Capítulo 41

125 13 0
                                    

Narra Rubius

Me despertó una cadena de besos bajando por mi cuello hasta llegar a mi pecho.

Sonreí.

-Buenos días mi vida.- me desperecé.

-Buenos días.- levantó la cabeza y me besó.

-¿Bajamos a desayunar con todos?

-Claro.

Nos vestimos y bajamos al comedor donde todos estaban ya sentados a la mesa en silencio.

Nos sentamos.

Durante unos dos minutos nadie dijo nada, hasta que se rompió el silencio.

-¿Por qué anoche hacías esos ruidos tan raros hemanito?- Ana nos señaló a _____ y a mí.

_____ se puso como un tomate y agachó la cabeza, yo sólo me limité a sonreír.

-Cosas de mayores.- le removí el pelo.

_____ me dió un codazo y me fulminó con la mirada.

-Son como los ruidos que hacen mamá y papá.- afirmó.

Aquello provocó que todos nos atragantaramos con el desayuno y las carcajadas del abuelo.

-Papá, ¡no tiene gracia!- exclamó mi madre enfadada.

-¿Vosotros también os casareis, como mamá y papá?- esta vez fui yo el que se atragantó.

-No-no lo sé. Es muy pronto.- respiré hondo.

-¿Pero queréis?- insistió.

-Su-supongo.- le sonreí.

-¿Y tendréis bebés?- dijo con un brillo en la mirada.

-Ana, vete a preparar que tienes que ir a clase y deja de hacer preguntas.- mi madre nos salvó.

Se fue refunfuñando.

-Gracias mamá.- respiré aliviado.- _____ ¿te encuentras bien? Estás blanca.- dije cogiéndole la cara con las manos, preocupado.

-Eh, sí claro.- sonrió.

-Lo sentimos mucho por Ana.- dijo Héctor.-A veces es muy preguntona.

-No importa.- le mostró sus blancos dientes.

*********

Narra ______

Ya había acabado de desayunar y me disponía a ir a mi cuarto cuando la madre de Rubius me llamó.

-_____, ¿puedes venir un momento?

-Claro.- nos dirijimos al patio.

-Yo quisiera pedirte un favor...

-Dígame.- sí le hablaba en tercera persona.

-Por favor, tuteame.- asentí y ella prosiguió.

-Quiero que cuides a mi hijo. No sabe valerse por si sólo, es un desordenado y un torpe. Es muy maleducado y se pasa el día comiendo cosas que harán que en unos años le explote el bazo. Se queja por todo y no se merece la mitad de las cosas que tiene. Pero he visto que él está muy enamorado de ti...- hizo una pausa- no sé que le has echo, mi hijo antes no era así.- rió.- Y estoy segura de que te trata como te mereces. No dejes que le pase nada malo. ¿Me lo prometes?

-Pues claro que sí.- sonreí.- Rubén es el mejor novio del mundo.

-Ah, y yo también quiero que me deis nietos.- sonrió, yo me sonrrojé.

Volví a la habitación donde se encontraba Rubius.

-Ey, mañana volveremos a España. ¿Vamos a una tienda a comprar comida para el viaje?

-Claro, vamos.

Nos pusimos los abrigos y nos dirigimos al supermercado más cercano.

-Ve a pagar esto, que a mi se me olvidó una cosa.- me informó.

-Valeeeep.- respondí.

-This.- dije en inglés cuando pasé por caja.

-You aren't live there, no?- dijo el chico en inglés.

-No, I'm spanish.- Sonreí.

-Vaya, yo también soy español.- respondió sonriente en mi idioma.- siempre es un placer encontrarse con una chica tan guapa como tu que sea de tu mismo país.- mostró su bonita sonrisa.

-Gracias.- sonreí y agaché la cabeza.

-Si quieres cuando acabe mi turno puedo enseñarte un poco la zona, ¿has venido sola?- dijo sonriente.

-No, ha venido con su novio.- Rubius me agarró de la cintura.

La expresión de aquel chico cambió totalmente.

-Ah, de acuerdo. Tomad vuestras cosas.- cojimos las bolsas y nos fuimos de allí.

Rubius iba serio y estuvimos un rato en silencio hasta que yo lo rompí.

-No tenías que haber tratado tan mal a ese chico, no te hizo nada.

Se paró en seco y se giró para mirarme a los ojos.

-Nadie intenta ligar con mi novia. NADIE.- recalcó.

Reí.-Eres un celoso.- le pellizqué la mejilla.

-No soy celoso. Sólo cuido lo que es mío...

-Eres idiota.- lo puse a mi altura y le besé.

***********

-Os voy a echar mucho de menos familia.- dijo Rubén despidiéndose de todos.- Volveremos pronto, ¿de acuerdo?- estaba a punto de llorar. Le abracé.

Yo también me despedí de toda su familia.

-Recuerda lo que hablamos _____.- dijo la señora Gundersen a mi oído.

-Claro.- sonreí.

Subimos al avión y nos dirigimos de vuelta a Madrid.

-Rubius, ¿duermes?- le acaricié la mejilla.

-No.- se giró hacia mí. Tenía una expresión triste.

-No estés mal, ya volverás a verles. Yo hace más de medio año que no veo a mi familia, y tengo tres hermanos.- reí.-Cuando vaya me matarán, pero bue, you only live once.

Sonrió.

**********

-Estamos a punto de aterrizar.- comunicaron.

-Por fin.- dijo al salir del avión.- No pueden tener a alguien tan largo como yo sentado allí horas.

Reí.-Bueno, yo tengo que irme a casa.

-¡No! Te acompaño a dejar tus cosas y vienes a dormir a la mía.

-Llevo una semana durmiendo contigo Rubius.

-Yo quiero dormir contigo toda la vida. 

Historia youtuber. (ElRubius & you)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora