DESTINADOS

CAPÍTULO 21

Dereck.

Fiesta de compromiso.

Me detallo en el espejo, traigo puesto un traje color azul, el cabello bien fijado en su lugar. Valeria me abraza por atrás y medio sonrío, está muy linda con un vestido celeste y maquillaje a juego con el color del vestido. Amelia y Liam organizaron una reunión para anunciar a todo el mundo sobre su compromiso, no me voy a oponer a nada, estoy conforme sabiendo que aún me ama y estoy mucho más a gusto porque ya se acostó conmigo y lo disfruté como nunca, voy por mi tercera vez. Esta noche no perdono y volveré a follar con mi mujer.

—Vamos, ya es tarde— me entrega su bolso y cuando intenta besarme paso de largo.

Sigo a mi auto y entro, segundos después me alcanza Valeria y entra mientras se arregla el cabello.

—¿Te echaste todo el frasco de perfume?

No contesto, no estoy de humor para bromas estúpidas, solo conduzco a casa del mejor amigo de Amelia, al llegar a la zona de la casa busco un lugar para estacionarme, el lugar está repleto. Encuentro un lugar a lado del auto de Matteo, bajamos y observo la casa. Eso no es una casa, es una mansión y este chico vive aquí solo.

—Dame la mano— me pide y suspiro pesado.

La prensa está a la entrada de la mansión, esto es un problema. La tomo de la mano y nos encaminamos a la entrada, los flashes de las cámara me ciegan.

—Capitán, ¿qué piensa sobre el compromiso de la teniente Muller con el capitán Ivanova?

No respondo, ¿qué me parece? Me parece una mierda, es una maldita estupidez. Pero no se preocupen, yo me encargaré de que eso no dure mucho.

Al entrar hay mesas organizadas en el jardín y dentro de la casa, Liam y Amelia se pasean de aquí para allá en las mesas saludando, cuando Liam nos mira se acerca.

—Dereck, que gusto que hayas venido— nos saludamos hipócritamente.

—Gracias por invitarnos— Liam se saluda con Valeria.

—Gracias a ti por venir— me dice Amelia y se acerca para dejar un beso en mi mejilla.

Su olor es delicioso y se ve hermosa con ese vestido color crema. Su cabello está ondulado y brillante, su piel se ve reluciente y sus labios me están tentando a besarla aquí, frente a todos. Amelia nos lleva a una mesa en la cual está, Nadia, Lilith, Daniel, Miguel y otros compañeros más, en esta mesa también está Ángel compartiendo con Lilith. Vaya, vaya.

—¿Qué tienes? Estás extraño.

—Estoy bien— le doy un pequeño beso.

—Buenas noches— habla Liam mientras tiene su mano posada en la cintura de Amelia— Es un placer contar con la presencia de todos aquí, como sabrán esta reunión es para anunciar mi compromiso con Amelia. Para mi es un completo honor que todos ustedes se enteren que la hija del ministro Muller es mi prometida y dentro de poco nos vamos a casar.

—Mi prometido y yo queremos anunciarles que nuestra boda será dentro de un mes— informa Amelia— Están cordialmente invitados todos, me encantaría compartir ese momento tan importante para mi con todos ustedes.

Su mirada se posa en mi, la detallo de pies a cabeza, estoy pensando en las formas de como la cogere, imaginándome que lencería trae bajo ese vestido, espero que sean bragas pequeñas solo para correrlas a un lado y meterle la polla en ese coño apretado. Los minutos transcurren en charlas entre todos, sirven comida y vino, estoy ansioso, quiero que todos se distraigan para llevarmela y coger. Nuestras miradas se cruzan y se levanta para irse.