Parque de atracciones 2

55 1 0
                                    

La tarde estaba cayendo sobre nosotros, todos estábamos sentados con un hot dog en la mano, ninguno con ganas de comerlo no antes de ver a Sophia vomitar su almuerzo después de haberse subido a una montaña rusa llamada, la máquina de la muerta. Todos nos miramos las caras, Sophia tenía cara de enferma mientras que Liam le daba pequeños movimientos sobre su barriga. Aun no era padre y ya se estaba comportando como uno.

-Yo... romperé este silencio porque yo si tengo hambre-dijo Niall mordiendo su hot dog, los chicos comenzaron a reír mientras que todas nosotras dimos el mordisco dudosas, ya al segundo mordisco éramos un grupo normal comiendo Hot Dogs, Harry siempre haciendo su chistes realmente malos y Louis siempre mejorándolos. Los recuerdos vinieron, desde aquella noche donde celebramos el cumpleaños de Perrie, el día en el que Harry volvió, Niall recordó el día cuando se supo todo, ocasionando un golpe a Harry de parte de Dylan...

-También se acuerdan cuando esta grandiosa mujer...-me señaló Niall-me ayudó a enamorar a esta preciosa chica-esta vez miraba a Lenna, todos hicieron bulla, èl se levantó y se subió a la silla llamando la atención de los que estaban pasando a nuestro alrededor- ¡Señores y Señoras!-en eso se pararon algunas personas, hasta que se fue haciendo una docena de personas, todos estábamos riéndonos-Esta chica de aquí-le tomó la mano a Lenna, ella al principio sonreía mientras que negaba con su cabeza hasta que Niall hizo una de sus miradas encantadora, hechizando a Lenna, haciendo que se levantara y sonriera al pequeño publico a nuestro alrededor quien sorprendentemente estaban aplaudiendo-Esta hermosa y sorprendente chica, es mi chica... es mi novia... y tengo que admitir delante de ustedes...-nos señaló-y ustedes-señaló a las personas-Que esta chica me cambio absolutamente la vida, me hace feliz siempre... cuando sonríe, cuando me mira...cuando respira...-èl se estaba perdiendo en ella-estoy tan agradecido por tenerte-Y quiero que sean testigo que... a nuestra edad si existe el amor y que ustedes los adultos apestan por creer lo contrario-los aplausos cambiaron a risas y luego a aplausos por el gran beso que Niall le plantó a Lenna. Dylan siguió sus pasos y besó a Kristen luego Louis a Eleanor, Liam a Sophia, Zayn a Perrie y finalmente Harry me miró sonriéndome, tomándome de las mejillas, yo miré nerviosamente a mi alrededor quienes algunos no quitaban la vista de nosotros, Harry me hizo verle, haciendo que me perdiera en sus ojos, me acerque un poco mas y èl se encargó de plantar sus labios contra los míos, mis manos subieron a su cuello y presionaron para que fuese más fugaz... èl de pronto se detuvo pero no se alejo de mis labios...

-Siento que acabamos de pedir un deseo y este fue nuestro pacto-susurró, yo asentí en acuerdo a sus palabras, volviendo a sus labios.

-Niall no tomaste camino aquí ¿Cierto?-bromeó Zayn quien estaba tomando un poco de Coca-Cola.

-No... creo, aunque creo que...-todos reímos a su chiste malo.

-Vamos a los caballitos estos que suben y bajan-sugirió Perrie emocionada.

-¿El carrusel?-preguntó Eleanor riendo.

-Si ese, vengan, vengan-todos nos levantamos, las personas ya se habían esparcidos, cuando iba a seguir los pasos e las chicas Harry me toma de la mano.

-Tú y yo vamos a algo diferente.

-¿Qué es?-pregunte, pegándome a su cuerpo. A esta hora ya había una cantidad de personas y... a quien miento, es mejor cuando estas cerca de la persona que amas.

-Es una sorpresa, bueno no tanto una sorpresa, pero es romántico y siempre he querido subirme a uno contigo-seguimos caminando, a veces hablábamos, a veces simplemente observábamos en silencio. Hasta que se detiene y me mira.

-Cierra los ojos.

-¿Por qué?-èl ladeo su cabeza. Yo obedecí. Èl me tomó de la cintura y me hizo caminar como cinco pasos más.

-¿Estas viendo?

-Nop.

-¿Segura?

-Sip-sus manos desaparecieron.

-¿Te voy a besar o no?-su pregunta me hizo fruncir el ceño.

-No... no lo sé, pero si es no... solo bésame-èl carcajeó y puso sus manos sobre mis mejillas, sus labios se depositaron sobre los míos.

-Ya puedes abrir tus ojos-susurro sobre mis labios, al abrirlos, me sorprendo al ver la inmensa maquina frente a mí, llena de luces que cambiaban cíclicamente, llena de magia, llena de personas, llena de todo.

-¿Siempre, has querido montarte a una rueda de la fortuna conmigo?-pregunte como si fuese algo tonto.

-Sí, creo que es algo esencial, algo que siempre he querido desde pequeño-coloque mis brazos alrededor de su cuerpo.

-Gracias-èl en vez de responder, besó mi frente.

-Por aquí por favor-habló el señor que manejaba la rueda, interrumpiendo mi beso. Nosotros caminamos hasta entrar en la góndola, como se movían, tuvimos que ser rápidos, sentándonos uno frente del otro, por suerte, las puertas se cerraron dejándonos solo nosotros dos. Comenzó a avanzar, tambaleándose.

-Esto no se va a caer ¿Verdad?

-Si se cae tengo la fortuna de estar contigo-susurró, yo me iba a levantar para sentarme a su lado pero la góndola se movió, demasiado.

-Dame, dame tu mano-dije con nervios, èl definitivamente disfrutaba de esto. Estiró su mano mientras que yo se la sujetaba, en un movimiento rápido me hale hacia èl quedando sobre una de sus piernas.

-No tengas miedo, Megg, estoy contigo-dijo volviendo a besar mi frente, como ya se estaba haciendo oscuro las luces de la Rueda marcaba nuestros perfiles, aunque la góndola tuviese luz no alumbraba lo suficiente.

-No tengo miedo, solo tengo pánico-respondí viendo como subíamos mas, mis ojos se encontraron con el cielo oscuro aun moteado de azul.

-¿Qué es lo que siempre has deseado?-preguntó de repente. Deje de mirar el cielo para mirarlo a èl.

-Lo que he deseado siempre, se encuentra conmigo en estos momentos-respondí alzando mis hombros.

-¿No te has imaginado si nunca hubiese pasado esta cosa con tu padre?-asentí.

-¿Y, tu?

-Sí...-yo entrelacé mi mano con la de èl.

-Pero no me arrepiento-èl me mira atento-Si no hubiese pasado eso. Tú y yo no seriamos lo que hoy somos. Eso hizo que fuésemos inseparables.

-Si no hubiese sido así, hubiese trabajado mucho para que lo fuera...-èl colocó su mano libre en mi mejilla, se acercó un poco a mis labios y antes de besarme susurró.

-En las noches, siempre cuando te veo dormir, siento que estoy con la persona ideal, contigo todo encaja, son piezas que no necesitan se forjadas para que entren, tu... yo solo quiero que seas siempre parte de mi vida, Megg, siempre deseo tenerte, día y noche, si me faltases, otra vez....-yo negué, èl no siguió-Mi deseo es tenerte a mi lado para siempre-antes de que se acabara la tercera vuelta, Harry me besó, lentamente. Quería grabar este momento para siempre y reproducirlo cada vez que quisiera.

All the love that I have.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora