F E T I S H

C A P I T U L O 4

No he sabido nada de Kokonoi, no le he visto, ni hablado con él. Lo que sea que teníamos ya se acabó.

Me cepillo el cabello después de ducharme y me pongo crema en el cuerpo, la ventaja de vivir con dos mujeres es que puedo ir en camisa y calzoncillos cómodamente.

-Nao, te está buscando un amigo.

¡Que se joda!

Cuatro jodidos días sin verlo y ahora viene a mi casa, sintiéndose con el derecho de hablarme.

Salgo de mi cuarto furiosa, lista para matar su cabellera negra pero en su lugar hay un rubio de ojos azules y mascarilla.

-Tú no eres Koko.

-Por su puesto que no soy él- lleva las manos en la espalda y cuando las pone por el frente está el folder que Hajime me dio -Encontré esto detrás del templo, tiene tu nombre.

-Gracias- lo agarro y saco la tarjeta de crédito, voy a la cocina y tomo unas tijeras para cortar en cuatro al plástico, no quiero nada de Kokonoi. -¿Cómo supiste dónde vivía?

-Le pregunté a Mikey- Sanzu mantenía la vista fija en mi cara y después me di cuenta de porque era, estaba en diminutas bragas con una camiseta que dejaba ver mis pezones.

Conozco los nombres de todos los miembros de la ToMan y sus posiciones porque Manjiro me hizo aprendermelos a raja tabla.

-¡Naoko! Ve a vestirte- me regañó Nyo al verme en poca ropa.

-Perdón, no esperaba a nadie.

Regresé a mi cuarto y me puse los jeans que estaban sobre mi cama, volví con mi invitado y Nyo.

Él estaba en la mitad de la sala con las manos en los bolsillos y contestando todas las preguntas que mi hermana le hacía.

-Si no quieres no debes contestarle- Nyoko es una persona muy sociable que sobrepasa los límites de los introvertidos y puede llegar a ser muy intrusiva -¿Quieres algo de beber?

-No, estoy bien.

-¿Comer? Te puedo preparar algo rápido, cómo una muestra de agradecimiento por haberme traído mi futuro- le dije de manera irónica.

De todas formas voy a ser el examen, no puedo trabajar toda la vida de mesera y una buena carrera universitaria significaría un buen futuro para toda mi familia.

-No tengo hambre- yo soy muy asocial, pero ese tipo pasa mis limites, no quiere nada, no habla pero sigue ahí, sentado y sin dejar de mirarme fijamente.

-Nao, tengo que ir al super ¿Vas o te quedas?- Podría quedarme con él pero no parece que disfrute de mi compañía.

-¿Nos das un aventon al supermercado?- le pregunto de forma directa, por alguna razón me siento cómoda con él y eso que no hemos convivido para nada.

-¿Puedo negarme?- que mal educado.

-Claro que puedes, te lo pido cómo una conocida, no cómo la novia de tu capitán.

-Andado- por fin de mueve de su lugar y camina a mi lado, discretamente veo lo poco de su rostro, tiene unas pestañas largas, unos ojos azules muy bonitos que parecen brillar, el resto de su cara lo dejo a mi imaginación, nunca lo he visto sin la mascarilla.

llegamos a la calle y nos paramos al lado de su moto, Nyo al ver en que iríamos hace una mueca y se echa para atrás.

-No pienso subirme a eso.

-Nyoko no seas una cobarde y sube tu trasero- la paciencia no es una de mis cualidades.

La jalo del brazo y la obligo a subirse detrás de Sanzu, ella lo rodea por la cintura y se aferra a él, yo me siento atrás de mi hermana y me sostengo del asiento.