Capítulo 61: amistades y familia

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Calle

Mientras veía el maravilloso cielo desde el capó de mi auto solo podía recordar lo grandioso que es tener en mis brazos a poché, estoy perdidamente enamorada o quizá obsesionada con ella, con su cuerpo, con sus caricias y sus besos cada vez más adictivos. Todo con ella suena como un maldito cuento de hadas.

—esa sonrisa tiene nombre y apellido

—así es —respondí reconociendo su voz

—¿Qué es este lugar y por qué me citaste aquí? —Johan observaba el lugar mientras yo me reincorporaba para verlo de frente, es la primera vez que hablamos después de su accidente y demoró muchos días, pero al fin se logró.

—deberías de sentirte afortunado, este lugar no es conocido y fui yo quien te lo está mostrando —extendí mi mano para que subiera y lo hizo al instante —que bueno que estés bien.

—debería golpearte por idiota

—no tendrías oportunidad si yo lo hago primero —respondí segura y pude ver su sonrisa —no lo hago porque aun estas convaleciente y no sería justo

—¿Por qué sigues aquí? —yo bajé la mirada —se supone que tenías que llamar a Matu

—no te iba a dejar....

—era tu salida Dani, ibas a estar alejada de todo esto con nuevas identidades en cualquier lugar del mundo, tendrías una vida feliz junto a poché ¿Por qué te quedaste?

—por ti, no podía dejarte aquí y permitir que te sigas sacrificando por mí

—esa es mi decisión

—¡la mía también! ¡también era mi decisión y ustedes no me dejaron opinar! ¡tú y mi papá me hicieron a un lado!

—era necesario —dijo viendo la grandiosa vista —tu tenías que estar a salvo

—¿y qué hay de poché? ¿Qué hay de ti?

—tu papá estaba preparando su escape, yo tenía los pasaportes falsos solo necesitábamos que valentina cumpla la mayoría de edad y se irían lejos. Ese era el plan, pero pasó lo que ya sabes

—debieron decírmelo y....

—¿y que tu también entres a ese mundo? Eso sobre mi cadáver Daniela. Ni tu padre ni yo queríamos eso así que te alejé de mí haciendo que me odies

—violando a una chica que no tenía la culpa de nada ¿esa era tu solución, Johan? —él bajó del auto y empezó a caminar así que lo seguí —¡dime Johan! ¡¿esa era tu solución?!

—¡no! !claro que no! mi solución era acabar conmigo, mi solución era dispararme justo frente a mi padre y que se olviden de hacerle daño a poché, esa era mi solución y puse esa arma en mi cabeza, justo aquí —señaló su cien mientras sus lágrimas caían sin control —iba a acabar con mi vida Dani ¡yo no quería ser un asesino mucho menos un maldito violador! Estuve a punto de presionar el gatillo cuando mi padre mencionó a Mafe...

—¿mi mamá?

—tomó su teléfono y llamó al hombre que la cuidaba, le dijo que pusiera un arma en su cabeza y disparara en cuanto se lo ordene —limpiaba sus mejillas y hacia aun pequeños gestos de dolor —si me disparaba también acabarían con la vida de tu mamá y yo no podía hacer eso, ella es como mi madre y lo sabes. No iba a permitir que ese maldito enfermo le ponga un solo dedo encima

—ella...

—no lo sabe, tampoco se lo dije a tu papá porque esa culpa era solo mía, fue mi decisión. Fue mi decisión arruinarle la vida a poché a cambio de no acabar con tres vidas esa noche

perdóname (caché g!p)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora