Dos almas divididas

1.9K 252 4
                                    

Alina se había ocultado en un cajón que llevaba uno de los carromatos de los artistas que habían asistido a la Fiesta de Invierno

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Alina se había ocultado en un cajón que llevaba uno de los carromatos de los artistas que habían asistido a la Fiesta de Invierno. Irina prometió que estaría fuera pero oculta de la gente.

Se habían cambiado de ropas al salir, para así no llamar la atención de nadie. Entonces escuchó voces y se pusieron en marcha. Una vez se detuvo el carruaje, intentó abrir el cajón pero estaba cerrado. Utilizó una lupa y su poder solar para abrirlo. Al poco rato lo logró, pero la imagen que se encontró frente a ella no fue la que esperaba.

Tres personas estaban frente a ella. Un hombre zemeni de piel oscura con dos pistolas en su cinturón, una chica suli que parecía llevar demasiados cuchillos encima y un hombre bien vestido con un bastón que tenía la imagen de un cuervo sobre él.

No veía a Irina por ningún lado.

Salió con las manos en alto.

-No queremos problemas -dijo el zemeni.

-Ni yo, así que me marcharé.

Antes de que pudiera irse, el hombre volvió a hablar:

-Está claro que quieres salir de Ravka Oriental. Podemos ayudarte.

La suli asintió como si realmente quisiera ayudarla. Sus ojos estaban chispeantes.

-Prefiero viajar sola.

Dio un paso y el hombre del bastón le bloqueó el camino con él.

-No te apresures -habló con voz fría.

El zemeni continuó hablando.

-Quédate con nosotros y todos ganaremos.

Alina sintió su enfado crecer.

-No volveré a ser prisionera de nadie. Apartaos y dejadme pasar.

-Me temo que no es posible -terminó diciendo el hombre de piel oscura acercando su mano a su pistola.

Antes de que pudieran hacer algo más, las sombras se movieron agarrando las muñecas de todos. Otras sombras agarraron sus armas y las lanzaron por ahí. Por último, Irina apareció de la nada, colocándose delante de Alina. El trío se quedó sorprendido, mirando a la segunda al mando del Oscuro.

Jesper, el zemeni, les había dicho a sus compañeros que ella había desaparecido, dejando de lado a la Invocadora del Sol.

-Con todo el respeto que los Santos me han otorgado -empezó a hablar con fuerza-, no nos interesa ir con vosotros. Apreciaría que nos dejaseis en paz y que no nos sigáis.

No esperó respuestas, con un movimiento de manos, los tres fueron empujados hacia atrás. Irina cogió el brazo de la medio Shu y salieron de allí.

-¿Cómo has hecho eso? -preguntó Alina una vez ella y su amiga estuvieron a salvo-. ¿Desaparecer de la nada?

Total Eclipse of the Heart [Shadow and Bone]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora