Instituto Luxord [Completa]✓

34. Eres necio

Magaly ha estado estudiando desde las 4:10 am del domingo, ya son las 10:00 am y ella continúa con sus horas de estudio. A pesar de que no llevan muchos temas vistos en sus materias, no quiere distraerse ya con otras cosas. Intentó estudiar en la semana, pero siempre terminaba cansada después de clases y sus amigas siempre la invitaban a que salieran a los lugares del instituto, además ha tenido algunas prácticas de futbol con Laura, y por todo lo que ha hecho no podía enfocarse totalmente en reforzar lo aprendido.

—Magaly, ¿qué haces? —le pregunta Carolina bostezando mientras se levanta de la cama.

—Estoy estudiando, Caro.

—Hoy es domingo, deberías aprovechar para descansar.

—No puedo, tengo que estudiar.

—Espero algún día tomes los estudios con más calma. ¿Ya fuiste a desayunar?

—No, aún no. Estaba tan concentrada que no me ha pegado hambre. Aunque no te voy a negar que cuando eran las 5 de la mañana, moría por dormir cuando las veía a ustedes en su profundo sueño.

—¿A las 5 de la mañana? ¡Santo Dios! ¿a qué hora te despertaste?

—Eso no importa. Por cierto, Caro, te escuché roncar y a Rebe se le escaparon un par de gases —sonríe Magaly.

—¡Qué horror! —Carcajea Carolina—. Oye, no deberías despertarte tan temprano a escuchar mis ronquidos y los gases que se lanza Rebe.

Ambas comienzan a reír, luego Carolina toma su teléfono y se vuelve a lanzar en su cama, se refunde entre sus sábanas y comienza a revisar su Instagram. Se detiene a ver una foto que posteó su novio y nota un comentario sutil de una chica.

Decide entrar al perfil de Carlos Manuel y ve cada foto en el perfil, revisa los comentarios y nota que dos chicas siempre comentan las fotos de él.

A Carolina no le agradan esos comentarios, ¡están coqueteando con su novio! Y esos emojis de corazones y besos la hacen que se sienta bastante celosa.

—Buenos días —pronuncia Rebeca despertando.

—¡Buen día! —Le contesta Magaly y Carolina sale de sus sábanas.

—¿Por qué esa cara? —le pregunta Rebeca a Carolina.

—Hay dos chicas que siempre comentan las fotos de Carlos Manuel, y eso no me gusta.

—Ja, ja Calmate, Caro. Carlos Manuel es tu novio, no de esas chicas; y no tienes por qué sentirte celosa por unos simples comentarios.

—Tenés razón, debo controlar mis celos. No sé cómo le haces vos, Rebe

—¿Yo?

—Si, mírame a mí, estoy celosa por esas dos chicas que le comentan a Carlos Manuel en sus fotos, ya hasta le revisé quiénes son esos mil seguidores que tiene; y casi enloquezco cuando vi que la mayoría son mujeres. Y mirate vos, no tenés problema con esos 250,000 seguidores que tiene Danilo, que también la mayoría son mujeres, y le comentan todo el tiempo diciéndole lo bien que se ve siempre, le dicen el papi chulo, que es el chico más guapo, que está muy sexy y todas esas cosas que ya imaginarás.

—¿En serio? —pregunta Rebeca desubicada.

—Ay Rebe, No me digás que no habías pensado en eso.

—No, no lo había visto de esa forma.

Rebeca comienza a sentir un hueco en el estómago y está segura de que no es por hambre. Lo que Carolina le cuenta le ha dado mucha curiosidad, se pregunta en cómo no pensó antes en ver quiénes siguen al chico que le gusta. Aunque quiere entrar al Instagram de Danilo a echar un vistazo, a la vez no lo desea; siente un poco de temor, no quiere ver algo que la vaya a hacer sentir mal. Seguramente muchas de esas chicas que le escriben han de parecer súper modelos, con gran cuerpo y rostro perfecto.

—Es Danilo Cedeño, es muy popular en Instagram y Tik Tok por las fotos y videos que sube en muchos lugares lujosos. Es obvio que las chicas hasta le escriben en privado para coquetear con él, pero, así como es Danilo, seguro no les presta atención, como lo hace con las chicas de aquí que sueñan salir con él. Sabemos que para el ecuatoriano solo existe una chica, y esa eres tú, Rebe, así que no te vayas a preocupar por lo que dije antes, tú eres única y Danilo lo sabe; así como tú has visto más allá de lo que los demás ven en él.

Rebeca ni siquiera termina de escuchar lo que Carolina le está diciendo, cuando ya está en el perfil de Danilo.

Tiene muchas fotos, en todas sale genial, pero siempre sale solo. En ninguno de sus posts aparece algún familiar o amigo con él.

Comprueba lo que le dijo su amiga, Danilo recibe muchos me gusta y comentarios en sus fotos, pero él no responde a nadie.

Rebeca siempre está atenta en responder cada comentario que sus amigos le dejan, aunque ella recibe muy pocos comentarios y solo posee 2000 seguidores, que le parecen nada en comparación con los seguidores que tiene Danilo.

A ella siempre le pareció de mala educación que las personas no respondan los comentarios, pero por primera vez le agrada ver que alguien no responde.

Sí, le gusta que su casi chico no responda a todas esas muchachas que le dejan sus declaraciones de amor.

Rebeca con una sonrisa empieza a darle me gusta a todas las fotos de él. A Danilo le entran las notificaciones a su teléfono y este de inmediato ve que es Rebeca Fúnez quien le ha dejado me gusta en sus fotos, así que él entra al perfil de Rebeca y comienza a ver sus fotos, piensa que en todas sale muy bonita.

—¡Ya, vamos a desayunar! —grita Carlos Manuel desde su cama.

—Sí, ya es tarde, mi estomago ruge —contesta Antonio y se levanta de su cama.

—Ya me orino —dice Danilo—. Pido el baño primero.

—Pues yo también ya me orino —le contesta Antonio de mala gana y se dirige al baño, Danilo solo lo ve y no le dice nada. Prefiere estar en paz con todos, así que mejor continúa viendo las fotos de Rebeca.

Con muchas ganas de ir al baño, Danilo se sienta en la cama y luego corre al baño, pero le toca esperar mucho tiempo a que Antonio salga.

—¿Ya vas a salir? —pregunta Danilo aguantándose las ganas de orinar, pero no cree seguir soportando más tiempo.

—¡Oye, no me apures! —le grita Antonio cuando abre la puerta del baño.

Danilo se enfurece porque Antonio sigue hablándole mal. Desde el incidente con la chica a la que Antonio le mintió, este se ha comportado extraño.

—Tico, tranquilízate —interviene Carlos Manuel, porque sabe que si las cosas continúan como van, habrá pelea entre sus compañeros de habitación. Todo marchaba bien, parecía que ya todos eran amigos, pero parece que se equivocó; aun así, trata de hacer que esos dos no vayan a discutir.

Mario el boliviano, solo observa lo que sus compañeros hacen. Él no quiere involucrarse en nada. Les ha cogido aprecio a todos, pero a él le gusta mantenerse al margen de cualquier disputa.

Danilo entra al baño y Antonio golpea la puerta, tratando de provocar que su compañero salga a pelear con él.

—Eres necio... —le dice Carlos Manuel y hace gestos de negación.