Amnesia.

Capítulo 17. Parte 4.

Le saqué la lengua y cuando el bajó la guardia bajo mi gesto tan infantil, le quité el portatil.

-Juegas suicio, Tati.

-Ya bueno, aprendí del mejor. Ahora calla, y lee.

                                        "Haters gonna hate"

"Queridos extraños que acabáis en este puto blog por distintas razones. Quizás es por que es de noche, estáis aburridos y os lo encontráis. También puede ser que seáis de mi colegio, en ese caso os habrán pasado el link algún idiota que se quiera reir de las desgracias ajenas. Como hayáis llegado aquí no es lo importante, pero si lo es que hayáis llegado. Todo pasa por algo en esta vida, por lo menos esa esperanza la mantengo. 

A lo mejor mis problemas no te interesan, pero no escribo aquí para saber una opinión tuya personal. De esas oigo día a día y tengo que aprender a que solo la mia cuente. Si es ese el caso, te recomiendo que a partir de aquí, le des a la cruz roja que puedes ver en el extremo superior derecho de tu dispositivo con internet, y me dejes en paz. A lo mejor si te interesan aunque no me conozcas, por que eres esa clase de personas. En ese caso, no lo veo mal. Pero no cuento mi vida en letras para que la gente se apiade de mi, ni para tener visitas, ni para, en casos extremos que se han dado, hacerme famosa. Tampoco escribo cosas para llamar la atención, odio eso. Y justo de lo que odio va a ir este pequeño blog, escondido en el inmenso mar que es internet, para que si alguien lo lee, y pasa por lo mismo que yo, que sepa que siempre hay otra salida, aunque ni yo misma la vea ahora.

Odio la gente que habla sin saber. Esas personas que se creen lo suficientemente... importantes, guays, inteligentes, como queráis, para opinar respecto a tu vida, e incluso ponerla etiquetas. Ya estamos llenos de etiquetas por la sociedad. 

Odio esas personas que piensan que están por encima de todo y de todos, y que su vida es super mega perfecta. Esas personas son las típicas que siempre critican, son las que tienen la boca más grande. En mi colegio me llamaban débil por que se enteraron de que vomitaba y que me cortaba los brazos. Lo irónico es que no todo el mundo es capaz de coger un sacapuntas, romperlo, y hacerse daño así mismo. Tampoco todo el mundo es capaz de meterse los dedos por la garganta hasta el punto de vomitar. A lo mejor el hecho de que se haya llegado hasta allí puede considerarse como debilidad por que no se es capaz de afrontar tus problemas. Pero siempre hay cosas que nos superan y no dejan atrancados, y mi tema que me dejó atrancada es el peso corporal. Así que sí, puede que sea débil por que no soy capaz de apartar todas las espectativas de la sociedad. pero soy fuerte por que cada noche me abro la piel y por la mañana sonrío como si no me hubiese pasado nada. 

La sociedad no me ha ayudado a superar estos problemas con los cánones de belleza, pero tampoco la culpo por que esos cánones son universales, y a mi me afectan como hay a personas a las que no. Pero a los que si culpo son a las personas que tachan de imperfectas a las que no son como los cánones o como ellos mismos. Si todos fueramos iguales entre nosotros ¿Qué gracia tendría? Hay miles y millones de series y películas que muestran lo aburrido que sería el mundo siendo todos iguales. El problema llega cuando una persona no lo ve así y hace estupideces para hundir a otros que no son como el. En el momento en el que una persona no acepta a otra por ser diferente y se mete con su integridad, esa persona se rompe de una forma irreparable. 

Pero bueno, la sociedad nos hace hijos de puta.