Zoe
Era obvio que nuestras diferencias me duelan, mi orgullo está dañado y mis sentimientos lastimados, mi corazón llora y la necesidad de volver a ser lo que era antes me sacuden con fuerzas, y de él solo necesitaba que me pidiera perdón por haber matado al hombre que me dio la vida, tal vez es lo único que necesite escuchar y saber que lo hace con mucha sinceridad, y así poder decirle todas las cosas que tengo guardadas.
—Podemos hablar— Edgar llega en la tarde y saluda a Alex que jugaba con sus nuevos juguetes en el salón, esta estancia ya no es la que era antes, ahora está llena de juguetes y creo que eso le gustaba a Edgar, porque al ver el desastre qué lío Alex en el lugar sonrió mientras movía cabeza.
Lo seguí hasta el despacho.
—Mañana saldré de viaje.
Dijo y me sentí mal, muy mal, pero no dije nada.
—Es importante y quisiera que te quedaras con Alex en casa, Zeus y los demás guardias os estarán vigilando.
—¿Qué pasa, Edgar? —Entrecerré los ojos y lo veía preocupado.
—No es nada.
—Edgar, por favor— le suplico con la mirada.
—¿Te acuerdas de Antón?
Asentí.
—Me declaró la guerra, después de estar encarcelado se apoderó de algunos grupos criminales y está dispuesto a más para obtener mi poder.
El corazón se me encogió porque sabía que Edgar no lo iba a dejar estar.
—Hace cuatro años te pedí que no matarás al hombre que mató a tu padre, y aun así lo hiciste enfrente de mí, ahora te voy a pedir lo mismo, no lo hagas, Edgar, déjalo estar y quien lo quiera seguir que lo haga.
Me mira a los ojos y ve el dolor en ellos.
—Yo sé que el poder es lo que más amas, sé que te gusta que te tengan miedo, pero llegará el momento de que te canses de todo eso y solo buscaras tu paz mental y no la encontraras.
—Si lo dejo estar es como si aceptara mi derrota.
—Pues que piense lo que quiera ese Antón de mierda, lo importante es lo que piensas tú, recuerda que ahora tu hijo espera por ti todas las tardes.
Pasó su mano por mi mejilla y me estremecí por su tacto tan profundo.
—Te amo, ¿sabes? Aún te sigo amando desde el día que entraste en mi corazón.
Abrí mi mirada, la cual había cerrado cuando empezó a tocarme.
Vamos Zoe, dile que tú también lo amas— mi subconsciente habla.
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Raptada por error
RomanceSolo había un objetivo en esta historia, matar a la hija del hombre que se metió con uno de los mafiosos más peligrosos del país, un hombre sin escrúpulos con un corazón de piedra que solo le importa su poder y lo que consiguió hasta ahora, ser el r...