Capítulo 57

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Esto indudablemente detuvo a Zacharias de estarse preguntando en voz alta si los dos Weasleys estaban en el equipo solo porque a Harry les caían bien, y comenzó a molestar a Peakes y Coote

-Claro, Coote no tiene la estructura habitual de un golpeador,- dijo Zacharias altivamente, -ellos tienen un poco más de músculo-

 -¡Aviéntale una Bludger!- le dijo Harry a Coote cuando voló por sulado, pero Coote, sonriendo abiertamente, prefirió dirigir la siguiente Bludger a Venus, quien estaba pasando a Harry en la dirección opuesta. 

Harry se mostró complacido de escuchar el sonido hueco que significaba que la Bludger había encontrado su marca. Por suerte Venus no había salido lastimada, pero esta vez Potter se había pasado.

Ella había visto como le decía algo antes de que la Bludger se estrellara en su contra.Parecía como si Gryffindor no pudiera hacer nada mal. Una y otra vez ellos anotaron, y una y otra vez, Ron paró los goles con aparente facilidad. Él estaba de hecho sonriendo, y cuando la multitud acogía una parada particularmente buena con un creciente coro de la favorita

 -Weasley es nuestro Rey,- pretendía conducirlos desde lo alto. 

-Se cree algo especial hoy, ¿no es así?- Dijo una Venus molesta, y Harry casi fue tirado de su escoba a la vez que Crabbe chocaba contra él, fuerte y deliberadamente. 

 Madam Hooch estaba deespaldas, y aunque los Gryffindor gritaron enojados, para cuando ella volteó, Venus y Crabbe ya se habían alejado. Con su hombro doliéndole, Harry aceleró detrás de él, determinado a embestirlo. ... 

-Y creo que Venus de Slytherin ha visto la Snitch!- dijo Zacharias Smith a través del megáfono. -¡Si, el ciertamente ha visto algo que Potter no ha visto!

Smith realmente era un idiota, pensó Harry, ¿No se había dado cuenta que lo habían chocado? Pero al siguiente momento su estómago parecía haberse caído del cielo Smith tenía razón y Harry no: Venus no se había alejado al azar; había visto algo que Harry no había visto: La Snitch volaba apresurada a lo largo arriba de ellos, destellando brillantemente contra el cielo azul claro. Su jugada habia sido buena, si no hubiese sido por ese momento Harry seguiría pensando que Nott era el buscador. 

Harry aceleró; el viento estaba silbando en sus orejas de manera que ahogó los comentarios de Smith o de la multitud, pero Venus aún estaba delante de el, y Gryffindor estaba sólo a 100 puntos arriba; si Venus llegaba primero Gryffindor perdería... y Venus estaba a unos metros de ella, con la mano estirada. 

-¡Ey, Venus!- gritó Harry en desesperación. -¿Malfoy ya te enseño la marca tenebrosa?-No supo qué fue que le hizo decirlo, pero Venus dudó; palpó la Snitch,la dejó escaparse por sus dedos, y la pasó de largo. 

Harry hizo una gran atajada hacia la pequeña y agitada pelota y la atrapó. 

-¡SI!- Harry gritó. 

Dando vuelta, se lanzó de regreso a tierra,sosteniendo la Snitch en su mano. Al darse cuenta la multitud de lo que había pasado, una gran aclamación iba en aumento que casi ahoga el sonido del silbato que señalaba el final del juego.

-Ginny, ¿A donde vas?- gritó Harry, que se encontraba atrapado en medio de un abrazo masivo en el aire con el resto del equipo, pero Ginny pasó volando a un lado de ellos, hasta que con un poderoso choque, se estrelló con el podium del comentador. 

Mientras la multitud chillaba y reía, el equipo de Gryffindor aterrizó a un lado de los escombros de madera bajo los cuales Zacharias se movía débilmente:Harry escuchó a Ginny decir desinteresadamente a una enojada Profesora McGonagall, 

-Olvidé frenar, Profesora, lo siento.

Riéndose, Harry se liberó del resto del equipo y abrazó a Ginny, pero lasoltó rápidamente. Evitando su mirada, Harry dio una palmada de aliento a Ron en la espalda, como si todas las riñas estuvieran olvidadas. 

A lo lejos vio como una enfadada Venus bajo de su escoba maldiciendo a todo el que se le atravesara, nunca la había visto tan molesta. 

El equipo de Gryffindor dejó el campo de Quidditch con brazos entrelazados, saludando a sus partidarios.La atmósfera en los vestidores era de júbilo. 

-¡Fiesta en la sala común,dijo Seamus!- gritó Dean profusamente. -¡Vamos, Ginny, Demelza!- 

Ron y Harry eran los últimos dos en los vestidores. Estaban a punto deirse cuando entró Hermione. Estaba torciendo su bufanda de Gryffindoren sus manos y se veía molesta pero determinada. 

-Quiero hablar contigo Harry.- Tomó aire. -No debiste haberlo hecho. Escuchaste aSlughorn, es ilegal.

 -¿Qué vas a hacer, nos vas a entregar?- demandó Ron. 

-¿De qué están hablando ustedes dos?- preguntó Harry yendo acolgar su túnica para que ninguno de los dos lo viera sonreír

-¡Tu sabes perfectamente bien de que estamos hablando!- dijo Hermione agudamente. -Tu agregaste al jugo de Ron poción de la suerte en el desayuno! ¡Felix Felicis!

-No, no lo hice,- dijo Harry, volteando de nuevo para verlos a ambos. 

-¡Si lo hiciste Harry, y eso por eso que todo salió bien, había jugadores de Slytherin que faltaron y Ron paró casi todas!

 -¡Yo no la puse!- dijo Harry, sonriendo abiertamente. Metió su mano dentro del bolso de su chaqueta y sacó la pequeña botella que Hermione había visto en su mano esa mañana. Estaba llena de poción dorada y el corcho aún estaba perfectamente sellado con cera. 

-Quería que Ron pensara que lo había hecho, así que fingí haberlo hecho cuando túestabas viendo.- Miró hacia Ron. -Tú salvaste todo porque te sentías con suerte. Lo hiciste todo por ti mismo.

Los Secretos De Una WeasleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora