¿Qué hablo de pesadilla? Si son dos.
Mi "querido amigo" el Márquez Boyle y su alteza el príncipe Arya Echarmin.
Me quedé asqueado y nervioso al verlos y sin dudarlo hice una reverencia.-Saludo a la estrella del imperio, que la gloria y la bendición de la diosa le acompañe.
-Levante la cabeza, Duque Briefadel. Me alegra verlo por aquí. Vine con el Márquez a buscar unos regalos para mis caballeros personales, pronto serán sus cumpleaños.
-Saludo también, Márquez. Y su Majestad es muy considerado, no cualquier noble haría tal cosa, es un acto muy respetable de su parte su alteza.
-Oh, por favor. No es mucho por todo lo que han hecho por mi, inclusive estoy buscando darles más.
Además, si el duque lo hace ¿por qué yo no?-Me causa felicidad que su alteza piense de esa forma. Ya no le quitaré más tiempo. Fue un gran honor poder hablar con usted.
-No hacen falta tantas formalidades, somos primos después de todo. Espero que un día de estos me visites y tengamos un enfrentamiento como en los viejos tiempos.
-Para mi sería un honor.
Que la gloria del imperio esté siempre consigo.Dije de nuevo con una reverencia. Aunque no lo admita, Arya siempre ama ser alabado, tanto así que nisiquiera dio tiempo a que Dorian hable, pero ¿Quién iría contra el príncipe?
Suspiré y no pasó desapercibida la mirada de enojo que me daba Dorian antes de salir con el príncipe.
Más tranquilo seguí comprando lo necesario y volví a casa con mis guardias.Para mi sorpresa, Dorian estaba allí hablando con Evan.
-¡Oh! ¡Ezra! Justo a tiempo, el Márquez tiene algo que hablar contigo. Anderson los llevará a la sala del té.
Ni bien fue nombrado, el mayordomo de Evan apareció y como dijo, nos llevó a la sala del té para luego retirarse a traer los bocadillos.
-¿Qué diablos te está pasando?
Exclamó Dorian con notorio enojo. Era extraño viniendo de él, quien siempre se mostraba tranquilo frente a Ezra.
-¡Márquez!
Dije a modo de advertencia.
-¡Cuide sus modales! Además ¿acaso no sabe que es de muy mala educación venir sin una invitación o cita previa?
-¿Es en serio, Ezra? ¿Qué te sucede ahora? Nuestra relación iba bien, pero me evitas, además dices estar mal y descansando pero te encuentro paseando felizmente por el mercado.
Oh, era eso. La "relación" de Ezra y Dorian. Calculando la fecha... estamos en el sexto día del cuarto mes del calendario imperial, para estos entonces el ya comenzó a verse con Charlotte...
Mi madre tenía razón "Hombre que cela algo oculta".-Disculpa, Dorian, pero el que descuidó esta "relación" fuiste tú. Además ¿qué con estos celos? ¿no acaso nuestra relación es secreta? No lo pudiste haber hecho más notorio frente al príncipe.
De todos modos... ¿Qué hay con Charlotte Uradel? La miserable hija de un conde...Dije con burla observando su rostro enojado. Lo único que entendí luego es que recibí una fuerte bofetaba.
-¡No te atreves a hablar de ella con esa sucia boca!
Estaba sorprendido, nunca me vi venir eso. Por mi deplorable condición física, mi nariz empezó a sangrar casi al instante y me sentí mareado.
Lo siguiente que Dorian hizo fue tomarme de la barbilla con brusquedad y besarme a la fuerza.
Intentaba separarme pero mi fuerza era nula contra la de el. Sentía que con ese asqueroso beso se llevaba mi energía.Mordisqueba y chupaba mis labios con fuerza, inclusive llegue a sentir mi propia sangre.
Tenía miedo, también Ezra y no podía gritar porque me callaba con su horrible beso.
Retrocedía hasta la mesa como pude a pesar de que no me soltaba. Tomé la punta del mantel y lo tiré hacia el suelo haciendo que todas las tazas se rompan.-¿¡Maestro!? ¡¿Que sucede?!
Dijeron mis dos guardias antes de entrar y ver aquella escena, yo siendo forzado por Dorian. Con la nariz sangrando al igual que mis labios, pero estos estaban hinchados, sin olvidar mi mejilla roja.
Para añadir la cereza del pastel, en algún momento me había puesto a llorar y era la escena pefecta.De la sorpresa Dorian me soltó dejándome caer sentado al suelo.
-¡¿Qué diablos hacen aquí?! ¡Malditos sin modales!
Sin decir nada, un guardia fue contra el inmovilizandolo mientras otro me ayudaba a pararme pero no dejaba de temblar, de verdad me había asustado.
-¿¡Cómo te atreves a tocarme, tú, un simple plebeyo!?
-En ese caso, te sacaré yo.
No se en que momento apareció Evan, pero no tenía una cara amigable como siempre y al verlo Dorian se quedó quieto.
Evan le tomó de los cabellos y después de arrastrarlo a la salida lo tiró en la calle frente a la mansión.
En eso, llamaron al médico y a pesar de que dije que podía caminar, un guardia me cargó hasta mi habitación.
Éste ya era un día muy largo.
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¡Voy a hacerlos caer!
FantasyEl mismo cliché de transmigrados pero gay. ________________ Jack Miller, un adulto joven que no destacaba en su vida diaria se queda dormido y despierta en medio de un bosque. Descubre que está en una novela que había leído y ahora es Ezra Briefadel...