Historia de youtubers

Tres hermanas y el mismo sueño. ¿Coincidencia?

Volvió a abrir los ojos. Clara seguía cayendo a cámara lenta. Seguía cruzando el cielo, o mas bien descendiendo. Había pasado una eternidad, o eso es lo que pensaba. Al principio había gritado, pero de su boca no salia ningún sonido. Nada, ni siquiera podía moverse. Simplemente la veía caer. La plataforma estaba oscura, llena de sombras, sin ninguna persona encima mas que ella. ¿Máximo? ¿Blanca? Meros hologramas, copias por así decirlo. Cada segundo que veía a Clara caer, Ana sentía como algo dentro de ella se desgarraba. Y no podía hacer nada. Solo llorar, y ver como su hermanita caía.

-¿Duele? ¿Duele ver como se te van las esperanzas?

Una voz sonó detrás de ella. Intento gritarle lo que le dolía, pero de su boca no salio ninguna palabra. Clara empezó a caer, cada vez mas y mas rápido. La presión que había sentido en la garganta se esfumo, pero no pudo gritar antes de que Clara desapareciera en ese mar de nubes.Todo se volvio negro después de eso.

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Se despertó alarmada. Ese recuerdo... Ese sueño... Era verdad que en su decimotercer cumpleaños su hermana le dio una sorpresa en un precioso vuelo en una plataforma... Pero...

La puerta se abrió de repente y Blanca, asustada, corrió hacia su hermana. Antes de que Clara pudiera evitarlo, Blanca estaba abrazada a ella y lloraba a moco tendido en su hombro.

-¡¡¡CLARA!!! ¡Estas bien! Pen... pensaba... qu...que-No pudo mas y se derrumbo en el hombro de Clara. Ella la abrazo y la consoló como pudo. Esa pesadilla también la había atormentado a ella, y mas ese final alternativo. Por qué...?

Se acabo, hasta ese momento había tenido miedo de hacerlo por lo que se podría encontrar en el otro lado, pero ya le daba igual.

-Blanca.-Su voz sonaba dulce, aunque firme.- Avisa a Town. Vamos a crear un portal.

Ya era hora de su propia revolución.

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Gritó. El grito había empezado en el sueño y acabo en su habitación. Jadeo un par de veces y deslizo los pies hasta que estuvieron fuera de la cama. El resto del cuerpo le siguió después. Se asomo al balcón y miro las estrellas. ¿Por qué todos los intentos para salvar a sus hermanas siempre le salían tan mal? Un pequeño escalofrió le recorrió la espalda y un pequeño movimiento en la habitación se produjeron.

- ¿Puedo pasar?

- Que yo sepa, ya estas dentro

-Digo al balcón.

Afirmo con la cabeza y Máximo dio unos cuantos pasos hasta situarse detrás de Ana. Le cogió de la cintura y se acerco hasta su oído.

-¿Estas bien?

Ana dudo en si contarle la verdad o no. Máximo siempre había tenido ese sexto sentido para saber si le mentían o no, sobre todo con ella.

-Yo... solo era una pesadilla sin importancia.

-Pues has gritado muy fuerte.

- ¿Estabas vigilando?

-Más bien estaba durmiendo.

-¿Tanto he gritado?

Máximo abrazo a Ana . Cuando se separaron, le miro a los ojos.

-¿Me vas a contar lo que te pasa Ana?- Ana negó con la cabeza y Máximo le dio un beso en los labios.

-Deberías volver a la cama, Máximo.

-¿A la mía? ¿No me puedo quedar aquí contigo?- Ana empezó a ruborizarse mientras Máximo terminaba la frase.

-N...NO ¡Ni se te ocurra!- Máximo que ya iba hacia la cama, puso morritos pero la negativa de Ana era muy clara y se fue a su habitación

-¡Sera tonto!- Ana fue hacia la cama, aunque no puedo evitar sonreir