perdóname (caché g!p)

Capítulo 17: perjudicando a calle

Calle

Me siento la mujer más feliz del mundo, le dije mis sentimientos y ella no me rechazó como me temía, pero tampoco me dijo que si, aunque esa respuesta ya lo sabía y en verdad la entiendo. trataré de demostrarle que no quiero lastimarla y me esforzaré mucho en enamorarla o hacer al menos que se sienta a gusto conmigo, quiero que me vea como su amiga o mejor aún como su mejor amiga, una amiga que está enamorada.

—siento que esa sonrisa no te la quita nadie —nana tenía razón y como no, con lo que estoy viviendo

—estoy feliz nana, poché me dijo que nos conociéramos, veremos que pasaba y te juro que haré hasta lo imposible para enamorarla —ella me abrazó emocionada y yo le correspondí de inmediato

—estoy segura que lo lograras hija y me da mucho gusto verte así de feliz, solo no la presiones mucho ¿sí? —claro que no la presionaría, no quiero perderla sin aun tenerla

—lo sé nana, no te preocupes —seguimos poniendo la mesa cuando una linda chica hizo su ingreso con una hermosa sonrisa y ese brillo especial en sus ojos me atrapó de inmediato.

—hola Dani —morí, ayer casi salto de emoción cuando me lo dijo, pero me contuve y mucho, escuchar mi nombre de su boca es increíble y más aun con ese diminutivo tan tierno —hola nana —se acercó y le dio un beso mientras yo me imaginaba a ella haciendo lo mismo conmigo, pero tendré paciencia.

—¿Cómo amaneciste? —pregunté sirviendo mi café y ella ayudó a llevarlo a la mesa justo frente a ella.

—a decir verdad, no había dormido tan bien desde hace mucho y también hablé con vale sobre lo que me dijiste

—qué bueno y en verdad espero que se comunique con alguna de las dos, yo trataré de ubicarlo por otro lado y si lo encuentro te lo haré saber de inmediato ¿de acuerdo? —ella iba a hablar cuando vale ingreso a escena y se la veía triste.

—¿ayudaras a mi papá a pesar de lo que te dijo? —entendía su pregunta y tal vez en otra situación no lo hubiese hecho por el daño que les causó a ambas, pero ahora es distinto, es el padre de la mujer del cual estoy enamorada y tampoco puedo dejarlo a su suerte, las únicas que sufrirían son poché y vale y ya no quiero verlas llorar más.

—nunca me he dejado llevar por eso vale, juan Carlos es tu padre y cometió muchos errores, pero ¿estarías bien si sabes que tu papá la está pasando mal? —ella negó —pues por eso lo hago, no quiero verlas sufriendo nunca más y si puedo evitarlo, lo haré ¿eso responde a tu pregunta?

—gracias —dijo abrazándome y le correspondí viendo a poché quien limpiaba una pequeña lagrima que rodó por su mejilla.

—ahora desayunemos que ustedes tienen clase y yo mucho trabajo que hacer —todas empezamos a desayunas mientras hablábamos de lo que sería buena elección para la cena porque nana quería hacer algo especial por las buenas noticias.

Al final dijo que nos sorprendería así que lo dejamos en sus manos, ella cocina delicioso y creo que aprovecharé para invitar a Laura y Juancho ya que hace mucho no tenemos una cena en familia.

Vale subió a su habitación mientras poché y yo salíamos para subir cada quien en su auto e ir a sus respectivas labores cuando se me ocurrió una buena idea.

—¿almorzamos hoy? —ella se detuvo antes de subir mientras Joaquín seguía sosteniendo la puerta

—hoy tengo clases hasta muy tarde y me toca almorzar en la universidad —no contaba con eso, pero no me daré por vencida tan fácilmente.

—entonces voy a tu universidad y así almorzamos con los chicos —ella me sonrió lindo y supe que lo había conseguido

—está bien, nos vemos en el almuerzo entonces —yo estaba feliz y no puedo ocultar eso y creo que Joaquín trata de evitar reírse de mí, aunque aparenta no hacerlo demasiado mal por no decir pésimo.