Instintivamente llevé mis manos a mis senos y me volteé a la pared para que Rindou "no viera nada" porque todo mi trasero estaba al aire y lo podía ver perfectamente.
No le importó que el agua siguiera saliendo de todas formas entró a la ducha conmigo.
-Rindou deja de mirarme.
-Esta bien- solo cerró sus ojos pero seguí en los escasos 4 metros cuadrados.
-Salte maldito acosador.
-No te estoy acosando.
Entonces que entre al baño cuando estoy desnuda y me vea de pies a cabeza ¿que significa?
-Que mentiroso de mierda- encerio debí estar muy loca para que Rindou me interesara.
-¿Con esa boquita besas a tus novios?
-No, también se las chupo- le dije con ironía pero es verdad.
-¿No te gustaría tener uno más?
-Lo siento Rindou pero tu hermano no es mi tipo.
Los dos son iguales su tolerancia a la frustración está en ceros.
-Vamos muñeca yo soy su versión mejorada.
-Rindou ya déjame sola, ¡VETE!.
Pero al parecer él estaba más concentrado en coquetearme ignorando mis quejas de que estuviera metido conmigo en la regadera.
-Yo también estoy sucio ¿Puedo ducharme?
-Claro- use mi tono sarcástico -¡Pero en otro puto baño!
Sin querer volteé a ver sus pantalones y no pude evitar excitarme al verle el bulto.
Que poco autocontrol tengo.
-¿Tus tetas siguen siendo igual de suaves?- Rindou levantó sus manos y apretaba al aire cómo si lo estuviera haciendo con mis pechos. Me puse frente a él lo suficiente para que tocara mis senos. -Si lo están.
Abrió sus ojos y se quitó los lentes que ya habían empañado por el vapor del agua que aún caía.
Con brusquedad me agarró de la cintura y me pegó a él, sus dedos acariciaban mi piel.
-¿Alguna vez has sentido que conoces a alguien de toda una vida?
-Nunca- le quité la camisa para sentir su piel contra la mía, es una de las sensaciones que más disfruto.
-Pues yo si y es contigo, sigo sin saber que es eso que tienes que me parece irresistible.
Muchas veces pasa que cuando tienes sexo constantemente con alguien logras desarrollar sentimientos hacia esa persona y creo que fue lo que le pasó a Rindou, soy una chica bastante ordinaria sin nada especial.
-¿Me sientes?- sus manos me agarraron el trasero y me empujó contra su pelvis.
-No lo suficiente Rindou.
-¿Quieres que esté dentro de ti?- sus dientes tocaban la piel de mi cuello y lamia las pequeñas gotas.
-Por supuesto Rin.
Rápidamente se quitó toda su ropa baja y su erección ya era de un tamaño prominente.
-Déjame jugar con mis nenas un rato- su boca atrapó uno de mis pechos, mordiendo mi pezón y pellizcando el otro.
Sentía una humedad constante en mi parte baja y no era por el agua, Rindou dejó mis pechos y se dedicó a hacer pequeñas marcas rojas por toda mi piel.
Si mis novios y marido se dan cuenta lo van a matar.
-Nao no traje condón
¿Ah? Entró aquí, me provocó y ahora dice que no trae el puñetero condón ¿entonces si no vino a coger por qué carajos entró?
Tomo mis píldoras todos los días sin falta y estoy en constantes chequeos de ETS, puedo asegurar que Rindou también y no podría en riesgo mi salud.
-Eso será un problema para la Naoko del futuro.
Me agarró las piernas y me levantó del suelo, yo las enredé en su cadera y con una mano suya alineó su pene y lo metío.
Yo me agarré de sus hombros y él bajó ambas manos a cada una de mis nalgas para darse apoyo.
Sus labios atraparon los míos de forma posesiva, moviendo nuestras cabezas para besarnos desde un mejor ángulo.
Se despegó un poco y volvió a pegar nuestras pelvis, ahogando un sonido de satisfacción en nuestro candente beso.
Lo volvió a hacer, en otras ocasiones había sido muy salvaje y descuidado, pero hoy estaba tomándose su tiempo para sentir la satisfacción de su pene siendo apretado por mi vagina.
Cada embestida parecía que apuntaba en llegar a mi útero, cuando dejaba de besarme y se dedicaba a mordisquear mi cuello yo gemía incontrolablemente sabiendo que el agua cayendo apagaba mis sonidos de placer.
-Ah~ ah~- solo podía gemir y era incapaz de hacer una sola oración coherente.
-Naoko ¿por qué no estabas a mi lado cuando desperté?- Escuché la voz de Hanma del otro lado del baño.
¡Mierda, carajo!
-Rindou detente- le di pequeñas palmadas en el hombro para que dejara de moverse.
-¡Hanma mi amor, no entres por favor!
Casi se escuchó cómo una suplica y a Shuji le encanta que suplique, que lo haya hecho fue una invitación abierta a que pasara.
El rechinidó de la puerta abriéndose me alertó y Rindou estaba pasándosela bomba con la situación.
Este hombre disfruta tener sexo y que exista la posibilidad que lo descubran.
-No tienes idea de lo decepcionado que estoy de ti, que pesima novia... creo que debes compensarmelo.
-Claro que lo haré Hanmm~ah- el imbécil volvió a embestirme pero más rápido y sin despegarse demasiado para no hacer ruidos.
Mi mano se levantó y se estampó en su cara dejandole el lado derecho rojo.
-Perdona- le susurré, pero en lugar de molestarlo pareció que le excitó más que lo abofeteara.
-Vamos zorrita sabes que te encanta que esté dentro de ti.
-Si, pero...- tengo que pensar en algo rápido, Hanma es capaz de irse a los golpes con Rindou porque estamos teniendo sexo -Tengo el periodo.
-Que perra mentirosa- sus dedos se clavaron en mis nalgas y me mordió el pezon al punto de que casi suelto un chillido.
-¿Y eso cuando nos ha detenido?
Yo me mordía el labio inferior para no delatarnos, estaba más concentrada de salvar nuestro pellejo que no sabía que ya había llegado al orgasmo hasta que mojé a Rindou.
-Hanma es el... primer día y sabes que no me gusta hacerlo cuando comienza mi periodo.
-Esta bien, puedo esperar hasta mañana.
-¡Gracias amor!
Escuché la puerta cerrarse y escondí mi cara en el arco de su cuello para soltar un gemido escandaloso.
Podría hacerlo todo el día con Rindou, tal vez no vaya a acostarme con él de nuevo si es que aprecia su vida.
-Pero hablo encerio Nao, dame lo que Kakucho y ellos tienen- su cabello mojado caía un poco por sus ojos, pero su mirada me decía lo decidido que se encontraba.
-Demuéstrame que no soy solo sexo para ti.
-¿Quieres que combata en un duelo por tu amor?- tiene una sonrisa muy cautivadora -No soy bueno con las espadas pero daré mi mejor esfuerzo.
-Nada de berrinches por llamar mi atención- bastante tengo con los de Sanzu cómo para aguantar los de alguien más -Rin quiero que tengas en mente que tu novia tiene esposo y novios ¿vas a estar bien con eso?
-Si, solo si así puedo decir que Satō Naoko es mi pequeña muñeca pudo compartirte.
Tuve que volver a lavarme porque dejé de estar limpia gracias a Rindou, aunque no es queja.
Necesito decirles si o si de mis nuevos novios a los viejos sin que pierdan la cabeza y se lancen a los golpes con ellos.
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F E T I S H
FanfictionHistoria +18 Donde la Oc conoce a la Kanto Manji y el cómo por jugadas del destino termina enredada con ellos. Se tocaran temas sensibles cómo: Drogadicción. Prostitución. Sexo. Problemas psicológicos. Entre muchos otros. No irá acorde al manga pero...