Simplemente Ella

Capitulo XXXIII

30 de Marzo, Primavera.

Los días habían transcurrido tranquilos, realmente normales, no había nada que contar y nada cambió, la noche que me llevé a Alice, solo la dejé en su casa, ¿Dónde más la podría dejar?, quizás si soy demasiado quedado, pude habérmela robado, pero, ella no se veía del mejor ánimo y a mí aun me sangraba el labio de los golpes, el colegio por su parte aún mantenía en duda si Gram había o no dejado a Milly en los barrios bajos, y si realmente era cierto que a ella la habían violado, eran demasiado estúpidos y solo vivían por lo que Gram decía o no, a mí no me importaba, me divertí muchísimo en reírme de Gram por tener una venda en la nariz a causa de los golpetazos que le di.

Y allí me encontraba yo, fumando en las gradas, extrañamente hoy es uno de esos días en los que no llueve, pero hay un frío agradable y las nubes grisáceas blanquecinas cubren el cielo, solo se escuchaban algunas avecillas canturrear y yo... Bueno con mi cigarrillo entre mis dedos, sentía una gran paz interior, que realmente... No duró mucho -¡Hey Xan!

-¡Xander!

-¡Hey!

-¡Hola Guess!- Así aparecieron Ángel, Guel, Winder y Alice, y bueno, ya no se me hacía extraño, Alice había comenzado a pasar más tiempo con los chicos desde que se enteró lo de Gram, aunque, ya le hablaba, aun así su trato era distanciado, me hacía sentir aliviado, aunque su trato con Naivol, seguía siendo muy cercano, eso me molestaba.

-¿Qué haces Xan?- Nuevamente esas preguntas entrometidas que tanto la caracterizan, lo peor de todo es que le costaba mucho analizar la situación, la respuesta era simple, ¿Qué hacía?, bueno, fumaba, era claro, "chica tonta" pensé –Eres demasiado entrometida Lynn- Todos rieron al escuchar mi respuesta, pero Alice solo hizo un mohín y una mini pataleta, reí al verla y tomándola del brazo, la jalé hacia mí, abrazándola y dándole un beso en la mejilla, acto que hizo que todos los chicos automáticamente comenzaran con sus bromas.

-¿Ya son novios?- Atacó Guel, levantando la mirada de su celular y mirándonos a ambos, Alice tartamudeó tratando de conseguir una respuesta –No- Contesté, quizás muy frío y seco, la chica desvió su mirada y soltó un suspiro -¿Por qué no lo son?- Preguntó Ángel ahora, colocando su clásica cara de interrogatorio, misma con la que parecía pato con estreñimiento –Es complicado ¿de acuerdo?, el amor no es algo que se toma a la ligera- Respondí, dejando muy en claro lo que pensaba respecto al tema, Alice solo miraba al suelo de las gradas, y me hizo sentir muy mal ver su expresión, era una especie de frustración o quizás retenía sus sentimientos, me hizo sentir fatal –Hey- Musité, mirándola, acercándome a ella nuevamente y tomando su mentón con mi mano derecha, rodando su cabeza hacia mí para que se girase a verme, sus caobas ojos se clavaron en los míos, el mundo es muy distinto cuando la veo a los ojos, y ¡Demonios!, sabía que estaba enamorado, pero, me aterraría estar en una relación, arruinar todo, lastimarla, no quería que eso pasara –No necesitamos etiquetas para ambos saber que somos un rame idílico- La chica sonrió mientras todos nos veían con rostros confundidos -¿Qué diablos es un rame ídilico?- Preguntó Ángel, algo exasperado que hizo que yo riera –Rame es la belleza del caos, idílico es algo perfecto y hermoso, juntos significarían "Un desastre hermoso en su perfecta imperfección"- Contesté a la pregunta de Ángel, y Guel fue quien refutó -¡Me das asco!, Jajaja, ¿Desde cuando eres poeta, imbécil?.

-Bueno... Imbécil soy, y poeta, es lo que esta tarada me hace ser- Me giré a mirar a Alice, y esta gritó exasperada -¡Tú eres el tarado idiota!

-Así me quieres- Refuté, observándola con aires de superioridad porque sabía que yo ganaba este absurdo debate, todos rieron, realmente, todos carcajeamos juntos, fue algo lindo.