Los años han pasado, la pelea contra Zeref queda atrás y todos en Fairy tail se dan la oportunidad de ser felices teniendo sus propias familias.
Nashi, la hija mayor de Natsu y Lucy trata de sobresalir por ella misma para no ser solo la sombra de l...
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POV NASHI
La persona parada frente a mí, el niño que vi crecer, que se pegaba a mi pierna para que jugara con él, el pequeño que lloraba para que lo dejara dormir conmigo, el que me recibía con una sonrisa cuando llegaba de una misión, mi pequeño hermano ¿era el gran asesino que por poco arrasa el gremio y acaba con mi vida hace tantos años?
Todo solo podía ser parte de una broma cruel y extraña, no podía ser así, no podía ser real.
–Kasai, deja de bromear... por favor, es suficiente. –Murmuré, una parte de mí siente que lo digo más para convencerme a mí misma que a él.
–Nashi... da un paso atrás. –Miré inmediatamente a Arashi, ¿me estaba pidiendo que me aleje de mi hermano? ¿Me dice que debo creer esta absurda mentira?
–No lo abandonaré, es Kasai, es mi hermano. –Le digo.
–No te estoy pidiendo que lo abandones, solo quiero... que no estés tan cerca. Estoy seguro de que puedes sentirlo, el aura de muerte que está emanando, si eso nos golpea... –Sacudió su cabeza y dio un paso hacia mí, no me resistí cuando me hizo dar un paso atrás, un paso lejos de mi hermano y me odié por eso, así como me hizo odiar a Arashi.
–Kasai, por favor. Regresa conmigo. No puedo creer que seas E.N.D. No puedo creer que hayas querido hacerme daño, no eres así, jamás lo has sido. Eres un excelente niño, un maravilloso hermano. ¡Me niego a creer todo esto! –Grité al borde de las lágrimas. Esto no puede estar sucediendo.
–Siempre tan ingenua. –La voz destilaba odio, la voz ajena al cuerpo de mi hermano, esa voz llena de maldad y desprecio hacia mí. La energía comenzó a condensarse alrededor de mi hermano. El cuerpo del venado muerto a sus pies se tornaba negro, como si la piel se estuviera pudriendo. Sentía la presión en mi garganta, estaba a punto de vomitar. Mi frente estaba húmeda por el sudor y los ojos me picaban, mi corazón estaba agitado, todos mis sentidos e instintos gritaban lo mismo. ¡Corre!
–Nashi, esto es... –Casi quería golpear a Arashi, la energía maligna desprendida del cuerpo de mi hermano me estaba enojando, sentía que debía descargar mi antes inexistente ira contra todo a mi alrededor. Noté como la mancha negra a los pies de Kasai seguía creciendo, pronto nos iba a alcanzar. De repente el aire cambió, un sudor frío recorrió mi espalda y mi vista se tornó borrosa. Esto era... la muerte. Mi pequeño hermano era la propia muerte... y venía por nosotros.
Sentí que todo llegaba a mí en cámara lenta, una presión agobiante aprisionaba mis pulmones impidiéndome respirar. Mis rodillas temblaron y poco faltó para que yo cayera de rodillas, unas manos firmes me sujetaron en el aire justo cuando un vapor oscuro comenzaba a salir del cuerpo de Kasai. Se expandía, crecía... y mataba. El vapor estaba consumiendo toda la vida alrededor y venía por nosotros. Sentí como era levantada en el aire y como me cargaban sobre un hombro conocido por mí, uno al que usé tantas veces para llorar. Antes de siquiera notarlo nos alejabamos de lo que antes era un claro lleno de césped verde, un río brillante y animales hermosos, ahora solo era una masa putrefacta de criaturas muertas y en su centro estaba Kasai, mi hermano.
