Simplemente Ella

Capitulo XXXIV

01 de Abril, Primavera

Bueno había despertado pero admitía que no estaba listo para lo que hoy planeaba hacer, ¡Al demonio!, ni si quiera tenía un plan para serme sincero a mí mismo, me levanté temprano dispuesto a planificar algo, pero, ahora eran las 7:40am y ni si quiera tenía el uniforme arreglado, al final me di por vencido, tuve que pedir nuevamente la ayuda de mi mamá.

-¿Dónde puedo llevarla?- Pregunté cuando por fin estuve frente a mi madre, la cual giró bruscamente al escucharme hablar, ya que no se había percatado de mi presencia en la cocina -¡Por Dios Xander!, no aparezcas así, vas a matarme de un infarto- Dijo, sujetándose su pecho por el sobresalto que había dado –Lo siento...- Musité, tomando un pan entre mis manos y semi sentándome en el mesón -¿Qué me has dicho?- Preguntó mi madre, mientras terminaba unos huevos revueltos, realmente yo no comería de allí, tenían aspecto del vomito de un ebrio, de solo pensarlo sentí que se me revolvió el estómago por las náuseas, nuevamente enfocándome en lo que preguntaba, miré a mi madre -¿Dónde puedo llevarla?- Mi madre alzó sus hombros y soltó un suspiro –No soy la mejor persona para darte consejos de amor Xander- Solté un bufido cansado y reformulé mi pregunta –Como mujer ¿Dónde querrías que te llevaran?- Mi madre soltó un suspiro y se giró a mirarme, me señaló con el cucharon con que preparaba los huevos –Llévala donde ella ame estar, piensa que le gusta y llévala allí, y si me das nietos, te mataré- Me ahogué con el trozo de pan que estaba por engullir, tosí tratando de recuperar el aliento y reí -¡Demonios, ni loco!- Recuperé el aliento –No puedo ni conmigo, casi no la soporto a ella, no aguanto a más nadie, no criaría un niño- Contesté, mi madre negó con la cabeza y sonrió -¿Vas a desayunar Gabe?- Volví a echar un vistazo a los huevos e hice un mohín –Compraré algo.

-De acuerdo cariño- Tomé mi mochila y salí de la casa, subí a la moto y me quedé pensando ¿Dónde demonios llevaría a Alice?, ¿Qué chingados le agrada?, una abeja comenzó a molestarme en ese momento, no quería largarse, estaba dispuesta a picarme, trataba de quitármela de encima, cuando la idea vino a mi cabeza, a Alice le gustaban los animales, ya sabía a donde la llevaría.

...

Para ser completamente sincero, hoy no planeaba entrar a clases, no llegué temprano al colegio, pero, sí llegué antes que Alice, así que me quedé en el estacionamiento a esperar que ella llegase, vi entrar el deportivo de Gram y sabía que allí venían Rhos y Alice con él, el deportivo se estacionó y yo observaba desde mi moto sentado, Alice salió con un semblante de molestia del auto, Rhos salió después y fue el primero en darse cuenta de mi presencia, acercándose a Alice, que dirigió la mirada hacia mí y apretujó sus labios conteniendo una sonrisa, abrazándose a sí misma con su mochila en su mano, estaba lejos por lo que no escuché lo que Rhos le dijo al acercarse a ella, Gram salió del auto y mirándome se acercó a Alice, pero al instante, Alice se alejó un paso hacia atrás para que Gram mantuviese distancia, el chico bufó enfadado, se giró a verme dedicándome una mirada asesina, se colocó su mochila e ingresó a la institución, Rhos trató de tomar a Alice del brazo para hacerla pasar, pero esta se soltó del agarre, le dijo algo que fue inentendible y se quedó de pie con el rostro desviado de Rhos, este se giró a mirarme, vio a su hermana e ingresó a la institución, Alice esperó unos segundos, se giró a mirar la entrada, muchos chicos llegaban al colegio, ella se giró a verme, sonrió y abrazándose a su pecho, caminó en dirección a donde yo me encontraba, volvió a girar su vista a la entrada, y viéndome nuevamente, por fin llegó a donde yo me encontraba –Hola despeinada- La chica esbozo una sonrisa, que ¡Demonios!, era la más bella que hubiese visto –Hola obstinado- Rodé mis ojos y dejé escapar una sonrisa torcida –No soy obstinado- Musité, y la chica carcajeó -¡Sí lo eres!- Dijo entre risas –Sube- Le ordené, mi voz era segura y firme, quería que no tuviese la oportunidad de pensarlo, encendí la moto y soné el motor, llamé la atención de muchos entrometidos que giraron a ver, debido al ruido del motor –Tenemos clases Xan... Debo entrar- Dirigí mi mirada hacia la nada, solté un suspiro –Bien, vete a tu clase, pero yo no me quedaré- Realicé la acción de querer arrancar la moto, cuando Alice avanzó un paso rápido hacia mí, extendiendo su mano en dirección a mí y con su mano disponible aferrándose a su mochila -¡Espera!- Detuve la moto, bufé y me giré a mirarla con fastidio -¿Sí?