Parte 4 : 9

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El último día del examen.

De camino al salón de la prueba me encontré con alguien inesperado.

—Suzuki.

—Buenos días Kushida.

Si, por alguna razón me topé con ella, la sensación era un poco incomoda, ya que nuestra conversación anterior había quedado a medias.

—Que coincidencia encontrarnos.

—Si lo es.

—¿Cómo vas con tu examen?

—Debería estar bien, ¿qué hay de ti?

Aunque sepa bien que Kushida está traicionando la clase, no se puede hacer nada al respecto. Sus pequeños juegos deben ser tolerados, ya que será de utilidad en el festival deportivo.

—Estamos bien, Horikita y Hirata están dando todo de sí.

¿Eso quiere decir que tú no estás ayudando? Solo ella puede presumir de su traición de forma tan descarada.

—Eso es genial, trata de no forzarte mucho.

Kushida mostro su sonrisa habitual.

—Suzuki se preocupa por mí, eso me hace muy feliz.

Si cualquier otro chico escuchara esas palabras, sumado a esa sonrisa, habría caído sin dudas. Lamentablemente, eso no funciona conmigo.

—Por supuesto.

Solo di mi respuesta estándar.

—Apropósito Kushida, hace unos días te vi hablando con Ryuen, ¿no te están intimidando? Si necesitas ayuda puedes decirme.

Kushida se paralizo por un segundo cuando mencione a Ryuen.

—Oh, no es nada, solo hablo conmigo por un pequeño asunto, no necesitas preocuparte por eso.

Su respuesta fue rápida y la excusa es medianamente creíble, no por nada su habilidad de comunicación esta al máximo. No importa, solo la estoy molestando un poco.

—Está bien, si necesitas ayuda, o si solo quieres hablar, puedes venir conmigo.

Pude ver como uno de sus ojos se crispaba, lo que acaba de decir, es algo que ella suele decirles a otras personas.

—Gracias, tú también Suzuki, espero que puedas confiar en mí del mismo modo.

Nos separamos con ese ambiente incomodo, aunque la persona que estaba incomoda era ella no yo.

Luego de la primera reunión de la mañana, que paso sin ningún cambio. Llegue a este salón, este salón que me había estado encerrando la última semana.

—Suzuki aquí.

Asentí, y me senté junto a Hiyori nuevamente.

Había logrado acercarme a ella de forma efectiva durante estos días.

Observe a Hiyori que me observaba de forma tímida.

—¿Pasa algo?

—No, no es nada, solo me preguntaba, ¿qué te pareció?

Luego que pregunto, me di cuenta a que se refería de inmediato.

—Es bastante bueno, nunca habría encontrado este libro por mi cuenta, gracias por prestármelo Hiyori.

—No fue nada, me alegro que te guste.

Hiyori se veía realmente feliz, luego de nuestros intercambios, ella me presto un libro. Estaba bastante claro que a ella le encantaban los libros, y estaba muy entusiasmada de compartir su pasatiempo. Una vez que sabias esto, era fácil acercarte a ella.

No paso mucho tiempo hasta que todos llegaran y tomaran sus lugares.

A primera vista, parecía que esta reunión terminaría como todas las anteriores, ya no había ningún intento de encontrar al VIP.

—¿Listos para las ultimas partidas?

Del mismo modo, saque la baraja para jugar, como hacia siempre.

Las mismas personas se reunieron para poder jugar.

Luego de que varios juegos terminaran, decidí que era hora de hacer mi movimiento.

—No creo que no pueda ganar ninguna partida.

—Olvida Suzuki, no puedes vencer a Albert.

Ishizaki se jactaba, como si fuera el mismo quien ganaba.

—No lo creo, debe ser que no tenga suficientes ánimos, por eso no puedo ganar.

—¿De verdad? Entonces aumentemos los puntos.

Satou fue quien hablo en ese momento.

—¿No está bien solo seguir jugando por diversión?

Hiyori respondió, me preguntaba si ella no quería perder más puntos, o era así de inocente.

—Mi error, solo aumentemos a 100 puntos, quiero recuperar los puntos que he perdido.

Satou continúo con su avance.

—Claro por qué no.

Fue Ishizaki quien contesto, se veía bastante seguro. Albert asintió, y de este modo, la apuesta incremento a 100 puntos.

Después de unas cuantas manos, los puntos de cada uno se veían de esta forma:

Albert 200, Ishizaki 100, Satou 90, Hiyori 0 y yo 110.

Así es, Hiyori aposto todo en un par de 8 y perdió. Ella era realmente lamentable, no había ningún problema con su cerebro, pero simplemente no sabía mentir en absoluto.

—No te preocupes Hiyori, te vengare.

—Está bien, confió en ti.

—Satou, tenemos que ganar esto.

—Bien.

De esta forma, pareció formarse una coalición para vencer a Albert.

En la próxima ronda, mis cartas eran K y Q de tréboles, una mano bastante buena.

Durante el preflop decidí aumenta la apuesta en 20 puntos, la cual todos siguieron.

Luego del flop las cartas en la mesa eran: Q de diamantes, 5 de picas y 8 de diamantes.

Las cosas se veían realmente bien para mí. Y aumente otros 20 puntos.

Esta vez, Albert e Ishizaki se retiraron, parecía que no tenían confianza.

—Voy todo.

Satou dijo eso con mucha confianza, apostando todos sus puntos. Me quede mirándola un tiempo, y luego de eso.

—También voy todo.

—¿Eh?

Una pequeña voz salió de Satou cuando volteamos nuestras cartas, ella tenía un par de 2.

Todos volteamos a verla de forma extraña.

—Pensé que estaba haciendo un farol, Suzuki aumento así la última vez.

Solo sacudieron la cabeza y esperamos a ver las otras cartas. Fueron un 6 de picas y un 9 de corazones. Y De esta forma, me puse por delante con 240 puntos.

Satou se recostó sobre la mesa, mientras Hiyori la consolaba, se veía realmente lamentable.

Youkoso + 1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora