Capitulo 72: observada

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poché

trataba de almorzar en paz como lo he venido haciendo durante estas semanas y sigo sintiéndome observada, aunque es lógico que lo hagan si todos saben lo que le pasó a calle y los profesores me dieron chance de ponerme al día con los trabajos solo por la noticia. Esto no iba a ser fácil y lo estoy viviendo día a día.

—¿ya casi terminas?

—tardaste mucho —respondí extendiéndole su bandeja

—no seas exagerada poché solo fueron diez minutos, y gracias —guardó sus cosas en la silla de al lado para ponernos al día ya que ayer no pude hablar con ella

—como tú digas —iba a tomar mi bandeja para ponerlo a un lado cuando ella me detuvo

—¿Qué se supone que estás haciendo?

—¿no es lógico? Ya no quiero —me sonrió para regresarlo a su anterior posición, frente a mí —Pau...

—tienes que comer bien, te la pasas aquí y luego en el hospital con calle, no quiero que te enfermes así que termina de comer ¿quieres que te haga comer como una niña? Porque sabes que lo voy a hacer

—ok, lo haré ¿contenta? —lo hice frente a ella, y en cuanto le mostré mi plato completamente vacío aplaudió haciendo que rodara los ojos —dejaré esto, ya regreso

—¿me traes una botella de agua?

—como tú digas princesa —dije dirigiéndome a comprar lo que me pidió cuando choqué con alguien haciendo que tire lo que había comprado —lo siento tanto, en verdad no me di cuenta

—tranquila no pasa nada, compraré otro y ya ¿estás bien? —sonreí por lo que dijo, acabo de tirar su almuerzo y ¿él me pregunta si me encuentro bien?

—lo tiré yo, es justo que yo te lo pague —busque en mi cartera y le extendí el dinero, dudó en aceptarlo, pero terminó accediendo cuando le dije que no me iría si no lo recibía

—gracias

—bye, disfruta tu comida —dije tomando las botellas de agua para regresar con paula quien estaba entretenida en su teléfono, esta mujer no tiene remedio —estoy bien amiga gracias por preocuparte por mi

—¿Qué? ¿Qué pasó? —dijo observando por todos lados

—ya no pasa nada amiga, solo le tiré el almuerzo a un chico y fue vergonzoso —ella abrió la boca, pero luego la cerró negando, fue gracioso observarla —¿Qué sucede?

—te iba a preguntar si era guapo, pero yo tengo a Joaquín y tú estás casada con un mujerón así que no tiene caso

—exacto amiga y ahora termina de comer para que me cuentes cómo va el caso de Johan —ella rodó los ojos —¿ahora qué te pasa?

—pasa que solo me compras el almuerzo para contarte lo que Joaquín me cuenta —estaba en lo cierto

—sabes que esa no es la única razón paula, lo hago porque me gusta tu compañía y que me cuentes lo que Joaquín te dice, tampoco te hagas que sabes que él te lo dice porque sabe que no te quedaras callada y terminaras contándomelo ya que él no puede hablar de eso con algún involucrado en ese caso

—yo también estoy involucrada, soy tu amiga ¿recuerdas?

—yo que sé por qué lo hace paula, tu solo cuéntame ¿hay alguna novedad con la empresa? —necesitaba saber si el patrimonio de calle podía ser recuperado

—ya casi terminan de investigar ese tema y al parecer empresas calle está más que limpia, lo malo es que aún está en manos de los Vera y ellos si tienen mucho que rendir, dijo que Matu tiene una solución, pero eso no me lo dijo

perdóname (caché g!p)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora