Narra Rubius
-MAHEEEEEEEEE
-¡QUE COÑO QUIEREH PESAO!
-¡Me aburro!
-¿Y me llamas para eso?
-Sip.-Remarqué.
-Mirate videoh en youtube.
-Es todo aburrido, lo mismo de siempre.
- ¿Ah vitoh yah a una chiquilla que últimamente se etah haciendoh muy famosa?
-¿Quien? ¿Como se llama?
-_____
-Bien, la buscaré.
Dios, no podía creerlo. Joder, vaya pibón. Encima hacía buenos vlogs y críticas. Y LE GUSTABAN LOS VIDEOJUEGOS. Madre mía, la chica perfecta. Ojalá la conociese.
-MAHEEEEEEEEE
-¿Y ahora que, pesao?
-Ya he visto los vídeos de la chica.
-¿Y?
-¿Tú la conoces?
-Hablé con ella por Twitah alguna veh. ¿Por que?
-Por nada, por nada.
Narra _____
¡Muy buenas chabales! Hoy he encontrado un vídeo que os va a encantar, ya veréis. Es la mugre suprema. Estos personajes vienen directamente de mordor, dan un poco de sida y todo. No me hago responsable de los cargos. Como veréis estoy en un nuevo sitio, me he mudado a Madrid hace na' con mi mejor amiga, y nos estamos instalando, bueno, como iba diciendo...-el móvil me interrumpió- puto twitter- pensé y apagué la cámara. *@Rubiu5 te sigue ahora* vaya, que honor. Le di a seguir también y continué grabando.
Cuando acabé, Sara entró corriendo a mi habitación- ¡HOY NOS VAMOS DE PARTY HARD!- gritó
-Ok, ok...
-De ok nada, preparate que a las once nos vamos. *las 10:00* mierda, no me da tiempo. Corrí a prepararme lo más rapido que pude.
Me vestí con lo siguiente: Una falda suelta por el medio del muslo negra, y una blusa blanca transparente y unos tacones negros no muy altos. Mido 1'65, ¿para que más? Me maquillé un poco los ojos y nos fuimos.
Narra Rubius
-Mangel, ¿quieres acabar de una puta vez?- ya estaba empezando a ponerme nervioso.
-Relaja lah tetah, que yah estoy- dijo dirigiéndose hacia mí. Iba como yo: Sudadera, vaqueros y dc's.- Vamoh ya.
-¿Vamoh a zoo?
-Obvio.- Le sonreí y salimos.
Narra _____
-¡Vamos a zoo! Dicen que es una discoteca genial y super "cool"- dijo Sara haciendo comillas con sus dedos y sonriendo.
-Okey, vamos-dije riendo.
Cuando llegamos, aquello estaba petadisimo, casi no podía ni moverse uno. Fuimos a pedir una copa, y menos mal que somos mujeres, porque si no no nos la dan. Tras varias ya eran las 5 de la mañana, y decidimos volver a casa.
-Dios, vaya primer día, esto es empezar a lo grande- dijo Sara riendo.
-Ya ves, adoro Madrid.
En eso, vi a un chico muy alto, con una gorra tambalearse de un lado para otro.
Narra Rubius
-Rubiu tío, son lah 5 de la mañanah, vamonoh yah.
-Que no quiero tío, dejame tranquilo.- (Iba bastante contentillo la verdad.)
-Buenoh poh yo me voy, adióh.
-De acuerdo.
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-Joder, mangel tenía razón, debería haberme ido con él.- hablaba en alto mientras me iba tambaleando por la calle- me cago en la puta, me voy a acabar ostiando.
Narra _____
-Ven Sara, vamos a ayudar a ese chico- la verdad es que me dió bastante pena- le llevaremos a su casa.
-Yo paso, me piro.
- Bueno, pues yo iré a ayudarle.
- No tardes mucho y cuidate, nos vemos en casa.
-Adiós.
Me dirijí hacia él, parecía estar hablando solo. Cuando casi había llegado a su lado, tropezó y cayó al suelo.
-¡Dios mío! ¿Estás bien? ¿Te has echo daño?- pregunté preocupada.
-Nada muyaya, estoy bien.- me sonrió- oye, yo te conozco, eres _____.
-Y tú eres el Rubius-reí-
-El mismo-sonrió triunfante- joder, eres aún más guapa en persona.
Me sonrrojé.
-...gracias, supongo. ¿Quieres que te lleve a casa?
-Puedes llevarme a la tuya- cerró totalmente sus ojos y me enseñó sus blancos dientes.
-No, mejor tu a la tuya y yo a la mía, ¿vale?
-Que aburrida eres muyaya, yo quería salseo.
Se me escapó una risita con su comentario.
-Y bien, ¿donde vives?
-En la calle _____ ______, urbanización ______, 4° C.
-Bien, vamos.
Cuando llegamos, llamé al timbre. Un Mangel completamente dormido me abrió.
-¿_____? ¡Vaya! ¡Que alegría conocerteh por fin!-me abrazó.
-Igualmente Mangel.
Un Rubius cabreado nos separó.
-Ya vale, ¿no?- dijo, borracho.
-Que, ¿no estarah celoso, verdah Rubiuh?- Dijo Mangel riendo.
-Claro que no-dijo serio.
-Oye, ¿y vosotroh que haceih aquí juntoh?
-Viene a traerlo, estaba perdido tirado en la calle y le ayudé a venir- sonreí triunfante.
-Pueh muchah gracias ____, no se donde etariah ahora eteh sin ti.
-No hay de qué, un placer haberos conocido.- Sonreí ampliamente y me di la vuelta, dispuesta a irme, cuando una mano cogió mi brazo y lo sujetó para que no me fuera. Rubius.
-Espera ahí muyaya, te crees que ibas a irte sin darme tu número?- sonrió.
-Pues, sí (?)
-Pues no, asi que ya sabes.- me guiñó un ojo.
-De acuerdo- dije riendo
Le di mi numero y me fui a mi casa.