W A D.
Apreté la tuerca y suspiré viendo como Rick maldecía por lo bajo todo lo existente. Había vuelto a trabajar en el taller porque el mercado por el momento estaba tranquilo debido a unas investigaciones que se estaban haciendo por la zona, así que necesitaba sustento mientras eso se resolvía. En lo profundo de mí, me alegraba poder despegarme un poco de ese mundo, así fuera por tiempo limitado.
―Estúpido niño, ¿cree que puede marcharse cuando quiera? ―murmuró pésimamente ―Pero volverá... sí, él lo hará.
Alcé las cejas oyéndolo y finalmente cerré el capo del auto, subí al mismo y sonreí cuando el motor rugió como un verdadero animal al girar la llave.
Algún día podría dedicarme a esto de lleno o... no, vender drogas era lo que mejor sabía hacer.
Sacudí la cabeza, yo podía cambiar.
Alcé la vista al escuchar un repiqueteo, juré que sería Estefanía, pero la sorpresa fue grande al ver a Kate entrar con una chaqueta de cuero, un vestido gris pegado al cuerpo que terminaba en sus muslos y unas botas los suficiente altas para alcanzarme en altura. Se detuvo en una pose de diva total y bajó sus grandes gafas de sol por el puente de la nariz.
Sonrió y me señaló.
―A ti te busco, chico sexy ―sonreí de lado y limpié mis manos con un trapo que lancé al suelo después
Kate aquí solo significaba que Adara estaba en el asunto, y que por consecuente el asunto me interesaba.
―Wad, dile a la súper modelo que se aleje de mis autos.
―Tranquilo, Rick, es inofensiva, hablaremos en la oficina unos minutos.
―Como sea.
―Eso fue muy ofensivo ―me comentó Kate volteando los ojos antes de subir las gafas de sol a su cabeza
―Si te consuela... el tacón que me lanzaste sí me dolió ―sonrió y me acompañó a la oficina de Rick, me senté en la mesa de brazos cruzados y ella ocupó la silla de en frente
―Te lo merecías.
―Adara seguro también te contó la parte donde arreglé mi cagada ―se cruzó de brazos y me miró fijamente
―Eso depende, ¿te enojarías?
―¿Por qué lo haría?, es un halago que hable contigo de mí ―me encogí de hombros con una sonrisa pequeña en mi rostro ―No tengo problemas con que le cuente a su mejor amiga lo que ocurre en su vida, incluso si eso me incluye.
―Vaya... eres toda una joyita, Wad ―sonrió y suspiró antes de dar una palmadita ―Bien, imaginarás que no estoy aquí en vano, ¿cierto?
―Me gustaría saber un par de cosas, Kate ―asintió entrelazando sus dedos
―Imagino que serán cosas que Adara no te ha contado, ¿cierto? ―apreté los labios, pero terminé por asentir ―Puedes preguntar, pero eso no te asegura que vaya a responderte.
―Eso me basta ―dio un pequeño asentimiento ―¿Su cabello?
―Alondra ―fue lo único que dijo, sin embargo, no necesité más contexto, apreté la mandíbula
―¿Andy Jones?
―No sé qué hiciste ―ofreció una pequeña sonrisa de agradecimiento ―Pero funcionó, no ha vuelto a aparecer y te lo agradezco, Adi está más tranquila ―solté un suspiro de alivio
―¿No ha hablado con su abuela?
―Mira, Wad, no la presiones ―pidió ―Ella aún... no está lista, tiene que hacerle frente a prácticamente la crianza de toda su vida, necesitará tiempo.
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Mi razón para escapar {R. #2} ✔
Teen Fiction¿Cómo escapar de esa persona que te hace sentir tan viva, tan tuya, tan dueña de una libertad que creías no merecer?, simplemente no lo haces, porque no lo deseas, es la vida quien te pone en una encrucijada donde toda decisión parece derrumbar un e...