C A P I T U L O 1 3

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Últimamente he estado muy distanciada de mis novios, incluido Kaku, casi no los veo y tampoco hablo mucho con ellos, esta mañana recibí un mensaje de Kokonoi, quería verme cerca del distrito de Roppongi a medio día.

Me puse un abrigo sobre mi vestido de tirantes y agarré mi bolso donde solo cabía mi celular y mi pequeña cartera.

Salí de la casa y fui con Koko, todo el tiempo iba viendo a mis espaldas o cambiando de acera para perder a cualquiera que me pudiera estar siguiendo, esa fue casi una orden de Mikey.

Ya casi estaba por llegar y a lo lejos reconocí la espalda de Seishu, el se giró y me saludo sacudiendo su mano.

-Creo que Koko también te citó- me dijo, pero se le miraba nervioso y un poco alterado.

-Si, tal vez quiere que le ayudemos con algo... ¿has hablado con él?

-No solo recibí un texto... ¡Naoko cuidado!- Inupi me hizo a un lado, casi aventandome contra el suelo.

Eran 7 tipos uniformados don trajes color carmín, todos igual de grandes.

Seishu es bueno peleando, pero no creo que esta vez pueda él sólo.

-Son unos bastardos- Inui atacó al más cercano a él, lo derribó y siguió con el de su derecha, pero uno de ellos lo golpeó por la cabeza con un bat e Inui se derrumbó.

Corrí a él y otro me agarró, alzándome del suelo cómo si nada y poniéndome la mano en la boca para que no gritara por ayuda.

Un carro negro se estacionó a nuestro lado y nos subieron a ambos.

El hijo de perra de Muto estaba ahí y Sanzu también.

-Más te vale portarte bien Naoko- me agarró una de mis mejillas, apretandola un poco.

-No me vuelvas a tocar.

Podría ser por la adrenalina pero no sentía nada de miedo, solo mucho enojo porque nos acorralaron y atacaron de esa forma.

Cuando lo hizo Sanzu se tenzó y apretaba los puños sobre sus piernas, me miraba a mi y después a Inui que estaba inconsciente a mi lado.

-Ponte cómoda, princesa de la Tokyo Manji, te presentaré a unos amigos.

✨KOKO✨

La puta cabeza me dolía, todo estaba negro y escuchaba palabras incoherentes a mi alrededor.

Cuando abrí mis ojos la luz me caló y solo miraba siluetas, conforme mi vista se fue acostumbrando a la claridad del lugar lo primero que veo es a Inupi golpeado y a Shion sosteniendo a Naoko del brazo.

-¡Quitalé tus putas manos de encima!- Shion tenía la cara y la mano llena de rasguños y un par de golpes, imagino que Nao se los hizo, ella no iba a dejar que se la llevarán sin dar pelea.

-¿No me digas que tienes sentimientos por la novia de tu capitán?- el idiota la agarraba y la movía cómo si nada, la estaba lastimando y la sabía por las muecas de molestia que hacía.

- Si los tengo o no, es mi jodido problema- Ella e Inupi son mis puntos débiles, no puedo dejar que nada les pase.

Naoko estaba furiosa, se le miraba en los ojos, pero su enojo en específico iba para los hermanos Haitani.

-Muto ya tiene a Takemichi, llevenlos a la bodega- ordenó uno de los mastodontes de los ex black dragons.

-La zorra se queda aquí- Shion la tomó de la cara y la hizo que lo volteara a ver, pero Nao le escupió para que se aléjara de ella.

-Esa linda cara tuya se vería bien con un ojo morado.

-¡Si la tocan los mato!- me siento tan inútil atado a la puta silla sin poder defenderla o protegerla.

F E T I S HDonde viven las historias. Descúbrelo ahora