C A P I T U L O 3 5

656 83 13
                                    

-¿Mikey?

-Estas muy hermosa- su mano tocó mi cabello y se acercó a mi, pero yo di un paso instintivo hacia atrás -cuanto te extrañé.

-Te... te ves muy bien Mikey.

Es un look completamente nuevo pero que le queda de maravilla, jamás lo vi lucir un traje de esa forma.

-Eh tratado de mantenerme a raya desde que te vi entrar pero ya no puedo contenerme- sus manos me aprisionaron y sus labios se pegaron a los míos, fui incapaz de responder a su beso, no porque no quisiera sino porque movía tanto dentro de mi -¿Ya no me amas?

-No es eso Mikey, es solo que ha pasado tanto- oculté mi rostro en su pecho, oliendo su colonia cara y varonil.

-Vamonos Naoko, aquí hay demasiado ruido.

Cada parte de mi cuerpo grita que lo siga a donde sea que vaya pero mi parte racional me recuerda el porque lo dejé, porque en el momento que regrese con él también lo haré con ellos y todo mi trabajo se irá al carajo.

-Mikey... besame por favor.

Sus labios volvieron a atacar los míos en un profundo beso correspondido, desde hace mucho que no besaba a alguien con deseo.

Sus manos se quedaron en mi cintura y las mías en su cuello, pero de apoco se fueron deslizando hasta mi trasero apretandolo dejando el menor espacio entre el cuerpo de ambos.

Los labios me ardían y la respiración me faltaba, me separé unos escasos centímetros pero aún sintiendo su aliento en mi boca.

-Sigues siendo igual de posesivo.

-¿Cómo no serlo teniendo al amor de mi vida frente a mi?- puede que sea porque nos acabamos de reencontrar pero esta siendo más romántico y cautivador.

-Te seguiré Mikey, sácame de aquí.

Quiero estar con él, necesito sentirlo de nuevo en todos los aspectos de mi vida.

-Vamonos hermosa- tomó mi mano y caminos para la salida.

-Tengo que avisarle a Nyoko que me voy.

-Te acompaño, ya no pienso separarme de ti.

Había algo en su nueva forma que me atraía aún más que cuando eramos jóvenes.

Mi hermana se petrificó cuando nos vio juntos.

-Espero que no te importe que me robe a tu hermana por el resto de la noche.

-No, no, no es toda tuya... en casa ni la queremos ¿verdad Rei?- le dio un codazo a Reiko que estaba más concentrada en la chica a su lado.

-Si, no nos hace falta.

Par de traidoras.

-Fue un gusto volver a verlas, vamos amor.

Me despedí de ellas sacudiendo la mano y tratando de seguir a Mikey.

Siempre fue meloso le encantaba el contacto físico y eso parecía no haber cambiado en absoluto, me sonrojé de solo pensar todas las cosas que podríamos hacer esta noche.

Al parecer todos habían dejado de vivir en la vieja bodega y ahora cada quien tenía su propio departamento en diferentes edificios esparcidos por toda la ciudad.

El de Mikey tenía pocos muebles y una vista impresionante, me quedé embobada viendo las luces de la ciudad y sobre ellas un cielo nocturno muy oscuro.

-¿Te gusta?

-Si es muy bonita- los tacones comenzaban a molestarme e intenté agacharme para quitarmelos pero Mikey se me adelantó, sacándome uno y después el otro con una delicadeza exagerada cómo si me fuera a romper.

F E T I S HDonde viven las historias. Descúbrelo ahora