-Es lo mejor que me han regalado. Muchas gracias -digo, abrazándolo, mis ojos se habían llenado de lágrimas.
Nos separamos y quedamos muy cerca. Él no pierde tiempo y me besa.
De nuevo está sucediendo, esas cosquillas en el estómago están ahí, esa s...
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1mes después
Alison Moore. ¿Quién es Alison Moore? ¿Cuál es su propósito en esta vida? ¿Qué pretende ella con hacer lo que hizo? ¿Suicidarse? ¿O es que solo quiere llamar la atención? ¿A caso Alison Moore simplemente no es nadie? ¿Quién es Alison Moore? ¿Quién mierda es?
En mi mente, estas preguntas han estado viviendo sin pagar arriendo, han estado ahí las veinticuatro horas del día desde hace un mes y medio. ¿Hay alguna respuesta para esas preguntas? Por el momento, no. ¿Hay alguna razón por la que Alison Moore se haya querido suicidar? Pues sí, y la razón tiene nombre y apellido: Alison Moore. Ella es la razón de la ausencia de mis ganas de vivir, la carencia de querer despertar día a día deseando ser mejor persona y olvidar los errores que cometí. Por supuesto que eso pensaba la otra Alison, la Alison de hace unas semanas, la Alison que, a pesar de estar internada en el psiquiátrico, seguía queriendo morir envés de mejorar para salir de allí.
Pero la nueva Alison Moore es diferente. Aquella Alison que quería morir, murió, y ahora solo quedo yo, Ali, la simple chica que era en un principio y la cual nunca debí dejar de ser. La Ali que no es egoísta, que piensa en los demás y se preocupa por la felicidad de todos, la que busca el lado positivo de las cosas, la que es feliz, esa Ali es en la que me volví a convertir.
Este tiempo en el psiquiátrico ha sido milagroso para mí, sinceramente no pensé que me ayudaría, que sería una pérdida de dinero y de tiempo, puesto que me sentía en un agujero de dolor del cual jamás saldría. Pero realmente me había ayudado, todas las charlas con las demás personas de aquí, con los psicólogos, conmigo misma por las noches, hasta el mismo silencio me había ayudado a superarlo.
No, no lo he superado a... él, eso sí será muy difícil. Pero he superado el hecho de querer hacerme daño físicamente por todo lo que pasó, he superado una parte del gran dolor y culpa que se había creado en mi alma. Y si es cierto que me costará quitarme todo el sufrimiento, pero no es imposible, y eso es algo que he aprendido aquí, que cualquier dolor se puede disminuir con el paso del tiempo, que todo pasará en algún momento, que ese gran dolor no desaparecerá, pero disminuirá hasta el punto de que ya no te saque ni una lágrima.
Simplemente, todo dolor pasa.
Y estoy muy feliz de poder ver una nueva luz, una nueva esperanza, la cual ya había perdido. Si, me siento mucho mejor, pero a pesar de eso, no he podido sacármelo a él de la cabeza; su sonrisa, sus ojos, su piel, sus manos, su cabello, su olor, su cuerpo... Todo sigue tatuado en mi corazón, en mi alma, en mi mente y en mi cuerpo. No he sabido nada de él desde que me perdonó en ese hotel en el que celebramos la victoria del equipo, en el cual me dejó en claro que no quería nada que ver conmigo. Tal vez ya me olvidó, ya me superó, seguramente está feliz ahora con otra persona.
Pero... ¿y si no? ¿Y si él sigue amándome? ¿Qué tal si está preocupado por mí? ¿Él sabe que yo estoy aquí?
—Ali. —susurra Luther, acariciando mi brazo. Mi mirada se dirige a la de él y es ahí cuando recuerdo que estamos esperando a que me den el alta para marcharme de aquí —Ya nos podemos ir —me enseña la hoja en sus manos, la cual autoriza mi salida del psiquiátrico.
