El chico de al lado ©.

048

Son exactamente las doce de la noche y no hay señales de Blue, me muevo de un lado a otro en mi habitación viendo su número en mi teléfono.

¿Donde se metió?

—Puedo escucharte desde la sala como caminas desesperadamente—Dani entra a la habitación.— Llámala.

—No es tan fácil como dices—agito el celular.— Esta molesta conmigo, discutimos hoy.

—La quieres Eric, llámala—y sale de mi habitación.

Marco su número, y espero bastantes tonos antes de que ella levante la llamada.

—Vaya vaya, don príncipe llama a mi teléfono—ella ríe sonoramente.

Maldición, esta ebria.

—Dime dónde estás.

—Caminando—hipa.— Discutí con Evan gracias a ti.

Salgo de mi habitación golpeando la de Dave para que me acompañe a verla,—¿Dónde estás, Blue?

Dave toma mi teléfono para hacer algo en el, luego me dice que ya sabe donde está dándomelo de nuevo, Blue sigue reclamando cosas sin sentido hasta que la escucho sollozar.

—Cariño, voy por ti—solté, haciendo que mi hermano me mira de manera sorpresiva.— Quédate ahí.

Salgo casi corriendo del edificio con Dave, y una vez que subimos al taxi le digo al conductor que se apresure.

—¿Le dijiste Cariño?—Dave pregunta.

—¿Y eso que?—bufe.

—Es que, ella tiene novio..

—Dave, ella no va a querer a nadie como me quiere a mi—asegure.— y nadie va a quererla como la quiero yo.

Trato de no desesperarme mientras veo pasar las casas por la ventana, hasta que veo su cabellera castaña caminar lentamente, detengo al taxi y me bajo del auto.

—Blue—la giro hacia a mi.

—Evan me corrió de su casa—solloza.— Dijo que si seguía enamorada de ti, lo nuestro no iba a funcionar.

¿Enamorada de mi?

Tranquilo Eric, solo esta ebria, no sabe lo que dice.

—Ven aquí, mocosa.

La tomó en brazos al estilo nupcial, ella pasa su brazo derecho por mi cuello para aferrarse a mi. No puedo creer que el imbecil de Gallagher le haya dejado sola a estas horas de la noche.

Ese idiota se las verá conmigo.

—Dámela—dice Dave extendiendo sus brazos.

—No, quiero quedarme con Eric—suelta.

Asiento indicándole a Dave que estaba bien, entre con cuidado al taxi para regresar al hotel. Claire había dicho que su padre había sido dado de alta en el hospital, pero no iba a dejarla en su departamento, no quería que tuviera problemas.

—¿Dormirá con nosotros?—pregunta Dave.

—No, no quiero que Daniela haga preguntas y los gemelos tampoco—susurre.—¿El departamento de Patrick sigue amoblado?

—Creo que si—dice.—¿La dejarás ahí?

—Dormiré con ella, Dave—digo obvio.