La vida de Regina Mills, Emma Swan y Henry cambia por completo y se mudan a Nacional City, allí conocerán a Supergirl y con el tiempo se harán amigas.
Kara y Lena son novias desde después de la batalla contra Reing, Kara se atrevió a decirle la ve...
Lois estaba en casa cocinando para ella aunque hizo un poco más por si su novia aparecía. No sabía cuando vendría Diana ya que estaba en el D.E.O controlando la ciudad con la ayuda de Brainy, quería estar allí por si había que actuar rápido en algún momento.
Lois terminó de preparar la comida y se sentó en la mesa cuando iba a tomar un sorbo de vino recibió un mensaje de Diana diciéndole que llegaría tarde. Así que antes de comer guardó lo que sobraba en la nevera y después cenó.
A las tantas de la noche, Diana abrió la puerta de la entrada con cuidado y miró a su alrededor, estaba todo a oscuras, usó su teléfono para tener un poco de luz, cerró la puerta con cuidado y fue al dormitorio de su novia. Estaba cansada, no fueron necesarios los servicios de Wonder Woman, así que se pasó parte de la tarde y noche en la agencia mirando las cámaras y la gente ir de un lado al otro, más el cambio de turno de los agentes, se aburrió muchísimo, deseaba que Kara volviera pronto.
Se cambió de ropa y se acostó despacio para no despertarla, pero no funcionó mucho porque Lois se movió y gimió.
Diana se quedó quita para ver si se había despertado o no, al ver que no se movía ni hablaba se relajó un poco y terminó de meterse.
Al instante sintió como Lois la abrazaba.
—Lois, ¿estás despierta? —dijo en voz baja, al no oír respuesta cerró los ojos y se durmió.
A la mañana siguiente, cuando Diana se despertó no vio a su novia por ninguna parte, se levantó y salió de la habitación, se acercó a la cocina y al pasar por delante del baño oyó el agua de la ducha caer, así que decidió preparar café mientras la esperaba, después se metería ella en el baño para arreglarse.
Miró el piso, era un estudio muy parecido al de Kara, pero era espacioso y tenía todo lo necesario.
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—No entiendo porque alquilé el dúplex en el que vivo, es mucho más caro y es demasiado grande. —se dijo para sí misma.
Lois salió del baño con una toalla en el cuerpo y otra en la cabeza, se lo estaba secando, cuando levantó la cabeza vio a Diana en la cocina.
—Buenos días. —sonrió, se acercó a ella y la besó en la mejilla.
—Buenos días. —dijo Diana, en ese momento la cafetera pitó. —el café ya está hecho.
—Estupendo, voy a vestirme.
—Pues yo me meteré en la ducha.
Cada una se fue a sus respectivos destinos.
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