y ni sombra ni Ezra sabían como volver.
Bajé del caballo y lo dejé descansar mientras veía a los alrededores.
De pronto escucho el chillido de miedo de Sombra y luego su trote alejarse.
Rápidamente vuelvo a ver pero habían unos lobos blancos y sombra ya no estaba.
Retrocedí lentamente pero para mi mala suerte caí en una trampa de cazadores y esta me atrapó el tobillo con fuerza y me dejó colgando. Los lobos estaban felices de tener su festín para comer al instante.
La fuerza de las soga no tenía la fuerza suficiente para romperme un hueso pero en mi estado actual dolía horrores.
Los lobos se acercaban y saltaban intentando alcanzarme pero hacía lo posible para evitarlo.
Luego, se escuchan unos disparos y los lobos corrieron asustados.

-Genial... Evan me matará...

Suspiré frustrado y escuche pasos acercarse hasta que vi a alguien.

-T-tú... ¿Duque?

Logré pronunciar una vez mi vista se acostumbró a la oscuridad.

-Es raro reencontranos en esta situación Ezra.

El Duque era conocido por su tono "familiar" pero también despectivo a la hora de hablar.

-Si, es bastante raro Duque Winchester.
Le agradezco que me haya ayudado... ¿podría bajarme?...

Me sentía sumamente mareado y mi nariz había empezado a gotear sangre.
Athal no parecía sorprendido.
Tomando un cuchillo tomó la soga y la cortó, esperé el impacto de lleno en mi cabeza pero el la sujetó dejando que únicamente mi cuerpo se lastime. De todos modos lo agradecía que de esa altura nadie bueno saldría de un golpe en la cabeza, no quería que mi muerte sea más rápida.

-G-gracias Duque... la casa Briefadel está en deuda con usted.

Me levanté por mi mismo y sacudí mi ropa para luego limpiar la sangre de mi nariz con un pañuelo.

-Por si acaso... a visto a un-

Fui interrumpido de inmediato.

-¿Un caballo negro? Si, lo he atado a unos metros de aquí.
Vamos, te llevaré a casa. Ya es de noche y te están buscando.

-Se los agradezco... y ¿a caso?...

-Si, Ezra, vine a visitar a tu hermano en el nombre del segundo príncipe y me pidió que ayude en tu búsqueda antes de darme mi charla.
Andando, tengo cosas más importantes que hacer.

Se dió media vuelta y caminó por lo cual tambaleando le seguí.

Monté a Sombra pero estaba muy mareado y el lo notó. Subió conmigo y llevando su caballo al lado volvimos al Ducado.
Me regañaron como a un niño, me vió un doctor y luego me bañaron y dieron de comer. Vergonzoso la verdad, pero no podía hacer nada.
Agradecí al Duque y fui a dormir nuevamente mientras el y Evan hablaban.