Fairy tail. Una nueva esperanza y una última oportunidad

♛ CAPÍTULO 52 ♛

POV KASAI

No puedo evitar destruir el primer árbol que encuentro en el camino. Estoy ingresando en el bosque que oculta el claro, así que debo controlarme bastante para no dejar un camino que lleve a los intrusos a nuestro lugar secreto. Sí, el lugar de mis hermanos y mío, nos pertenece y solo los animales pueden colarse de vez en cuando.

Los malditos animales.

Nunca he podido entender su actitud conmigo, desde que tengo memoria me han rechazado y huído, siempre han actuado como si yo fuera una peste.

Lo eres.

¡No! No lo soy, sé que soy un buen niño, uno amado y que ama con locura. No soy lo que mi cabeza me quiere hacer creer. Por Mavis, es ridículo que mi cabeza esté en mi contra, casi puedo jurar que hay alguien más viviendo en mi cerebro, pero la idea es tan absurda que debo descartarla.

Antes de notarlo otro árbol cae frente a mí, ni siquiera recuerdo haberlo golpeado, pero mi puño está en llamas y no hay nadie más en este lugar. Suspiro con desánimo y absorbo las llamas restantes para no ocasionar un incendio. Estas situaciones pasan últimamente tan seguido que temo ir a mi casa y provocar un incendio. Finalmente llego al claro, está atardeciendo y el agua del lago se pinta de un hermoso color naranja. Un par de ciervos beben de él antes de dirigir sus miradas hacia mí y salir corriendo. ¡Malditos!

Como tú.

¡Basta! Jalo con fuerza mi cabello, el dolor de cabeza que me acompaña desde hace tantos días, logra disminuir un poco, al mirar mis manos unos cuantos hilos dorados se han quedado pegados en mis dedos.

Madre.

Camino hacia el lago y observo mi reflejo. El cabello rubio lo heredé de ella, los ojos verdes y la magia de Dragón Slayer vino de mi padre. Es innegable que soy su hijo de sangre, pero no puedo sentirme de esa manera.

Los magos más poderosos de Fiore son mis padres, mientras que mi hermana es la joven más hermosa y buena que conozco, ella muestra en cada poro de su ser que es hija de Lucy y Natsu, pero yo... siento que me recogieron de un orfanato en algún momento de mi infancia. ¿Cómo puedo ser pariente de personas tan maravillosas y perfectas? Mi cabeza está llena de malos pensamientos, de malas ideas, quiero lastimar, quiero hacerle daño a la gente, quiero destruir lo que me rodea. Soy malo, soy una persona mala que no merece la gran familia que tiene.

No mereces nada, solo odio y muerte.

Pero no quiero, quiero continuar con esta farsa en la que me convenzo de que soy alguien bueno que merece recibir amor, quiero que mis padres me sigan abrazando cuando vuelven de una misión, quiero que mi hermana me de besos en la frente cuando quiere demostrar que me quiere, quiero seguir tomando la mano de Akuma mientras caminamos por la ciudad, quiero seguir entrenando con mi hermano, quiero seguir siendo yo.

¿Quién eres?

No lo sé, al menos pensaba saberlo hasta hace poco tiempo. ¿Un mes? No, dos, cuando comenzaron las pesadillas, luego éstas llegaron al mundo real, para perseguirme dormido y despierto, por eso el dolor de cabeza no se va, porque no tengo paz en ningún momento. Ya no puedo ir en misiones con mis hermanos, siento que en cualquier momento los atacaré por la espalda, ya no puedo salir con Akuma, la idea de lastimarla nuevamente no me deja tranquilo. Si llego a herirla de nuevo... simplemente es mejor la muerte para mí.