Me despertó alguien besándome el cuello.
Sonreí. _____.
-Buenos días preciosa.- la besé.
-Buenos días. Tenemos que irnos ya, el tren sale en una hora.
-Joder, otra vez a vivir en una casa que no es la tuya.
-Pero podemos vernos todos los días si quieres.
-Claro que quiero.
Ambos sonreímos.
Preparamos todo y fuimos a la estación. Cogimos el primer tren de vuelta a Madrid.
Cuando llegamos la acompañé hasta su casa. Después me fui a la mía.
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-¡MAHEEEEEEEEEEE!- dije entrando por la puerta.
-¡RUBIUUUUUUUUUH!- contestó.
Corrimos a abrazarnos como en las películas, era algo que nos hacía mucha gracia.
-Y bien, ¿queh tal con _____?
-Perfecto Mangel. Cada día me gusta más.
-¿Tuh ehtah enamorao de ellah Rubiuh?
-Sí.- suspiré.- y ella de mi.
-¿De verdah? ¡Meh alegro muchoh Rubiuh!
-Gracias Mangel. ¿Grabamos algo? Hace cuatro días que no subo nada. Hay que hacer el especial de los 400.000.
-Claroh tíoh.
Narra _____
-¡Saaaaariiiiiiitaaaaaaa! ¡Ya llegueeeeeeeee!
-Ya veo.- dijo entrando en el salón. ¿que tal todo?
-Genial.- sonreí.
-¿Que llevas en el cuello? ¡¿Eso son diamantes?!
-Sí. Me lo regaló Rubius. Ayer hicimos dos meses.
-Muchas felicidades cariño.- me abrazó.
-Gracias Sara.- sonreí.- voy a deshacer mis maletas.
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Ya llevaba un rato cuando me cansé y me puse a mirar Twitter. Tenía más interacciones que de costumbre. Hasta que vida por que.
¡Había llegado a los 200.000! La verdad es que he crecido muy rápido en estos últimos meses y no se por qué.
Acabé de colocar todo y empecé a preparar el "especial".
Cuando lo estaba editando, recibí una llamada.
*Conversación telefónica*
-Muyayita mía...
-Dime Rubius.
-¿Salimos hoy con Mangel y Alexby?
-Claro. ¿A que hora os pasais?
-Once.
-Perf. Luego no vemos, te quiero.
-Y yo a ti.
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Me vestí con unos vaqueros cortos y una camiseta blanca de escote que quedaba un poco más corta que una camiseta normal, pero no era ombliguera.
Me peiné y esperé a que los chicos llamaran a la puerta.
Cuando lo hicieron, me despedí de Sara, que no iba a venir, y me fui con ellos.
Fuimos a zoo. Nos lo pasamos genial. En un momento de la noche, Mangel hizo una propuesta.
-¡Ey! ¿Hacemoh unah foto para twittah?
-¡Claro!- contestamos yo, Rubius y Alexby al unísono.
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Ya eran sobre las tres de la mañana, y estaba en la barra pidiendo un chupito cuando alguien me agarró por la cintura.
-Hola muyaya. -susurró a mi oído. Me estremecí.
-Hola.- dije y me gire.
Rubius me pegó a el y me besó durante un largo rato.
No se por qué, pero durante el beso sentí algo extraño, no sabría explicar el qué.