perdóname (caché g!p)

Capítulo 58: ¿perdimos todo?

Calle

Acabo de perder la empresa de mis padres y no sé cómo sentirme, quizá si no supiera la verdad estaría despotricando en contra de Johan o golpeándolo ¿Quién sabe? Pero ahora solo quiero que se recupere y encontrar el momento indicado para hablar con él.

Necesito hacerlo, necesito abrazarlo, necesito pedirle perdón por todo lo que dije de él sin saber que lo hacía por mí. Ahora lo sé y quiero enmendar mis actos de alguna manera.

—¿estás bien?

—no lo sé, acabo de perderlo todo ¿Cómo debería de sentirme? —ella sujetó mi mano y lo acarició levemente

—lo perdimos todo, pero ahora sabemos la verdad —dijo sonriendo y yo negué de inmediato

—yo perdí todo poché, tu no

—¿Cómo...?

—¿recuerdas el documento de la absorción? —ella asintió —pues yo no tomé nada tuyo poché porque serias tu quien administré tus acciones, esa empresa fue tuya mucho antes de casarnos y yo no quise poner eso a nombre de ambas así que eso sigue siendo tuyo y de tu hermana

—Dani...

—debiste leer lo que firmabas —dije viendo su asombro

—entonces ¿tus acciones están en manos de Johan, pero no las mías?

—así es y supongo que todo seguirá siendo como hasta ahora solo que yo no estaré para manejarlo, estoy segura que Johan será quien lo dirija porque será como un trofeo para ellos —poché me robó un beso

—¿Quién crees que se hará cargo de mis acciones? Yo no me siento preparada para hablar con Johan, pero si tu estas ahí tal vez puedan encontrar una solución ¿no crees? —poché tenía razón, pero también sé que tengo que seguir siendo una mierda con él y ya no sé si pueda.

—todo cambió poché, no sé ni cómo mirarlo a la cara —sujeté mis manos en un intento de tranquilizarme esquivando su mirada —siempre fuimos muy amigos, nunca desconfió de mí ni yo de él, solo recuerdo habernos peleado una sola vez y fue porque bebí de más en una fiesta y no le agradó ¿sabes que hizo? —poché negó escuchando lo que le contaba —era la fiesta de un amigo y pues yo solo me dediqué a tomar desde que pisé esa casa, Johan me estuvo diciendo que me detenga desde el tercer trago pero no le hice caso hasta que me tomó del brazo y me dio un golpe en la cara para caer a la piscina a ver si así entendía

—fue buena idea creo yo —dijo sonriendo

—sí, pero no fui la única que terminó mojada esa noche porque estaba tan ebria que no pude salir sola y Johan tuvo que sacarme cargada. Él nunca dejó que me hiciera daño poché, por mínimo que sea siempre estuvo para mí y le prometí jamás desconfiar de él —era imposible no sentir culpa sabiendo todo lo que hizo solo para que yo no me vea perjudicada —debí preguntarle, debí indagar por qué hizo lo que hizo, debí buscarlo y golpearlo hasta que me diga la verdad

—sabía que no lo harías

—me conoce muy bien, incluso más que yo misma

—yo aún le tengo miedo Dani, no creo poder...

—no quiero que me malinterpretes mi amor, yo tengo muchos motivos para sentirme culpable, pero sé perfectamente que lo que hizo está mal, te lastimó y de la peor manera, eso no se lo voy a perdonar —la abracé haciéndola sentir segura y solo quise quedarme así, sintiendo ese calorcito que me llena el alma.

Todo parecía marchar bien, al menos para mí porque poché seguía conmigo y mi adorable hijo perruno yacía dormido en mis piernas, ni siquiera soy capaz de mover un musculo para que no despierte. Se ve en verdad demasiado adorable y me muero de amor por él y mi esposa.