F E T I S H

C A P I T U L O 2 3

Hajime me había preparado una supuesta sorpresa, hasta me vendó los ojos y actuaba muy misterioso, no era el mismo chico que siempre pero ya había recuperado un poco más los ánimos y estaba más atento que de costumbre. Por momentos creí que iba a dejarme y eso me entristecía pero cómo siempre estaba soprepensando la situación y al final resultaba no ser tan mala cómo yo creía.

-¿Ya casi llegamos?- sus manos estaban en mi cintura y él iba guiándome para que no me cayera.

-Espera un poco más, estamos a unos metros- la venda sobre mis ojos se aflojó y finalmente todo se iluminó dejando ver un lindo Porsche plateado con un estilo muy clásico -¿Te gusta?

Es una pregunta muy estúpida, claro que me gustaba pero solo de verlo sentía que me faltaba un riñón de lo costoso que lucía.

-Koko, es muy bonito pero debió costarte una fortuna.

-Mi novia se lo merece- ¿esa cosa con ruedas es mía?

-Pero tu novia no vale un autodeportivo.

-Si lo vale mi bella Naoko- me abrazó por la espalda y recargó su mentón en mi hombro -Desde ahora te consentiré siempre que pueda.

-¿Por qué? Sabes que no necesito regalos caros- pero no obtenía respuesta, Koko solo me besaba el cuello y me susurraba cursilerías evitando contestar mi pregunta -No te hagas el oídos sordos y contéstame Hajime.

Hubo otro largo silencio en el que solo se escuchaban los sonidos de nuestro alrededor, Me di la vuelta poniendo frente a Kokonoi y mi novio evitaba a toda costa verme a la cara.

-El anillo que te dio Sanzu se supone que era el que te iba a dar yo- ¿él iba hacer que cosa?

-¿Qué?

-Quería proponerte matrimonio Naoko, quería ser yo quien te recibiera en el altar, que llevaras mi apellido... que tuviéramos nuestros hijos- sus ojos se estaban enrojeciendo y su voz se estaba cortando, ¿por cuanto tiempo se estaba guardando eso?

-Hajime...- me quité el anillo de compromiso y se lo di a Koko -entonces proponme matrimonio.

Él me agarró la mano y me puse el anillo en el dedo, estaba decepcionado y muy triste también.

-No puedo amor, las probabilidades de que te descubran es una en un millón, pero ni por eso quiero arriesgarme, te casaras con Sanzu, porque no quiero ir a hacerte visitas conyugales a la prisión.

¿Por qué estos idiotas interponen mi felicidad sobre lo suya por mi culpa?

Se supone que la muerte de Yashio es solo mi culpa y al parecer se esta volviendo responsabilidad de todo el mundo menos la mía.

-Koko, quiero que sepas que yo te escojo cómo mi esposo, aunque no nos vayamos a casar necesito que comprendas que mi corazón y mi vida fueron tuyas desde un principio- es todo lo que podía ofrecerle.

Si tan solo ambos hubiéramos sido honestos con el otro nada de esto estuviera pasando, aunque probablemente nunca hubiera conocido a Sanzu, a Mikey e incluso Hanma, todos ellos son importantes para mi porque los amo por igual y no puedo imaginar una vida sin ninguno de ellos.

-Te amo mi niña genio- me envolvió en sus brazos impregnándome con su aroma, disfruté mucho de eso, Koko no es el más cariñoso y nuestras personalidades todo el tiempo están chocando una con la otra pero siempre somos incapaces de separarnos por demasiado tiempo.

Me encantaba mi nuevo auto, pero había un pequeño problemita con el.

-Koko

-¿Mmhmm?