dangerous.

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S E S E N T A Y S E I S

b u c k y b a r n e s

dangerous.

bucky point o view.

Despertar lleno de una capa de sudor y la respiración agitada no ha dejado de ser parte de las secuelas que el soldado del invierno ha dejado en mi mente, por lo que en el momento que logro salir de aquella pesadilla expulso con fuerza el aire contenido por mi boca quemando mi garganta en el proceso. Algunos atisbos del sol comienzan a hacerse presente e intento levantarme del frio suelo con la misión de tomarme una ducha helada y salir disparado al cuarto de entrenamiento para olvidarme de aquella maldita pesadilla.

Es lo suficientemente temprano para que aquel espacio este totalmente desértico por lo que me engancho con decisión en la barra sin la necesidad de aparentar sonrisas casuales y hacerle la vida amena a los demás de la torre, como Steve había pedido que hiciera.

Poco a poco el sudor desciende por mi frente recordándome que puedo llevar más de una hora subiendo y bajando por la barra, flexionando los brazos los cuales ya no sienten absolutamente nada, y que son solo otra parte más de mi cuerpo desgastado.

Desciendo con un leve salto de las barras en cuanto escucho algunas risas que se aproximan huyendo prácticamente del lugar.

- Buenos días, Buck. -la rusa saluda con una sonrisa ligera observándome de arriba abajo sin pudor.

- Natasha -asiento con la cabeza y una ceja se enmarca en su rostro a la espera de algo más por mi parte- Buenos días.

Ella ríe enchinando los ojos y golpea ligeramente mi hombro para continuar con su caminar a la sala de entrenamiento detrás de mí, dejándome completamente solo en el pasillo. Obligo a mis piernas continuar con su andar para llegar a mi habitación al final de este y fundiéndome sin piedad en la ducha dejando que cada una de las gotas heladas resbale por mi cuerpo tensando cada uno de los músculos.

- Señor Barnes, el capitán lo necesita en la sala de juntas. -la voz monótona de la inteligencia artificial que controla el edificio se hace presente en el cuarto de baño.

- Gracias por avisarme. -susurro tomando las hebras del corto cabello en mis dedos y empujándolo hacia atrás.

- Es un placer, señor. -pronuncia de vuelta.

///

En cuanto llego a la sala de juntas la oscuridad en este me sorprende, la habitación está parcialmente iluminada por un videoproyector que muestra algunos cadáveres desgarrados en las calles.

- ¿Crees que sea obra de HYDRA? -en cuanto llego a los asientos la voz de Steve me recibe, su rostro demuestra cansancio y sus manos sostienen una pequeña libreta que no deja de menearse de un lado a otro.

- No parece su modus operandi. -murmuro sentándome entre el rubio y Stark que me mira con un poco de simpatía.

- HYDRA podría tener otro alterado. -sus hombros se levantan restándole importancia- Quiero decir, ellos son más de disparos no de cortar penes con lo que parece ser un cuchillo, Rogers.

Los ojos azules de Steve se detienen en el castaño que por muy temprano que parezca toma Whiskey de una manera despreocupada en el sillón.

- Ya sé, "lenguaje" -sonríe haciendo comillas con sus dedos- Pero solo mira esto, Steve. ¿Por qué cortarían y masacrarían esas personas?

- ¿Alguno se te hace conocido? -me pregunta Steve con sutileza.

- No recuerdo que ninguno de ellos estuviese en la base de datos de HYDRA. -rasco mi nuca intentando recordar alguno de los rostros, pero ninguno llega a mi memoria de manera clara.

ONE SHOTS / SEBASTIAN STAN.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora