Instituto Luxord [Completa]✓

13. Intenso

Mientras Rebeca y Carolina siguieron con sus planes, Magaly ya lleva una hora en entrenamiento de futbol. Se deja instruir por una aplicación que descargó en su celular; aunque, por más que ve una y otra vez el mismo video y sigue las instrucciones, ella parece estar en otro mundo.

Recordaba que no era tan mala en el futbol, pero se siente tan mal por ella misma, que eso no la deja ni patear bien la pelota.

Repite una y otra vez los mismos ejercicios.

-No creí encontrar a otra aficionada aquí -Magaly escucha una voz conocida, detrás de ella.

-No soy aficionada -contesta al voltear.

-¿Entonces que haces en el campo de fútbol? Las clases de deporte comienzan hasta mañana.

-Quise ir practicando desde hoy.

-Eres una aficionada al futbol, pero no lo quieres reconocer.

-No Laura, no lo soy -pronuncia molesta.

-Como digas.

Magaly sabe perfectamente que no es tan buena en eso, pero no quiere que Laura la vea siendo un desastre; tiene nervios, así que prefiere irse.

-Chama, ¿a dónde vas? -le grita Laura al ver que Magaly se aleja con rumbo a la salida.

-Voy a ir a estudiar mejor -responde entre los dientes.

-Entonces eres de esas niñas que sacan buenas calificaciones.

-Sí, y no quiero que este año vaya a ser la excepción. Mis padres están orgullosos de mí y no quiero defraudarlos -se voltea y mira molesta a Laura.

-¡Cónchale! No puedo creerlo, no estás haciendo esto por ti sino por complacer a tus padres, eso no está bien. Si quieres lograr algo, que sea por ti.

-¿Por qué me hablas así? Ni siquiera me conoces -le dice con un tono desafiante y camina hacia donde ella.

-Disculpa, no quise ser grosera, solo quise darte un buen consejo. Por cierto, ¿cómo te llamas? ¿Eres nueva en Luxord? -le pregunta Laura para cambiar de conversación, no desea tener pleito con nadie, al menos por ahora. Y menos con esa chica que se ve tan inofensiva.

-Soy Magaly y no, no soy nueva. Estudio aquí desde séptimo grado -suspira y se sienta en medio de la cancha.

-¿En serio? Nunca te vi -contesta Laura sentándose a su lado.

-No suelo sobresalir dentro de la multitud. Mis nuevas compañeras tampoco me habían visto; al igual que tú, pensaron que era alumna nueva.

-¿Quiénes son tus nuevas compañeras?

-Carolina Sosa y Rebeca Fúnez a quien defendiste hoy.

-A ellas sí las conozco; bueno, nunca las he tratado, pero he oído hablar de Carolina y unas cuentas veces la vi con algún novio, jaja, la he visto con varios. A Rebeca solo la había visto por los pasillos del cole y en la residencia. Pero a ti nunca te había visto ni nunca escuché hablar de ti.

-Ya lo dije, no suelo brillar tanto.

-No lo creo, supongo que todos brillamos, pero seguramente es que a ti te gusta apagar tu luz.

-No, no es eso. Si nadie me conoce es porque nunca tuve una pisca de popularidad, no como tú que hasta has causado revoluciones.

-¿Tú sí me conocías?

-Por supuesto. Recuerdo que cuando estábamos en octavo lideraste una huelga y los maestros estaban enfurecidos contigo, porque gracias a ti, todo tu salón perdió una semana de clases.