Dirty Elizabeth

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—¿Por qué lo hacías? —después de aquel baño y que meliodas encontrará algo de ropa que le quedara la había recostado en esa cama y le daba pequeños masajes ayudándola a entrar en calor. Aunque elizabeth se sentía en las nubes por aquella cama tan suave no podía evitar escucharlo.

—¿Qué cosa? —

—Robar— ella se tenso—Se que no fui el primero y aunque me alegra ser el último no comprendo que te llevo a hacerlo —elizabeth suspiro. Él merecía una explicación y no podía arriesgarse a romper su confianza por que sabía bien que sí lo volvía a hacer ya no volvería a darle otra oportunidad

—No todos tenemos la suerte de estudiar, graduarte y ser exitosos meliodas—este se quedó callado abrazándola —Yo cuando termine mi universidad me dedique a buscar trabajo, sabía de lo que era capaz pero nadie me daba trabajo por ser novata. Lo típico, me enamore de un hombre que decía apoyarme y que me sacaría de mi miseria, fue mi mayor error —

—Te estafo— elizabeth asintió

—No tenía mucho pero aún así me estafó y robo. Después de eso me chantajeo y me dijo que si no le pagaba una cantidad de dinero me iba a meter a la cárcel, era estúpida en ese entonces y me asuste mucho—meliodas apretó los puños de el enojo y siguió besando su cara para calmarse un poco—Fue cuando empecé a acostarme con hombres y a robarles, me sentía desesperada y me fui por el lado fácil de la vida. Tarde mucho tiempo pero cuando pague mi supuesta deuda ya me había acostumbrado a esa vida de mierda, me daba miedo intentar algo nuevo y decidí seguir así dejando de lado todos mis sueños—

—¿Cual era tu sueño? —la sonrisa que elizabeth puso fue suficiente para que meliodas besara sus labios

—Quería ser veterinaria—ahora más que nada estaba dispuesto a cumplir su sueño para hacerla feliz