Capítulo 42

2.6K 187 20
                                    


Dasha

Llevo el vaso de agua a mi boca, estos días he dormido una mierda y la serenata de Derek no ayudó. Ahora la migraña que sentía me estaba matando y no me dejaba conciliar el sueño.

Miro por la ventana al perro mugriento jugar con la pelota, eran las dos de la mañana y parecía no estar cansado a pesar de jugar con Dom todo el día.

Definitivamente lo envidiaba.

Unos brazos me abrazan por atrás tomándome por sorpresa. Quito mi atención del animal para mirar a Alec.

- ¿Insomnio?

Niego acomodandome en sus brazos, recarga su cabeza en mi hombro sintiendo su fuerte pecho en mi espalda.

- Migraña.

Estira sus labios en una mueca, después  del accidente que sufrió el viernes sabía que había tenido dolores de cabeza, hable con el médico y dijo que era normal así que le recetó pastillas, antes de bajar a tomar agua me había encargado de robarle una.

No me tragaba el cuento del accidente así que tan pronto como pudiera iba a ir personalmente al instituto, podía mandar a alguien o decirle a uno de los chicos que hiciera lo que tenia entre manos pero todo lo que era acerca de Alec me gustaba hacerlo yo.

- ¿No te gustan los animales?

Pregunta viendo al perro. Sin embargo yo lo veo a él, estaba todo oscuro así que apenas veía el brillo de sus ojos debido a la luz de la luna.

- No los odio. - digo sin más.

- Dominik los ama, ¿cuantos tiene?

- Demasiados para un niño de su edad, solo tenía algunos cincuenta pero hace tiempo tuvo que hacerse cargo de unos más así que ya perdí la cuenta.

- ¿Todos son adoptados? - asiento.

- Cuando era pequeño tenía una gata, mi mamá me la regalo cuando le dije que quería un hermano. - susurra apenas audible.

- ¿Qué le pasó? - pregunto.

- Papá la regalo cuando tiro una colección de fotos de mamá y él, recuerdo que incluso caí en depresión.

- ¿Como era tu mamá? - me atrevo a preguntarle, respira profundamente y una sonrisa triste adorna sus labios.

- Era una alma libre "Soy un alma con cuerpo", lo decía todo el tiempo. Se la pasaba riendo, le encantaba hacer bromas y amba conocer a las personas, siempre quiso viajar por el mundo y llevar su cámara consigo.

- ¿Era fotógrafa?

- Nunca estudio pero le apasionaba el arte y desde que mis abuelos dejaron de apoyarla por pasar más tiempo  haciendo lo que le gustaba tuvo que abandonar la escuela y comenzó a trabajar desde su adolescencia, una vez ganó un concurso que le permitiría ir a Italia pero justo en ese momento estaba saliendo con mi padre y él no la dejó irse, tuvieron que seder el lugar a otra persona. - sonaba molesto al decir lo último, así que el hijo de puta aparte de ser una mierda como padre era un idiota controlador.

- ¿ Donde se conocieron ? - pregunto mirándolo.

- Justamente aquí en Moscú, mamá viajaba a lugares para tomar fotos y él trabajaba en ese tiempo en un club. Supongo que en una de las salidas de ella lo conoció... desearía tener  alguna clase de poder, regresar el tiempo y que nunca hubiese conocido a mi padre para que hubiese cumplido sus sueños.

Mi Maldita PerdiciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora