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Nadie dijo nada, así que siguieron con su camino.

A la mañana siguiente, Kara y Lena se levantaron temprano, habían descansado después de tantos días acampando al aire libre y durmiendo en el suelo. Una cama mullida era la bienvenida para sus cansados cuerpos.

Cuando despertaron enfocaron su vista en la habitación, era grande, con una chimenea enorme a un lado. Intentaron recordar donde estaban.

—Creo que estamos en Camelot o hemos ido a ver alguna ciudad medieval y nos hemos colado en alguna habitación de un castillo. —dijo Kara.

—Creo que es la opción uno.

— ¿Qué vas hacer hoy?

—Ayer mi abuelo me dijo que me entrenaría, así que voy a verlo. ¿Y tú?

—Daré una vuelta por la ciudad.

—De acuerdo.

Se vistieron y salieron de la habitación.

Se vistieron y salieron de la habitación

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 Por el camino se encontraron a Arturo

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Por el camino se encontraron a Arturo.

—Tío, buenos días.

—Buenos días. —dijo sonriendo. — ¿A dónde vais?

—He quedado con el abuelo y Kara va a dar un paseo por la ciudad.

—La habitación de Merlín está por este pasillo todo recto, después giras a la izquierda y verás una escalera de subida, te llevará a su torre. —explicó Arturo. —por cierto, vas en dirección contraria, está detrás de ti.

—Gracias tío. —besó a Kara y se marchó.

—Kara, ¿puedo hablar contigo? —preguntó más serio.

—Claro majestad, no tengo nada que hacer.

—Bien. —caminaron juntos.

Arturo le preguntó por la vida de Lena, Kara le contó todo y no solo sobre su novia, también sobre ella. No quería mantener el secreto a la familia de Lena, ya que su familia sabía de los poderes de la morena.

Amor verdadero (supercorp, Swanqueen)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora