ONE SHOTS / SEBASTIAN STAN.

una sonrisa en el agua

C U A R E N T A  Y  D O S
b u c k y  b a r n e s .

una sonrisa en el agua.

Desde que tenía memoria siempre lograba convencer a mi padre de subir a la superficie, él intentaba disolver la posibilidad de no subir, pero yo me salía con la mía, siempre lo hacia.
Mi madre era un caso aparte, ella parecía que quería devorar a mi padre del enojo por dejarse convencer, pero él siempre sonreía y decía "Es su cumpleaños, Madeline" y el tema quedaba zanjado.

-Hoy cumples veinte, [T/N] -su sonrisa se ensanchó- ¿El mismo regalo de siempre?

Mi padre demostraba su felicidad de diferente maneras, una de ellas era creando palabras con burbujas hechas por su cola negro brillante.
Nadé hacia él fundiendonos en un abrazo.

-Creo que es hora de que vaya solo yo. -le sonreí rompiendo el abrazo.

-Eh, ¿sola? -bufó- ¿Ya estoy tan viejo como para separarme? -la sonrisa de mi padre era bromista y jovial, él nunca envejecería para mi, ni su cabello blanco que se mecía con las corrientes marinas me decía que ya era un anciano.

-Por favor, quiero ir sola. -asintió con una sonrisa.

-Solo, solo cuidate, ¿bien? -asentí.

Con la emoción a flor de piel besé su mejilla y como si nadase por mi vida moví la cola rojiza con dirección a la superficie.
Esta se encontraba lo bastante lejos de Zhurk, nuestra ciudad marina, y nadar hacia arriba era muy agotador, así que tomando los consejos de mi padre nade zigzagueantemente hasta llegar a ella.
Lo más impresionante de subir a la superficie era el momento que rompías la capa de agua y el aire te golpeaba la cara, la sensación del aire junto al sol cerrando tus ojos por la intensidad era sensacional, con el paso del tiempo lo había denominado la mejor parte de mi vida, amaba esto, amaba subir cada año, y amaría poder hacerlo todos los días. Y aunque deseaba con toda mi vida marina hacerlo, no podría, lo había prometido a mi padre.

El día era soleado, el cabello se pegaba en mi frente por el agua y la sonrisa no se borraba de mi rostro. Nade hacia la playa mirando a lado y lado buscando señales de vida, y sin respuesta salí del agua. La cola rojiza se convirtió en dos largas piernas las cuales terminaban en dos pies  con cinco dedos cada uno. Di dos pasos cortos y aún con la sonrisa brillante di un leve brinco chillando de felicidad.
Camine ligeramente y después de sentir que ya tenía el ritmo trote para terminar corriendo por la playa. El aire mecía mi cabello casi seco y el sol calentaba mi cuerpo con amor.

Después de trotar al rededor de veinte minutos llegué a lo que parecía ser una pequeña aldea, esta era sumamente opaca, no se percibía un color distinto a la escala de grises, se veía, muerta.
Asustada retrocedí unos pasos hasta que algo me lo impidió, volque la vista temerosa y la cara de un hombre me recibió, tenia una sonrisa macabra en el rostro, mis piernas me flaquearon del miedo.

-Vaya, vaya, vaya. -su voz era profunda y burlona- ¿De dónde eres niña? No te había visto por aquí.

-Y-yo, yo ya me iba. -titubeé.

-No lo creo -su sonrisa perversa se estiró un poco más- Ven y juega conmigo.

El miedo se disparó como pez espada en mi; las piernas me temblaban al igual que los labios, sentía el corazón desbocado y los ojos por salirse de sus orbitas. Me odiaba por haber tomado aquella decisión, nunca había estado en contacto con humanos.
No debí haberme salido del agua, me repetía con enojo, realmente me estaba odiando.

El hombre de la sonrisa perversa empezó a tocar mis hombros, sus manos callosas bajaban lentamente por mi cuerpo hasta detenerse en mis muslos temblorosos.

-Que piel tan suave. -gruñó- Me excita aún más.

Su tacto era agrio y fuerte, provocando que viera remolinos malditos mientras cerraba los ojos, quería morir en ese momento.
Los sollozos que salían de mi boca seca me taladraban las cuerdas bucales, quería poder escapar, pero la debilidad se apoderaba de mi cuerpo rápidamente, extendiéndose por todo mi ser.

-Alejate de ella. -otra voz se hizo presente, esta era grave y sonaba muy enfadada.

Abrí los ojos pensando que mi padre había llegado a mi rescate, pero en vez de encontrarme con los ojos verdes y ancianos de mi padre unos ojos océanos me recibieron, estos brillaban con intensidad, pero no podía descifrar el porque.

-Lobo Blanco, largo de aquí. -el hombre de la sonrisa perversa bramó burlándose de él- La encontré primero.

-He dicho que la sueltes. -su voz llegó con más enfado, el silencio se propagó por todo el lugar.

Mi cuerpo se estampó contra el piso en el instante que aquel hombre me lanzaba al suelo sin piedad. El dolor en uno de mis muslos empezó a propagarse por todo mi ser, quería correr, pero mis piernas no respondían.

¡Malditas piernas humanas!

Los dos hombres peleaban con furia; sonrisa perversa intentó estampar uno de sus puños en el rostro de ojos océano pero este lo detuvo con su mano, al verla mis labios vibraron, eso no era un brazo humano, eso era otro material, la medalla de mi cuello se levantó levitando, Vibranium.

Ojos océano junto a su brazo de vibranium estamparon un golpe final en la quijada de sonrisa perversa, y así como si se tratase de una pluma, sonrisa perversa cayó al suelo.

-No pensé nunca que tendría que salvar tus escamas fuera del agua. -la voz burlona de ojos océanos me desconcertaron.

-Iba a apuñalarlo con mi medallón de vibranium. -comenté moviendolo en su  dirección- Nunca había visto ese brazo.

Sus hombros se alzaron restándole importancia, él no quería hablar del tema, era su manera de salirse de las conversaciones, si bien lo conocía.

-Mejor te devuelvo al agua, casi anochece y aquella cola rojiza aparecerá. -sus brazos me envolvieron levantandome del suelo, me cargaba como si yo no pesara mayor cosa.

-Como si no te gustara verla. -sonreí.

---

Les tengo algo que decir... En mi mente a estado rondando la idea de escribir una historia completa, no un One Shot como tal, algo estilo fanfic, y pues esta seria una historia de Lucifer, con Tom Ellis (¿se han visto la serie? La súper amo) Y también rondó la idea de una historia con Sebastian, pero como no siempre ando con tiempo quisiera que ustedes me ayudaran a decidir cual hacer, y preguntarles claramente si me apoyarían en esta historia.

Pd: no olviden pedirme su one shot si así lo deciden, (lamento si tardo en entregarlos)

-Lía.