Parte 3 : 10

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Cuando estaba profundamente dormido, escuché las voces de las chicas que venían del exterior, todas de mal humor.

—Oigan chicos, reúnanse.

Para variar un poco, la cabeza me dolía una vez más.

Aunque sabía que esto iba a pasar, que te despertaran unos gritos por la madrugada, no era nada agradable.

—¿Qué pasa?

—Uhm, Hirata... Perdón pero ¿puedes despertar a todos los chicos? Es serio.

Shinohara notificó a Hirata con una mirada de disculpa. Junto a ella estaban el grupo de chicas, claramente molestas.

—¿Qué pasa tan temprano en la mañana?

—Lo siento, Hirata. Es algo que en lo que no estás involucrado, pero... nos hemos reunido aquí porque hay algo que debo verificar a toda costa.

Shinohara dio a todos, excepto a Hirata, una mirada de desprecio y luego habló.

—Esta mañana, bueno... faltaba la ropa interior de Karuizawa. ¿Sabes lo que eso significa?

—EH... ¡¿LA ROPA INTERIOR?!

Sí, era por supuesto este evento, hubo un tiempo que pensé que estaría bien evitarlo, pero decidí dejarlo pasar, por lo molesto que sería.

Shinohara e Ike continuaron escupiendo tonterías, hasta que Hirata salió en el tema.

—Entonces, Hirata. Puedes encontrar al culpable, ¿verdad?

—Eso... pero no hay evidencia de que los chicos la hayan robado. Existe la posibilidad de que Karuizawa la haya perdido.

—¡Es cierto! ¡No tenemos nada que ver con esto!

Continúe masajeándome la sien mientras observaba a Hirata, parecía que no había seguido mi consejo en lo más mínimo.

—Para demostrar su inocencia, es mejor que estén de acuerdo con la inspección de su equipaje de manera segura y digna.

Habiendo dicho eso, Hirata sacó su maleta.

—Tan miserable como soy, voy a responder a la petición de las chicas, es por eso que ustedes tienen que hacer lo mismo. ¿Bien?

—P... Pero...

—Por supuesto, puedo ser el primero.

Me deje guiar por todos y saque mi maleta junto a los demás.

Pero cuando planeaba seguir siendo arrastrado por todos. Lo que vi en mi maleta me dejo estupefacto.

¡Ibuki hija de p...!

Esa maldita perra. Había decidido colocar la ropa interior en mi bolsa, en lugar de la de Ike. Parecía que se estaba vengando por haberla molestado anteriormente.

Rápidamente metí la ropa interior en mi bolsillo, asegurándome que nadie me observara. Ya habría tiempo para vengarme de ella, una vez que esto pasara.

Fingí que no pasaba nada, mientras me formaba en la fila para la inspección.

—Registramos a todos. Pero no encontramos nada.

—¿De verdad?

—Sip. Estamos seguros ahora. Ninguno de los chicos es el culpable.

—Espera un minuto.

Maldita Shinohara, una cosa era molestar a todos, pero ahora me estaba causando problemas personalmente.

—Hirata revisa sus bolsillos, podían haberlo escondido en algún lugar de su ropa.

—Muy bien. Sin embargo, ustedes chicas deben entender una cosa. Si no encontramos nada aquí, entonces me gustaría que dejen de investigar a los chicos.

Esto era una completa mierda.

Solo pude ir directo a mi ejecución.

Una vez fue mi turno, Hirata me chequeo, notando obviamente el problema.

—Suzuki tampoco la tiene.

Luego que todos se dispersaran me encontré con Hirata. La razón porque podía mantener la calma hasta cierto punto, era que sabía que él me cubría.

—¿Eso era la ropa interior?

—Sí, alguien debió colocarla en mi maleta.

Diciendo eso, se las entregue.

—Confío en ti. No eres ese tipo de persona.

Eso era una tontería, no éramos tan cercanos para que confiaras ciegamente en mí.

—Suzuki, ¿podrías ayudarme a encontrar al culpable?

—Lo intentare, pero no esperes mucho.

Solo le seguí la corriente.

—Gracias, después, si encuentras al culpable... En ese momento quiero que me lo digas a mí primero. No se lo digas a nadie más.

—Entiendo. Te informaré primero. ¿Está bien?

Hirata y sus problemas mentales.

Cuando nos reunimos de nuevo, la discusión ya había comenzado una vez más.

—No se debe confiar en los hombres. ¡Es absolutamente imposible permanecer en el mismo lugar con ellos!

—Pero hay un pequeño problema para que los chicos y chicas vivan separados, ¿no crees?... El examen casi ha terminado. Ya que somos amigos, debemos creer en los demás y cooperar.

—Eso puede ser cierto. ¡Pero no podemos quedarnos en un lugar con ladrones de ropa interior!

En este punto, mi espíritu ya estaba acabado, aunque en la novela, esto podía parecer gracioso. Pero, una vez estabas involucrado, no tendría ninguna gracia.

Shinohara trajo una rama de un árbol y dibujo una línea, de manera protectora.

—Creemos que el culpable es un chico. Entonces, tracemos una línea aquí y dividimos el área entre chicas y chicos. Los chicos tienen absolutamente prohibido ingresar a nuestra área.

No recuerdo si fue Matsushita quien dijo que ella e Ike harían una buena pareja por ser feos y estúpidos. Pero en este momento, creía que tenía mucha razón.

—Si no nos crees, mueve tu tienda o lo que sea. No moveremos nuestra tienda y tampoco te ayudaremos a mover la tuya.

—¡Ah! Ya veo, bien entonces. No puedes soportar la carga de ser atrapado, mientras finges ayudar.

—Y no uses la ducha nunca más, ¿de acuerdo? No es broma dejar que un hombre que podría ser un ladrón pervertido la use.

Una completa tontería, Shinohara no tenía ninguna conciencia sobre la clase, causar problemas en medio de un examen especial era la epitome de la estupidez. Además, parecía estar más interesada en liberar su enojo, que en encontrar una solución real.

—Oye Hirata, ¿podrías ayudarnos? ¿Por el bien de Karuizawa?

—Ok, te ayudaré. Puede llevar algo de tiempo, ¿está bien?

—¡Gracias, Hirata! ¡Bien por nosotras, Karuizawa!

—Sip. Solo Hirata es de fiar.

Y la tontería se repetía una vez más.

Youkoso + 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora